La última palabra sobre Les Luthiers acaba de ser publicada: cómo es el libro que cuenta la historia del grupo... “de la L a la S”
La última gira de Les Luthiers concluyó el 10 de diciembre de 2023 en Bahía Blanca. Esa noche no solo se cerró un recorrido por 26 ciudades de 10 países que convocó a 173.000 personas. Quienes estuvieron allí aplaudieron por última vez sobre un escenario al grupo más extraordinario que conoció el espectáculo argentino a partir de la unión virtuosa entre la música y el humor.
Lo que no sabíamos hasta ahora es que la última palabra sobre Les Luthiers todavía estaba pendiente. No había sido escrita hasta que Alex Grijelmo, el destacado periodista y autor español reconocido en el mundo de habla hispana por su especial dedicación al cuidado del lenguaje, quiso dejar constancia desde su condición de luthierómano que debía ponerle la firma al capítulo final de esa historia maravillosa.
Así nació la tercera y definitiva edición de Les Luthiers de la L a la S, que acaba de publicar Debate. Aquí se agrega algo más que un centenar de páginas (toda una segunda parte completa) a las dos versiones previas, de 1991 y 2007, que debemos a otro luthierómano de la primera hora, el también periodista, escritor y humorista colombiano Daniel Samper Pizano.
Los seguidores de Les Luthiers conocían de sobra ese riguroso trabajo, mezcla de historia, cronología y ensayo, escrito por Samper con el mismo espíritu lúdico, mordaz y regocijante usado por el grupo para elaborar cada uno de sus shows. Por lo tanto, Samper aparecía naturalmente como el autor ideal para contar la gran aventura artística del autotitulado “conjunto de instrumentos informales” durante más de medio siglo. Tenía otra espléndida muestra hecha en forma de libro para justificarlo, Cantando bajo la ducha (1994), escrito junto a Jorge Maronna (uno de los fundadores de Les Luthiers), un divertido y muy didáctico texto sobre la teoría y la historia de la música.
Cantando bajo la ducha podría leerse tranquilamente antes de Les Luthiers de la L a la S, en parte porque nos revela todo el inmenso y riguroso conocimiento musical que tiene cada una de las composiciones del grupo, y en parte porque es fácil reconocer en ellas el carácter y el espíritu humorístico de las palabras concebidas por Maronna y Samper. Y también después, para cotejar cada anotación del libro sobre géneros, estilos, escuelas, formas y herramientas musicales con los cuadros representados tantas veces y en tantos lugares a lo largo de los años.
El siguiente paso es el encuentro con Memorias de un Luthier (2017), mezcla de libro de memorias, estudio y anecdotario sobre la relación que se estableció entre el grupo y las grandes creaciones de Johann Sebastian Mastropiero. Fue escrito una vez más con inmenso sentido del humor por Carlos Núñez Cortés, otro de los miembros fundadores, que se retiró después de Gran Reserva, la antología estrenada el mismo año de publicación del volumen.
Queda como complemento ilustrado de todo este camino La vida privada de Les Luthiers (2017), también con textos de Samper Pizano que en este caso funcionan como acompañamiento de un enorme catálogo de fotografías tomadas por Maronna a partir de 1967. “Las fotos del grupo en sus momentos de intimidad tomadas a lo largo de 50 años”, señala el título completo.
El círculo literario abierto en torno de Les Luthiers incluye a estos tres libros, pero se abre y se cierra fuera de toda duda con el completísimo trabajo que inició Samper y ahora completa Grijelmo, confeso “cholulo” (así se presenta) de Les Luthiers, a quienes descubrió en 1975 cuando formaba parte de un grupo español de música folk. Con el tiempo se convirtió, además de entusiasta seguidor del grupo, en amigo de Marcos Mundstock y Daniel Rabinovich.
No podría haber mejor estímulo para la conexión entre Grijelmo y dos de los luthiers fundadores que esos espléndidos juegos de palabras de los que están hechos varios de los mejores momentos de la historia del grupo. La especialidad del autor de la segunda parte de Les Luthiers de la L a la S es precisamente el estudio de las palabras y el lenguaje en el idioma español.
