Paul McCartney, Adele, U2, los Rolling Stones y Pink se darán cita en Wembley para mostrar su solidaridad con Ucrania

Bono, vocalista y líder de U2 credit:Bang Showbiz
Bono, vocalista y líder de U2 credit:Bang Showbiz

El próximo 24 de junio, el estadio londinense de Wembley volverá a acoger un evento musical de primer orden. Como ya ocurriera en 1985 con la iniciativa 'Live Aid', impulsada por el músico Bob Geldof para concienciar sobre la hambruna que sufre el continente africano, o con el festival 'Live Earth' de 2007, centrado en la reivindicación medioambiental, en el gran coliseo futbolístico de la capital británica se darán cita algunos de los artistas más famosos y reputados del planeta: todo ello para protestar por la invasión rusa de Ucrania y mostrar su solidaridad hacia un pueblo sometido a más de un año de constantes agresiones bélicas.

Según explica el diario The Sun, el objetivo del espectáculo no sólo pasa por seguir recaudando fondos para ayudar al gobierno de Volodímir Zelenski tanto a nivel humanitario como en el plano defensivo. El aspecto clave de la propuesta reside en mentalizar a la ciudadanía de los países occidentales sobre "la gravedad de la situación" que allí se vive, de acuerdo con una fuente interna de la organización. No ha trascendido todavía, sin embargo, si el presidente ucraniano hará acto de presencia, como en tantas otras ocasiones, en vivo o a través de una grabación para lanzar su propio mensaje al público.

Los informantes con los que ha contactado el periódico británico sí han podido confirmar, por otra parte, la presencia en el escenario de gigantes de la música como Paul McCartney, los Rolling Stones, la banda irlandesa U2, con Bono al frente, Florence and the Machine, Pink o Noel Gallagher; grupos y solistas que ya tenían planeado salir de gira este verano o que finalizaron recientemente sus respectivos periplos. Una vez asegurado el compromiso de tantas estrellas, ahora sólo queda tratar de convencer a otros artistas que, desafortunadamente, podrían descartar su participación debido a la cercanía del festival de Glastonbury.

"Por supuesto, son conscientes de que están haciendo propuestas con poco tiempo de antelación. Algunos artistas ya tienen cerrados sus compromisos para este verano. Pero hay optimismo al respecto, sobre todo por la fuerza que tiene una convocatoria como esta. Un evento de estas dimensiones también serviría para meter presión a los rusos, la verdad, y va a ser muy especial. La pena es que coincide con Glastonbury, lo que ya de por sí descarta otros grandes nombres", ha indicado el mismo confidente.