La Plata. La Comedia de la provincia de Buenos Aires reabrió su sala Armando Discépolo
Después de seis años de escasa o nula actividad la Comedia de la provincia de Buenos Aires, con sede en la ciudad de La Plata, volvió a abrir las puertas de la sala Armando Discépolo , ubicada en la calle 12 entre 62 y 63. Allí está representándose Stéfano de Discépolo, bajo la dirección de Marcelo De Bellis y Luis Longhi. El elenco está conformado por Longhi, Maia Francia, Gaby Almirón, Jorge Noya, Nacho Toselli, Mabel Campos, Nicolás Cúcaro y Trinidad Falco, un grupo de intérpretes en el que se combinan actores platenses, bonaerenses y de la ciudad de Buenos Aires.
El espacio que fue inaugurado en 1998 con el estreno de El organito, de Enrique Santos y Armando Discépolo, le dio a la Comedia, después de varias décadas (fue creada en 1958) la posibilidad de tener un ámbito propio de trabajo ya que, desde que se puso en marcha el proyecto, sus diversos elencos no lograban tener un lugar que contuviera sus espectáculos. Los distintos directores que estuvieron al frente del elenco oficial lucharon infructuosamente por conseguirlo. Es más, los más memoriosos tal vez aún recuerden aquella anécdota que durante décadas se contaba en La Plata y que hacía referencia a que su primer director, Norberto Manzanos, había hecho construir una carpa de circo que recorría las distintas localidades de la provincia mostrando los espectáculos que dirigía. Por un lado ayudaba a construir un camino de carácter eminentemente popular, aun escenificando textos como El tiempo y los conways, de John Priestley.
Durante las décadas del 60 y 70 la Comedia tuvo como directores a Francisco Javier, Roberto Villanueva, Roberto Comte, maestros que además cumplían un círculo de formación interesante ya que, además, eran docentes de la Escuela de Teatro de la ciudad, que dirigía Manzanos.
Con el correr de los años el elenco logró armar un fuerte equipo de trabajo que está hoy integrado por 200 personas, entre técnicos y personal administrativo . El mismo equipo que durante buena parte de la gestión política anterior se vio imposibilitado de desarrollar sus tareas habituales (nos referimos a escenógrafos, vestuaristas, iluminadores, entre otros) ya que desde el Instituto Provincial de Cultura, de quien depende la Comedia, prefería presentar en la sala Discépolo espectáculos ya producidos que llegaban al espacio luego de ser seleccionados a través de una convocatoria.
Hoy la Comedia está dirigida por Eduardo Albano, un funcionario que fue director artístico entre el 1992 y 1999, cuando la dirección estaba a cargo de Antonio Lorenzo . Por aquel entonces desarrollaron una labor muy atractiva ya que hasta llegaron a crear comedias regionales en la provincia. Volvió al cargo entre 2013 y 2015 y este año retomó las funciones en agosto.
“Veníamos de cuatro años de muy poca actividad –explica Albano– en el marco de lo que es la producción integral de la Comedia. Luego de esos cuatro años el contexto estuvo determinado por la pandemia. Hace un año decidimos poner en valor la parte edilicia. Toda la infraestructura de la sala estaba muy deteriorada . Costó tiempo hacerlo y hubo que esperar para poder trabajar en las condiciones ideales. Además debimos aceitar la maquinaria porque a la gente, con todo ese tiempo detenido, le costó reiniciar sus tareas. Tuvimos una gran charla con todos y cada uno de los compañeros, a los cuales conozco desde hace más de 30 años y todos nos pusimos una meta a partir de una decisión política que era la de reabrir la Comedia con una producción integral”.
Así surgió la idea de montar Stéfano, de Armando Discépolo. Para dirigirla se convocó a Marcelo De Bellis y Luis Longhi. El motivo de esta elección lo explica el mismo Eduardo Albano: “A Marcelo lo conocí cuando, en 2015, pusimos en escena La jaula de las locas, que dirigió José María Muscari. Hicimos casi 50 funciones. Marcelo fue uno de los protagonistas. El espectáculo fue un éxito. Él, además de ser un gran profesional, es una gran persona, un ser humano excepcional, un gran docente y un director; y Luis Longhi es un hombre de la ciudad, un conocedor como nadie del género grotesco. Es actor, dramaturgo, músico y una persona a quien todos queremos en La Plata”.
