El príncipe Harry se une a la euforia por Messi en futbol de EEUU

Siguen sumando las celebridades que asisten a los partidos de Messi con el Inter de Miami, también Selena Gomez

El príncipe Harry en las gradas del estadio BMO de Los Ángeles credit:Bang Showbiz
El príncipe Harry en las gradas del estadio BMO de Los Ángeles credit:Bang Showbiz

Leo Messi ha revolucionado la liga estadounidense de fútbol. Desde que se uniera este año a las filas del Inter de Miami, equipo del que es propietario David Beckham, el astro argentino ha dejado maravillados a los aficionados con esos destellos de calidad marca de la casa y, sobre todo, con un nivel de rendimiento y competitividad admirables, teniendo en cuenta que el delantero tiene ya 36 años a sus espaldas.

El último partido de la escuadra de Florida tuvo lugar en Los Ángeles, ya que Messi y los suyos se enfrentaban a uno de sus grandes rivales por el título, Los Angeles FC. En los días inmediatamente anteriores al encuentro, ya se había corrido la voz de que el legendario futbolista se disponía a pisar suelo californiano: nadie quería perderse la oportunidad de verle en acción, tampoco las muchas celebridades que residen en la ciudad.

La expectación por ver a Leo Messi haciendo su magia quedó reflejada en las gradas del BMO Stadium, que estaban a rebosar. En el palco se dieron cita un sinfín de rostros conocidos: además del citado David Beckham, quien asistió al enfrentamiento con su hijo Brooklyn y su nuera, Nicola Peltz, también se dejaron ver la cantante y actriz Selena Gomez, el actor Owen Wilson y el presentador e intérprete Mario López. Algo más escondido, pero visiblemente emocionado, estaba el príncipe Harry, quien acudió al evento sin su esposa, Meghan Markle.

El hijo del rey Carlos III es, como tantos otros británicos, un apasionado del deporte rey. Aunque en Estados Unidos el fútbol es cada vez más popular, entre otras razones por la llegada, cada vez más frecuente, de estrellas internacionales a su liga, parece que el duque no ha podido contagiar aún esa afición a su afamada esposa, exprotagonista de la serie 'Suits'. Y es que Meghan brilló por su ausencia y aprovechó la salida en solitario de su esposo para descansar debidamente tras una noche muy agitada.

Y es que la pareja fue avistada la noche antes en otro estadio de la ciudad, el SoFi, en un evento que nada tenía de deportivo al margen de las elaboradas y exigentes coreografías de las que fueron testigos. Harry y Meghan no quisieron perderse el potente directo de Beyoncé y el aclamado espectáculo que ha concebido para su exitosa gira 'Renaissance'. Las reacciones fueron diversas, todo sea dicho, ya que la antigua actriz se dejó llevar por el ritmo y se la vio bailar animadamente, mientras que Harry permanecía quieto, con el rostro serio y las manos en el bolsillo.

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