Una participante de La Voz Argentina contó que fue víctima de abuso: “La música me salvó la vida”

Naiquen Galizo, de 32 años, conmovió a los coaches con su talento y compartió su dura historia personal.
Naiquen Galizo, de 32 años, conmovió a los coaches con su talento y compartió su dura historia personal.

El jurado sigue sumando figuras a cada uno de sus equipos. Lali Espósito, Soledad Pastorutti, Mau y Ricky, y Ricardo Montaner escuchan con atención todas las voces que se presentan en las audiciones a ciegas. Durante la noche del lunes, hubo grandes sorpresas, inesperados piropos y un parecido que llamó la atención de todos.

La encargada de abrir la velada fue Emilia Soler, una joven que interpretó “At Last” y que con su número logró que todos los músicos voltearan sus sillas. Muy entusiasmada, la participante exclamó: “¡Perdón, me estoy por largar a llorar, no lo puedo creer! Me encantaría poder dedicarme a la música, ahora es como un hobby, pero es el sueño de toda mi vida, no hay plan B”. Frente a eso, Lali le comentó: “Básicamente la rompiste, ¿cómo no voy a quererte en mi equipo? Sos el combo soñado para cualquiera de nuestros equipos”. En su turno, la Sole apuntó: “Me imagino que hay mucho esfuerzo. Hay una cosa que además me atrae, que sos como un cascabel de alegría, me gusta eso, porque tenés todas las posibilidades. Tenés una voz impecable, sentí que te entregaste entera a la canción, y eso es súper importante”. Finalmente, Emilia decidió ir al team Lali y la cantante se acercó a ella con un curioso premio: “Estuve recauchutando cosas del canal, te doy un Martín Fierro, ¡te lo merecés! ¡Agradecele a Aptra, y viva la ficción carajo!”. Luego de entregarle una réplica del premio, abrazó a la participante, y se dirigió nuevamente a su silla.

A continuación, llegó al escenario de La Voz Argentina, Alexis Pey, un modelo y actor que hizo “Deja de llorar”, pero no interesó a ninguno de los jurados. Al darse vuelta las sillas cuando el número terminó, todos repararon en el atractivo del participante, y Espósito le dijo: “La verdad es que trajiste una propuesta muy copada, con todo el respeto, pero no fueron atinadas las decisiones, ninguna iba a un buen fin”. Y en un divertido sincericidio, Lali agregó: “Creo que te quiero decir un montón de cosas y no puedo acomodar las ideas porque sos muy lindo”. Por su parte, la Sole observó: “Tu voz me gustó mucho, hubo momentos de desencuentros con la afinación, pero lo que te pasó a vos acá, nos pasa a la mayoría, no es grave. Lo que no me llegó a conectar, es que sentí que tal vez no lo diste todo”. Muy agradecido, Pey se retiró, mientras entre risas, Lali le gritaba su número de teléfono.

Otro de los números más importantes de la noche, tuvo como protagonista a una cantante llamada Naiquen Galizio, quien contó que fue víctima de abusos cuando era chica. La participante fue consultada sobre cómo había comenzado su vínculo con la música y la joven dijo que atravesó ese duro momento personal gracias a su amor por el canto.

Ella hizo “Yo, dueña de la noche”, y Montaner no dudó en voltear rápidamente, pero la Sole, decidida a conservar esa voz en su equipo, también volteó su silla y bloqueó a su compañero. De ese modo, se quedó con Naiquen, y le dijo: “Me hiciste acordar muchísimo a Lucía Galán, es muy difícil cantar así, y lo hiciste súper bien. Me sorprende la edad que tenés, y el repertorio que elegiste también”. Al momento de contar su historia, Naiquen reflexionó: “Tengo 32 años, y empecé a cantar en un coro muy chiquita, en Lincoln. En mi adolescencia pasé cosas muy feas, y la música me salvó la vida”. Conmovidos, Montaner y la Sole se acercaron, la abrazaron, y Pastorutti le dijo: “Lo hiciste muy bien, sos una luchadora, y creo que este es un lugar en el que te vas a sentir plena, y todos te vamos a dar mucho cariño”.

Oriundo de Venezuela, Julio García cantó “Thinking Out Loud” y conquistó a la mayoría de los coaches, a excepción de Lali. Cuando lo observaron, no pudieron dejar de percibir un notable parecido del concursante con Ed Sheeran. Al momento de la devolución, Ricky comentó: “Quiero decirte que al principio, la guitarra estaba desafinada, pero siento que a pesar de eso, lo de tu voz está cabrón”. En su turno, Mau agregó: “El instrumento, lo que hace es distraerte, y me emociona saber que en la próxima etapa, te quitarán la guitarra para que puedas desenvolverte de manera extraordinaria con tu voz”. A la hora de elegir, Julio decidió sumarse al team Montaner.

Otra participante llamada Luzía Cavallini hizo “Pétalo de sal” y su número interesó a los jurados. En la devolución, Mau dijo que le fue inevitable presionar el botón, y Montaner subrayó: “Me encantaría poder contribuir en tu trabajo desde la experiencia. Mau y Ricky tienen más talento, pero yo tengo experiencia y me encantaría ponerla a tu servicio. Decirte que en lo personal, tienes la estampa perfecta de un artista que nace y que se va a convertir en una maravillosa estrella. Merecés tener lo mejor”. Finalmente, la joven eligió el equipo de Mau y Ricky.