Ofrece Wiego una radiografía del trabajo informal y brinda herramientas para la exigencia de derechos

Sally Roever, coordinadora internacional de Mujeres en Empleo Informal: Globalizando y Organizando (WIEGO, por su sigla en inglés), organización dedicada a promover el empoderamiento de las personas trabajadoras –particularmente de las mujeres– en economía informal para garantizar sus medios de sustento, señala a México como un país que si bien en el papel, está avanzado en el tema de derechos humanos, es algo que aún sólo queda en el papel.

Sin embargo, señala que contrario a lo que se piensa, México con poco más de un 53% de informalidad, es de los países con menor índice de trabajo informal a nivel mundial.

Hace unas semanas, Mujeres en Empleo Informal: Globalizando y Organizando llevó a cabo su asamblea general, en la cual participaron personas en empleo informal de más de 30 nacionalidades, incluyendo países de América, Asia, África y Europa. Esta es la primera ocasión que se realiza en México, aprovechando la existencia del trabajo que se realizan en nuestro país, coordinado por Tania Espinosa Sánchez.

Justo, Tania Espinosa, Coordinadora de Ciudades Focales de la Ciudad de México de WIEGO, coincide en el tema de derechos humanos, pues de acuerdo con su experiencia, se tiene un problema que radica en la misma autoridad al brindar derechos para luego atropellarlos, es ahí donde la organización para la que colabora se hace presente, pues más allá de apoyos monetarios, se busca empoderar y asesorar a lo grupos informales para que logren una exigencia de derechos efectiva.

La clave para WIEGO ha sido trabajar con líderes de grupos de trabajadores informales, pues de hacerlo de forma individual, sería imposible, asegura, Tania Espinosa.

Por su parte, Sally Roever comparte que en el caso de México, es más fácil ubicar a los trabajadores en informalidad, pues la misma cultura permite identificar a grupos concretos como los tíaguistas, los organilleros, los vagoneros, etcétera.

Esto les ha permitido avanzar en la exigencia de derechos para el sector informal, el cual se vio incrementado a raíz de la pandemia, pero que a partir de ello, han colaborado de forma ordenada con los líderes de los grupos, siendo estos los encargados de bajar la información y las herramientas a las bases, así como los apoyos económicos brindados en su momento.

Sin duda, Wiego ha tenido grandes avances, permitiendo al campo del empleo informal exigir sus derechos humanos y laborales, sin que esto signifique dejar o modificar la labor de los grupos laborales que han encontrado en la informalidad, su modo de vida.

Finalmente, tanto Sally Roever como Tania Espinosa afirmaron que todos los trabajadores y trabajadoras deben tener los mismos derechos y oportunidades, de ahí que WIEGO busque generar cambios al fortalecer a sus organizaciones, expandir la base de conocimientos sobre la economía informal e incidir en las políticas locales, nacionales e internacionales.

Sally Roever, coordinadora internacional de Mujeres en Empleo Informal: Globalizando y Organizando
Sally Roever, coordinadora internacional de Mujeres en Empleo Informal: Globalizando y Organizando