La salud de Jorge Lanata: fue operado exitosamente por una isquemia intestinal
Este miércoles, la salud de Jorge Lanata volvió a ser noticia . El periodista, que volvió a ser trasladado de la Clínica Santa Catalina al Hospital Italiano por un cuadro de fiebre, debió ser operado de urgencia este miércoles al mediodía. El motivo: una isquemia intestinal.
Según pudo saber LA NACION, la intervención resultó exitosa y habrá que esperar cómo evoluciona en las próximas horas. “Salió bien”, señaló su hija, Bárbara Lanata, consultada por este medio. Se trató de una primera etapa, en la cual se le extirpó parte de un intestino. Si evoluciona favorablemente, el jueves podría ser nuevamente intervenido. Aún no se dio a conocer un parte médico oficial.
Al retirarse del establecimiento, su esposa Elba Marcovecchio conversó con los medios presentes. “Jorge salió, es fuerte; es un gladiador. Hay que esperar”, señaló en primera instancia. “Está en las mejores manos, hay que dejar que los médicos decidan”, agregó.
La periodista María Julia Oliván había recurrido previamente a su cuenta de X (ex Twitter) para informar: “Terminó la cirugía y salió bien”.
Terminó la cirugía y lanata salió bien
🙌— María Julia Oliván (@mjolivan) October 9, 2024
La isquemia intestinal es una afección grave que compromete el flujo sanguíneo hacia los intestinos, lo que genera un daño en los tejidos intestinales. En este sentido, Lanata fue intervenido mediante una laparoscopía.
Esta obstrucción en el intestino fue detectada al realizarle unos estudios de control en una tomografía abdominal. Luego de una junta médica, los profesionales decidieron intervenir al periodista a través de la técnica de laparoscopia. Los especialistas advirtieron que si había alguna complicación iban a proceder a realizar una cirugía más compleja, que podría durar entre dos y tres horas.
“Alrededor de las 11 de la mañana cerraron el pabellón de trasplantados del Hospital Italiano y ahí empezó a surgir esta noticia de que algo estaba pasando. Enseguida, el diagnóstico de la junta médica arribó a una isquemia intestinal, que es una obstrucción en el intestino. Con las comorbilidades que tiene Lanata (una persona trasplantada, con EPOC, diabetes y demás) se complica”, explicó Laura Ubfal desde la mesa de Intrusos.
El último parte médico
El sábado, Jorge Lanata tuvo que ser trasladado nuevamente desde la clínica de rehabilitación Santa Catalina al Hospital Italiano debido a un cuadro infeccioso. El lunes, su mujer Elba Marcovecchio compartió el último parte médico que señalaba que su marido se encontraba en terapia intensiva y bajo tratamiento, aunque con un “leve deterioro en su función renal”.
“El paciente Jorge Ernesto Lanata se encuentra internado en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Italiano de Buenos Aires y está bajo estudio por un cuadro infeccioso. Su condición hemodinámica es estable, con un bajo requerimiento de medicamento vasopresor. Además, está conectado a asistencia ventilatoria mecánica con descenso de drogas sedativas”, indicaba el informe médico aunque un dato generaba preocupación: “Actualmente, evoluciona con leve deterioro en la función renal; sin embargo, no hay requerimiento de soporte dialítico hasta el momento”, agregaba el comunicado al tiempo que advertía que “el paciente continuará internado en dicha Unidad de Terapia Intensiva para recibir el tratamiento específico necesario”.
Tras compartir en sus redes el informe, Marcovecchio le agradeció a toda la gente que sigue rezando por la salud del conductor.
Las idas y vueltas de Lanata
El 14 de junio, Lanata llegó al Hospital Italiano para someterse a un estudio de rutina. Sin embargo, en medio del procedimiento sufrió una complicación y debió quedar internado en terapia intensiva; donde estuvo tres meses. El 10 de septiembre, el periodista fue derivado a la clínica de neurorrehabilitación Santa Catalina para empezar su rehabilitación. Si bien durante los primeros días estuvo compensado, con el correr de los días se descubrió la sintomatología propia de un cuadro infeccioso. Tras iniciarse un tratamiento con antibióticos que no dio el resultado esperado, el 18 de septiembre fue nuevamente trasladado al Italiano para llevar adelante un seguimiento más preciso.
