Yahoo Estilo La gran noche de los Premios ACE: quiénes fueron y el emotivo homenaje a Enrique Pinti
Luego de tantas postergaciones, el lunes por la noche, en el teatro El Nacional, se entregaron los premios ACE correspondientes a los años 2019, 2020 y 2021. Con una transmisión en vivo por la TV Pública y con la siempre hábil y conocedora conducción de Gabriela Rádice, los galardones de la Asociación Cronistas del Espectáculo volvieron a tener una gala presencial, a la que acudieron muchísimas figuras del ambiente artístico.
La entrega coincidió con los 30 años de la primera edición de los premios que, en esta oportunidad, se dividieron en 29 ternas y en medio del luto por la muerte de Enrique Pinti, quien falleció el domingo a los 82 años. Unos cuantos ganadores recordaron al creador de Salsa criolla en el instante que daban sus discursos de agradecimiento. Y, cuando recibió un premio especial por su gran labor en el manejo de la pandemia y sus protocolos, el productor Carlos Rottemberg pidió un aplauso que se convirtió en uno de los pasajes más emotivos de la gala, mientras en la pantalla se veían imágenes del gran capocómico.
La emoción volvió a hacerse presente en los ACE cuando se homenajeó a quienes murieron en estos últimos tres años, con un segmento titulado “En memoria”. Fueron muchos, así que también hubo ausencias notorias en el listado de fallecidos, pero en el segmento se recordó a los directores Agustín Alezzo, Hugo Urquijo y Manuel Iedvabni; al productor Héctor Aure; a los escritores Jorge Schussheim y Jacobo Langsner; los actores Beatriz Bonnet, Edgardo Nieva, Hugo Arana, Horacio Fontova, Laura Bove, Marcos Mundstock, Nelly Prince, Libertad Leblanc, Elvia Andreoli y Donna Caroll; y las recientes pérdidas de Valentina Fernández de Rosa, Gerardo Rozín, Arturo Bonín y Enrique Pinti, entre muchas otras .
Entre los artistas presentes estuvieron Graciela Dufau, Arturo Puig, Selva Alemán, Laurita Fernández, Nicolás Vázquez, Lizy Tagliani, Alejandra Darín, Sebastián Wainraich, Dalia Gutman, Denise Dumas, Campi, Adriana Salonia y muchos otros.
La vis cómica, la obra teatral dirigida y escrita por Mauricio Kartun estrenada en septiembre de 2019 en el Teatro San Martín, se quedó con cinco estatuillas de las nueve nominaciones que obtuvo y fue la obra con más premios de la noche. Entre ellos, el ACE de Oro para Mario Alarcón, quien también lo ganó como mejor actor; así como Stella Galazzi fue reconocida como mejor actriz, Mauricio Kartun como autor y Leandra Rodríguez como iluminadora.
Para el cierre de la noche, Alarcón subió a buscar su segundo premio, el más importante de la velada, el ACE de oro que se lo entregó Mauricio Dayub, ganador de ese premio en la última gala, y con lágrimas en los ojos repasó su extensa carrera y recordó a sus seres queridos que murieron en el último tiempo. Cabe recordar que hace muy poco, Mario Alarcón fue premiado con el Konex de Brillante, por su trabajo como actor durante la última década.
El Complejo Teatral de Buenos Aires obtuvo nada menos que cuarenta nominaciones. Así pues, de las 10 categorías en las que estuvo presente El siglo de oro trans, la versión libre de Gonzalo Demaría sobre Don Gil de las calzas verdes, de Tirso de Molina, se llevó cinco premios (mejor dirección de Pablo Maritano; escenografía de Mariana Tirantte, el vestuario de María Emilia Tambutti y la revelación femenina a Payuca, además del premio compartido a la mejor producción junto a El adulador, también del CTBA).
Happyland, que cosechaba también diez nominaciones, se quedó con la estatuilla a mejor actuación masculina en musical para Carlos Casella y Axel Krygier se alzó el galardón por la música original.
Otra de las obras en llevarse varios premios fue el musical Hello, Dolly! (mejor musical, mejor dirección para Arturo Puig, protagonista femenina para Lucía Galán y Ángel Mahler como director musical). Por su parte, la obra documental Jauría, de Jordi Casanovas, se quedó con el premio al mejor drama, a la protagonista femenina (Vanesa González) y a su director (Nelson Valente). La obra Después de nosotros obtuvo dos premios (para María Rosa Fugazot en la categoría actriz de reparto) y como revelación masculina al joven Matías Recalt. Por su parte, Osmar Núñez se llevó el galardón a mejor actor en drama por su participación en Agamenón.
Hubo una mención especial para Chacho Garabal por la apertura de los Jardines del Auditorio de Belgrano durante la pandemia. Otro premio especial fue para Edith Margulis por mantener abierta la Biblioteca Café también en tiempos difíciles. Por su parte, Sebastián Blutrach recibió una distinción especial por la nutrida programación del teatro El Picadero y, sobre todo, por la apertura de su terraza para la realización de shows y recitales durante el peor momento de la pandemia. Y otro reconocimiento muy aplaudido fue el que le fue otorgado al Teatro Nacional Cervantes por su producción federal.
Respecto al teatro alternativo, los premios quedaron para Oscar Barney Finn como mejor director por Muchacho de luna, quien le agradeció a Paulo Brunetti (también nominado) por su gran trabajo actoral en este unipersonal. Y también consiguieron un ACE: La decisión, de Pacho O’Donnell, como mejor obra; mientras que Diego Gentile y Lorena Vega se quedaron con los premios de actuación por Late el corazón de un perro e Imprenteros, respectivamente. Entretanto, Marco Antonio Caponi (ausente en la ceremonia) obtuvo la estatuilla a la mejor actuación en obra para un solo personaje, por su trabajo brillante en El romance del Baco y la vaca, la obra de Gonzalo Demaría. El taquillero Roberto Moldavsky, por su espectáculo Moldavsky, el candidato 2019, se llevó el premio a mejor espectáculo de humor.
Para el cierre de la noche, Nora Lafón, la presidenta de los premios, recordó a Agustín Alezzo, una figura indispensable del teatro argentino que solía sentarse en la fila 2 del teatro El Nacional con una sonrisa cálida, y rememoró una anécdota que vivió junto a Enrique Pinti cuando protagonizaba Salsa criolla y los brillos escaseaban y él se amargaba porque quería excelencia en su espectáculo. “Ese es nuestro teatro”, aseguró. Para ese entonces, sólo se veía ocupada la mitad de la platea de El Nacional. Algunos podrán decir que las ceremonias de premios son largas, pero lo cierto es que los artistas tienen poca paciencia y abandonan el teatro antes de tiempo. Algunos para celebrar por anticipado, otros por la decepción que a veces causa no llevarse un premio a casa.
Queda para pensar si el año que viene la asociación que entrega los ACE se planteará la propuesta que instaló hace poco el productor Carlos Rottemberg: ¿es necesario un premio máximo, una estatuilla dorada para premiar al mejor de los mejores? Está por verse.