Ambos directores no se conocían, con lo cual la convocatoria resultó al comienzo muy sorpresiva. Pero en el primer encuentro que tuvieron descubrieron que juntos podían desarrollar el proyecto sin atravesar posibles inconvenientes. Hasta hubo acuerdo en la elección del elenco.
“Fue algo mágico –afirma De Bellis–. Fue todo casualidad y causalidad. Desde el vamos hubo una empatía sin conocernos. Yo sabía quien era Luis pero nunca habíamos trabajado juntos, ni siquiera conocíamos nuestra opinión sobre lo que es el teatro. Era muy riesgoso encontrarnos sin saber si había una posible relación creativa entre ambos”.
“Lo que hubo fue amor teatral a primera vista –explica Longhi– porque ponerte a dirigir con alguien que no conoces es muy complejo. Hay que ponerse de acuerdo en conceptos, seguimientos y lineamientos teatrales. Él proponía una cosa y me decía ‘me encanta’. Yo proponía otra cosa y me decía, ‘me encanta’. Era un rompecabezas que iba encajando perfectamente. Desde lo musical le propuse que quería un cuarteto de jazz en vivo, aceptó de inmediato. El cuarteto funciona en la cabeza de Stéfano, que es un director de orquesta. Amerita que haya música en escena, que la música esté en la cabeza del personaje. Hay un juego de luces muy significativo en el que la cabeza de Stéfano se proyecta en la música y esta aparece y desaparece de acuerdo a las necesidades teatrales, musicales, emocionales del personaje”. El director musical del espectáculo es Juan Ignacio López.
Al comienzo de los ensayos además se produjo algo inesperado. El intérprete elegido para recrear al protagonista no pudo participar de la propuesta. Longhi le propuso a De Bellis jugar una escena junto a Maia Francia e inesperadamente el director descubrió que el mejor protagonista para la obra era el propio Longhi.
“Luis venía haciendo Stéfano en Andamio 90 –cuenta Marcelo De Bellis–. Él se corrió de un lugar y se dejó dirigir, se entregó a mi dirección. Tuvo la humildad, la grandeza de decir me corro. Este es un Stéfano de carne y hueso y de sangre. Es una obra donde vos te crees todo lo que ves. A mí me crió una familia grotesca. Es un mundo que conozco porque lo mamé. Mi familia es grotesca. Recuerdo escenas que yo transmitía en los ensayos con mucha seguridad porque eran sucesos de mi vida que eran Discépolo puro. Todos somos un poquito eso; todos, como el personaje, perseguimos un ideal. Quizás hasta en lo personal, corrámonos de la profesión, uno también se va edificando desde niño desde un lugar de sueños, de fantasías e intenta lograrlos”.
Luis Longhi reconoce que volver a la Comedia de la Provincia de Buenos Aires es como regresar a su casa . Su primer trabajo profesional lo hizo allí formando parte del elenco de la obra Hoy debuta la finada, de Patricia Zangaro, bajo la dirección de Jorge Laureti.
También siente cierta fascinación por recrear a Discépolo, un autor que conoce muy bien. “Tengo una relación con los Discépolo, con el grotesco, con el arte, con el tango, con el teatro –afirma el actor, dramaturgo y director–. Y la memoria histórica que representa acercarse a la obra más grande de la dramaturgia argentina como es Stéfano, en un contexto como en el que estamos viviendo, resignifica socialmente la función de lo que somos nosotros como artistas enfrentando a la sociedad. ¿Por qué somos artistas?, para satisfacer egos personales o somos concientes de la verdadera función social del artista y, ¿quién nos enseñó esto? A mí me lo enseñaron los Discépolo. Para mí Enrique Santos es el mayor superhéroe de la cultura popular y Armando fue su mentor . Ellos me enseñaron porque los examiné, los estudié, me metí en la historia de ambos a lo largo de toda mi vida. Yo me siento muy discepoliano, familiarmente discepoliano”.
Hasta mediados de diciembre el espectáculo tendrá funciones en La Plata. La experiencia, que se presenta los viernes y sábados, a las 21; y los domingos, a las 20, está teniendo una muy buena repercusión de público. Probablemente se presente durante la temporada de verano en el teatro Auditorium de Mar del Plata .