Pink revela lo que ha aprendido tras acudir a terapia de pareja con su marido Carey Hart

La cantante Pink y su marido Carey Hart no han tenido un matrimonio exento de dificultades. La pareja pasó por el altar en 2006, pero dos años más tarde se separó. La ruptura sólo duró un año y, a partir de 2009, la artista y el expiloto de motociclismo se han presentado ante el mundo como un frente unido, capaces de solventar sus problemas de convivencia a través del diálogo y, asimismo, por medio de la terapia.

La estrella de la música -madre de Willow, de doce años, y del pequeño Jameson, de seis, junto a su esposo- no ha dudado en sincerarse sobre todo lo que ha aprendido de sus sesiones con los especialistas en medio de su último concierto en la ciudad inglesa de Bolton. Durante un breve descanso en su actuación, enmarcada en su gira mundial 'Summer Carnival', la artista ha revelado a su público: "Esto es lo que te enseñan en terapia de pareja: remordimiento, arrepentimiento y resolución". Eso sí, parece que la intérprete todavía no ha aplicado esos conocimientos en su día a día. "Creo que empezaré mañana", ha bromeado.

Hace unos años, Pink -cuyo verdadero nombre es Alecia Beth Moore- reflexionaba en un tono más serio sobre los retos y obstáculos que ha tenido que superar su historia de amor con Hart. "Las relaciones de largo recorrido nunca son fáciles", señalaba en conversación con la revista People. La clave para superar tales problemas, en sus propias palabras, pasaba por "no esperar tanto el uno del otro".

"Al principio, crees que esa persona es todo tu mundo. Y nadie puede encarnar todo tu mundo. Yo solía ser una persona que necesitaba demasiado de la otra persona", reconocía en su entrevista, antes de expresar su convicción de que las relaciones concebidas para durar toda la vida han de respetar la individualidad y las particularidades de cada uno de sus miembros. "Después de mucho tiempo, ya hablamos de compañeros, de esposos, de dos personas que pueden hablar lenguas diferentes", apuntaba.