El príncipe Gustav, el sobrino de la reina Margarita que da hoy un final feliz a su historia de amor prohibido
La familia real danesa se va de boda este sábado. Aunque se espera que la ceremonia sea discreta , la historia de amor de los novios es digna de una telenovela. Gustav Sayn-Wittgenstein, hijo de la princesa Benedicta y, por tanto, sobrino de la reina Margarita, dará el 'sí quiero' a su novia desde hace dos décadas, la escritora estadounidense Carina Axelsson en el castillo de Beleburg, en Alemania. El camino hasta llegar aquí no ha sido fácil y, entre medias, el Príncipe ha tenido que librar una batalla legal en los tribunales para que su matrimonio no le impidiese conservar sus derechos dinásticos.
El príncipe Gustav es actualmente el jefe de la casa Sayn-Wittgenstein-Berleburg, un estatus que parecía imposible que conviviese con el matrimonio que el deseaba. El origen del problema se encontraba en el testamento de su abuelo, el príncipe Gustav Albrecht, que estableció que el jefe de la casa solo podrá casarse con una mujer aria, católica y noble. La mujer con la que su nieto ha eligido compartir la vida es una escritora de cuentos infantiles, de fe protestante, nacida en California y sin ningún vínculo aristocrático. Carina fue acogida con todo el cariño por parte de la familia real danesa, pero los escritos del abuelo de su pareja impedían una boda.
El hijo de la princesa Benedicta trabaja en el sector financiero en Londres, pero desde la muerte de su padre, el príncipe Ricardo, se dedica a administrar el patrimonio familiar, una de las mayores fortunas de Alemania que incluye el castillo en el que reside y en el que celebrará su boda, ha peleado durante años precisamente para no perderlo. Su primera pugna en los tribunales fue para revocar la controvertida claúsula de las últimas voluntades de su abuelo. Parecía que este era el único obstáculo (y no era pequeño) para lograr su objetivo de casarse con Carina, hasta que entró en escena su tío abuelo, el príncipe Ludwig Ferdinand.
Poco después del funeral del príncipe Ricardo, el hermano del príncipe Gustav Albrecht se reinvindicó como el legítimo heredero esgrimiendo que su sobrino nieto incumplía ya el testamento al convivir con la escritora norteamericana. Tras un nuevo periplo judicial, finalmente el Tribunal falló a favor de Gustav, lo que allanó el camino para su soñada boda sin perder por ello las propiedades que le corresponden.
Por su parte, Carina Axelsson se convertirá al fin en princesa de Dinamarca a los 53 años, los mismos que su futuro marido. La autora de la saga juvenil de detectives, Model Under Cover, ha sido modelo y la protagonista de su última novela, Royal Rebels, es una princesa que vive en secreto su pasión por la moda. Quién sabe si su historia de amor imposible con final feliz, no la veamos convertida en telenovela, sino en un libro.