Qué son los ftalatos y las consecuencias que realmente deberían preocuparnos

¿Debe preocuparte la exposición a los ftalatos? Descubre cómo reducir tu riesgo, según los expertos
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En los últimos años se ha producido un gran debate sobre los ftalatos, también conocidos como plastificantes, y su impacto potencial en nuestra salud. Sin embargo, es complicado diferenciar la información irrelevante de aquella que realmente debería preocuparnos.

Si no estás familiarizado con los ftalatos, debes saber que se trata de un grupo de productos químicos que se utilizan para lograr que los plásticos sean más duraderos, aunque algunos también se usan para disolver otros materiales, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). Los ftalatos se encuentran en una amplia gama de productos, desde el suelo vinílico y los aceites lubricantes hasta jabones, champús y mangueras de jardín.

Te expones a los ftalatos cuando comes o bebes alimentos que han estado en contacto con productos que contienen estas sustancias e incluso puedes respirar sus partículas en el aire, según los CDC. Cuando entran en tu cuerpo, los ftalatos se convierten en metabolitos que se desechan a través de la orina.

Sin embargo, estudios recientes han relacionado la exposición a los ftalatos con varios problemas graves de salud, como la depresión posparto y el bajo cociente intelectual en los niños. Entonces, ¿deberías preocuparte por la exposición a los ftalatos? ¿Cómo puedes reducir tu riesgo? Los expertos lo explican.

¿Tengo que preocuparme por los ftalatos?

Los especialistas afirman que deberíamos prestar más atención a los ftalatos. “Existen muchas evidencias procedentes de modelos experimentales y, más recientemente, de investigaciones con humanos, que demuestran que los ftalatos afectan el funcionamiento hormonal normal”, le dijo a Yahoo Vida y Estilo Emily Barrett, profesora y vicepresidenta del Departamento de Bioestadística y Epidemiología de la Escuela de Salud Pública de Rutgers. “Es un aspecto importante porque las hormonas desempeñan un rol esencial en muchos procesos, como la fertilidad, la salud cardiovascular y la cognición”.

La exposición a los ftalatos es particularmente preocupante en el caso de los bebés y los niños pequeños, apuntó Barrett. “Nuestra investigación se ha enfocado en la exposición a los ftalatos durante edades tempranas de la vida porque sabemos que esta etapa del desarrollo es muy vulnerable a la acción disruptora que ejercen productos químicos como los ftalatos”, explicó.

Los ftalatos están clasificados como “sustancias químicas disruptoras endocrinas”, lo que significa que afectan la capacidad del cuerpo para regular sus procesos biológicos, le explicó a Yahoo Vida y Estilo Kaley Beins, científica principal del Grupo de Trabajo Ambiental. “Los estudios científicos han relacionado la exposición a los ftalatos con problemas metabólicos, dificultades reproductivas como la endometriosis y una disminución de la calidad de la esperma, así como con cánceres de componente hormonal, como los de ovario, mama y útero”, indicó.

Un estudio publicado en la revista JAMA Psychiatry el 20 de septiembre también vinculó los ftalatos con la depresión posparto. La investigación analizó datos de 2 174 embarazadas y descubrió que, aunque no había una relación entre diferentes químicos ambientales y la depresión posparto, las concentraciones más elevadas de ftalatos en muestras de orina tomadas durante el embarazo se asociaron a un riesgo mayor de desarrollar depresión posparto.

“A pesar de que no conocemos todas las causas de la depresión posparto, sabemos que las hormonas sexuales durante el embarazo y el parto desempeñan un papel relevante”, le dijo a Yahoo Vida y Estilo la autora principal del estudio, Melanie Jacobson, profesora asistente adjunta en el Departamento de Pediatría de la Facultad de Medicina Grossman de la NYU. “Como se ha demostrado que los ftalatos afectan estas hormonas, es posible que también propicien la depresión posparto”.

Otro estudio publicado en agosto en la revista Molecular Psychiatry encontró un vínculo entre la exposición a los ftalatos durante el embarazo y un cociente intelectual más bajo en esos niños. Los investigadores constataron que la exposición a los ftalatos en el embarazo estaba relacionada con un cociente intelectual más bajo en los hijos a los 14 años, así como con un menor volumen de materia gris, un tipo de tejido cerebral que influye el movimiento, la memoria y las emociones.

Aunque las investigaciones han demostrado que algunos tipos de ftalatos afectan los sistemas reproductivos de los animales, los CDC indican que los efectos de la exposición a niveles de ftalatos bajos en la salud humana “no son tan claros”, por lo que es necesario investigar más.

¿Qué puedes hacer?

Es difícil escapar de los ftalatos, pero puedes reducir la frecuencia de exposición a estos productos químicos, explicó Barrett. Por ejemplo, puedes evitar los perfumes y reducir el uso de productos con fragancias ya que suelen contener ftalatos, recomendó.

También es conveniente evitar que los alimentos y bebidas entren en contacto con recipientes de plástico y no usarlos en el microondas para calentar la comida, advirtió Jacobson. “Elegir envases que no contengan plástico, como los de vidrio, consumir menos comida rápida... y decantarse por productos de cuidado personal y limpieza que no contengan ftalatos son otras maneras de reducir tu exposición”, apuntó Beins.

Aunque algunos cosméticos y productos de cuidado personal indican que están “libres de ftalatos”, Beins advirtió que esta etiqueta no está regulada. En cambio, Barrett recomendó recurrir a aplicaciones como la base de datos Skin Deep del Grupo de Trabajo Ambiental para elegir productos “más limpios”.

¿Cuál es la conclusión principal?

Los expertos señalan que es importante ser conscientes de la exposición a los ftalatos. “Prácticamente el 100 % de las personas tienen niveles medibles de ftalatos en su cuerpo y ahora muchas investigaciones demuestran que deberíamos preocuparnos por esos compuestos, así como por muchos otros disruptores hormonales químicos que están muy difundidos en el entorno moderno”, dijo Barrett. “Algunos países han tomado medidas para regular mejor sustancias químicas como los ftalatos en los productos de consumo, pero por desgracia Estados Unidos se ha quedado rezagado”.

Sin embargo, Barrett indicó que también hay “buenas noticias” sobre los ftalatos: puedes eliminarlos rápidamente de tu sistema. “Si comienzas a aplicar esos cambios hoy, es posible que puedas reducir tus niveles de ftalatos en un par de días”, afirmó.

Korin Miller

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