Esa coincidencia explica, por ejemplo, el pormenorizado relato del acto realizado en 2019 en la sede principal del Instituto Cervantes, en Madrid, lugar al que llegaron Les Luthiers para recibir un homenaje y depositar su legado en la Caja de las Letras. Del mismo modo se describe en el libro la participación del grupo en el Congreso Internacional de la Lengua realizado en Córdoba, en 2019, junto a la ponencia (“desternillante intervención de quince minutos”) de Mundstock, reproducida en forma íntegra.
Grijelmo concibe esta extensa segunda parte que ahora se suma al texto original con rigor periodístico y la ligereza de quien disfruta a pleno la materia con la que trabaja el texto, sencillamente porque siente una identificación total con ella. “En estas páginas no aspiro, por tanto, a la neutralidad”, dirá en un momento del relato, escrito en primera o tercera persona según la necesidad del momento.
Este tramo incluye “perfiles vistos de frente” de quienes se sumaron en los últimos años al grupo como miembros estables: Horacio Tato Turano, Martín O’Connor, Roberto Antier y Tomás Mayer-Wolf. A cada uno, el sagaz autor los interroga sobre sus músicos y sus humoristas predilectos, además de los sacrificios, los momentos inolvidables y las metidas de pata que enfrentaron en escenarios y giras.
Le toca a Grijelmo hablar de los muchos homenajes recibidos por Les Luthiers en el último tramo de su trayectoria y de varias actuaciones destacadas, entre ellas el encuentro con Martha Argerich y Daniel Barenboim en el Teatro Colón (2014), los primeros recitales sin Rabinovich (fallecido en agosto de 2015) y la última aparición en escena (mayo de 2019) de Mundstock, que nos dejó en abril de 2020.
También se recorren al detalle en esta flamante segunda parte los espectáculos que Les Luthiers llevaron a escena “por medio mundo” entre 2014 y 2023: las antologías ¡Chist!, Viejos hazmerreíres y Gran Reserva, así como el cierre brillante (“Por todo lo alto”, es el título) de la historia del grupo sobre el escenario con el estreno de Más tropiezos que Mastropiero, celebrado regreso al mundo de los espectáculos originales, que en esta ocasión incluyó nueve piezas nuevas.
Algunas observaciones sobre la vida del grupo en la pandemia y después de ella, las últimas giras, varias anécdotas y un completo apéndice (guía de instrumentos, cronología de los shows, discografía, videografía y elogios de la crítica especializada) completan el volumen.
Hay un sello personal genuino en el tramo escrito por Grijelmo, pero a la vez se aprecia con notable naturalidad la continuidad entre la primera parte que Samper Pizano cerró en 2014 y este agregado. Todo el tramo inicial a cargo del escritor colombiano conserva el mismo valor de la publicación original.
Allí están los capítulos titulados a partir de cada nota de la escala musical, del Do al Si. También la primera parte del viaje artístico del grupo, marcada por la prematura desaparición de Gerardo Masana. Cuatro impecables perfiles de los otros fundadores: Maronna, Rabinovich, Mundstock, Núñez Cortés y Carlos López Puccio. Y la proyección al mundo de una creación que nunca dejó de ser argentina y hoy tiene reconocimiento universal.
La despedida a Mundstock y Rabinovich, en tanto, está presente en cada página escrita por Grijelmo. “Marcos y Daniel –escribe en la introducción a la segunda parte- contribuyeron a crear un universo que, como se le supone a todo universo, no solamente los sobrevivió, sino que además se hizo infinito, a pesar de que la trayectoria escénica de Les Luthiers se acabara en el año de gracia de 2023. (Estamos hablando de Les Luthiers, así que para ellos y sus seguidores todos los años son de mucha gracia).” La reflexión tiene línea directa con la pregunta que Grijelmo se plantea sobre el final: ¿asistimos en diciembre de 2023 al cierre definitivo de la historia de Les Luthiers? Los miembros fundadores que permanecieron hasta el último día (Maronna y López Puccio) esbozan allí una posible respuesta.
A primera vista parece escrita aquí la última palabra sobre Les Luthiers. Pero, como corresponde a la esencia del grupo, siempre hay lugar para algo más. En el sello que acompaña desde la portada la flamante publicación de Les Luthiers de la L a la S se lee: “Edición definitiva (aproximadamente)”.