Una neumonía y un cuadro febril lo mantuvieron durante seis días en terapia intensiva; luego fue dado de alta para continuar su rehabilitación en la clínica del barrio de San Cristóbal. El jueves pasado un parte médico señalaba que Lanata mostraba una “buena tolerancia a la desconexión” en lo referido a respiración mecánica, que seguía adelante con su tratamiento antibiótico y que presentaba “mejoras a nivel de conciencia”, aunque continuaba con “desorientación y confusión”. “Continúa con el plan integral de rehabilitación interdisciplinario programado al ingreso adaptado a su estado clínico, incluyendo kinesiología respiratoria, kinesiología motora, terapia ocupacional, fonoaudiología y neuropsicología, con buena tolerancia. En plan de cumplir con los objetivos planteados por el Servicio de Kinesiología Respiratoria, el paciente se encuentra en periodo de adaptación a la oclusión de la cánula de traqueotomía”, finalizaba el informe, que daba cuenta del tratamiento que llevaba adelante el periodista en su proceso de rehabilitación.
Sin embargo, la complicación en el cuadro infeccioso determinó nuevamente su derivación al Italiano durante el día sábado . Este mediodía, la noticia de que debía ser intervenido de urgencia debido a una isquemia intestinal volvió a alertar a todos sobre la delicada salud del periodista.
Giro en medio de la interna familiar
Desde que Jorge Lanata está internado, una fuerte disputa familiar se generó entre sus hijas, Bárbara y Lola, y su actual esposa, Elba Marcovecchio. Hace unas semanas, las jóvenes recurrieron a la justicia no sólo para pedir que se les dé participación en las decisiones que conciernen a la salud de su padre (algo que hasta hace algunas horas estaba en plena potestad de Marcovecchio) sino también para que la administración del patrimonio del periodista vuelva a manos de su apoderada de siempre, su secretaria Alejandra Mendoza.
Esta mañana, la jueza Lucila Inés Córdoba resolvió que la hija mayor del periodista, Bárbara, tendrá el mismo poder de decisión en los tratamientos médicos que se le realicen a su papá que su actual esposa. En consecuencia, los centros médicos deberán brindar la información sobre la evolución del periodista a ambas mujeres y las dos podrán decidir sobre los pasos a seguir .
En relación con los bienes del fundador de Página/12 y creador del ciclo televisivo Periodismo Para Todos (PPT), LA NACIÓN pudo saber que será nuevamente su apoderada, Alejandra Mendoza, la encargada de ocuparse de las cuestiones referidas a su administración.
Tras conocerse la noticia, la palabra de Elba Marcovecchio se convirtió en la más buscada. “De eso no sé”, dijo la abogada ante las cámaras de Intrusos mientras ingresaba al Hospital Italiano esta mañana. Luego de aclarar que “la información médica siempre se les brindó”, la esposa del periodista dijo desconocer el fallo de la jueza, ya que de las resoluciones judiciales se encargan sus abogadas.
“Igual ya saben lo que opino, ya lo dije”, lanzó la letrada haciendo referencia a este conflicto familiar (que incluye acusaciones cruzadas) que se desató en medio de estos meses de internación del periodista. “ Es una interna muy feroz porque es en el medio del profundo dolor de acompañar a alguien que amas, así que me parece un poco cruel ”, remató antes de ingresar a ver a su marido.
La que sí habló al respecto apenas se conoció la demanda fue su representante legal y amiga, Guadalupe Guerrero. “Vamos a contestar los agravios para manifestar la verdad de los hechos”, sostuvo la letrada mientras aclaró que Elba está muy mal, muy angustiada y destruida pero, sobre todo, preocupada por la salud de Jorge. “Para ella el dolor es doble, tendría que estar dedicada exclusivamente a cuidar a Jorge, y en este momento tiene que estar preocupada por una contienda judicial que parece innecesaria”, opinó. “Es una denuncia muy grave y muy agraviante. Las cosas detalladas que pudimos ver no son ciertas. Es difícil hacer frente a tanto daño y tanta mentira”, concluyó.
Con la colaboración de Pablo Montagna