EFE Latam Videos
Ciudad de Panamá, 30 dic (EFE).- En 25 años bajo administración panameña el canal de Panamá completó una ambiciosa ampliación, y encara ahora dos temas críticos: el agua y la diversificación del negocio. Ambos requieren soluciones perentorias que, al menos conceptualmente, están claramente dibujadas, asevera el administrador de la vía interoceánica, Ricaurte Vásquez. "Esos son los retos que tenemos, digamos, para la próxima década (...) hemos hecho la gestión financiera de tal manera de poder crear una plataforma y una hoja de balance muy robusta para poder acometer tanto el tema hídrico como el de diversificación de actividades" y generar con ello "una nueva etapa de crecimiento", afirma Vásquez en una entrevista con EFE. El 25 aniversario del canal en manos panameñas, que se celebra este martes, llega luego de que la vía, un paso de 82 kilómetros entre los océanos Atlántico y Pacífico por el que transita el 3 % del comercio mundial, encaró, y con mucho éxito, una de las peores sequías de su historia. También en medio de una sorpresiva arremetida del presidente electo de EE.UU., Donald Trump, que se queja de las "exorbitantes" tarifas del canal y de una supuesta influencia china en la vía, por lo que amenaza con exigir la "devolución" de su operación a manos estadounidenses. Las expresiones de Trump hallaron una respuesta contundente del presidente de Panamá, José Raúl Mulino: el canal es y será panameño, en su operación no tienen control directo o indirecto ni China, ni Europa ni EE.UU., y los peajes no se ajustan a capricho de los presidentes sino por el dictamen del mercado. Estados Unidos, que construyó el canal, lo inauguró en 1914 y lo transfirió a Panamá el 31 de diciembre de 1999, es el principal usuario de la vía, seguido de lejos por China. Antes de la transferencia, "el propósito nacional era llegar al canal", y ahora debe ser mantener vigente "el recurso más importante del país: su angostura y su ubicación", dice Vásquez. La solución híbrida El cambio climático es un reto para el canal, el único de agua dulce en el mundo. La sequía estacional agravada por el fenómeno El Niño obligó a la vía restringir el tránsito de buques a mediados de 2023 y durante buena parte de 2024. Los dos lagos artificiales que alimentan al canal también abastecen a más de la mitad de los 4,2 millones de habitantes de Panamá y en ese contexto, la administración de la vía impulsa la creación de un nuevo embalse, un proyecto de 1.200 millones de dólares conocido como Río Indio. El canal está desarrollando un censo en las comunidades que se verían afectadas por el nuevo embalse en apego a los "estándares internacionales en materia de manejo de poblaciones, asentamientos humanos y todo lo demás", destaca Vásquez a EFE. Nuevos negocios "El Canal de Panamá es la piedra angular sobre la cual descansa la operación logística" del país, y la pasada sequía dejó claro que hay que diversificar sus servicios, afirma el administrador. Con la mirada puesta en ese objetivo, señala que se "exploran posibilidades de poner carreteras, una central de almacenes" en una sección de la ribera oeste del canal, con lo que ampliaría "su papel como ruta más allá de simplemente el tránsito de buques". "Estamos haciendo los estudios para ver la posibilidad de mover otros productos (...) Hay toda una serie de elementos que hay que discutir aún pero el concepto (...) lo vemos absolutamente claro, lo vemos dibujado", añade. Durante la Conferencia Internacional Marítima de Houston en noviembre pasado, Vásquez dijo que entre las opciones de diversificación el canal analizaba "formas de transporte como gasoductos". Las principales rutas que atiende el canal son la Costa Este de Estados Unidos-Asia; Costa Este de EE.UU.-Costa Oeste de Suramérica, y Europa-Costa Oeste de Suramérica. Pasa todo tipo de carga, desde portacontenedores, el segmento estrella del negocio, hasta buques refrigerados con frutas, pasando por graneleros, gaseros, petroleros y portavehículos. La amenaza de una guerra comercial Ante la amenaza de una nueva guerra comercial impulsada por Trump, que ha prometido aplicar aranceles a China, México y Canadá en cuanto asuma el Gobierno de EE.UU. el próximo 20 de enero, Vásquez garantiza que el canal de Panamá "seguirá siendo la ruta más eficiente". "Cuando se imponen barreras arancelarias el mercado encuentra alguna forma de llegar" aunque "a un precio más alto", asevera. El canal de Panamá es una pieza fundamental de la economía del país. Obtuvo ingresos por unos 4.986 millones de dólares en el año fiscal 2024, un 1 % más que el ejercicio anterior, y entregó al fisco un aporte 2.470,7 millones de dólares, pese a la sequía que contrajo en un 21 % el tránsito de buques. Giovanna Ferullo M. (c) Agencia EFE