Rebecca Jones, de mesera a estrella de televisión, teatro y cine
CIUDAD DE MÉXICO, marzo 22 (EL UNIVERSAL).- Una de las últimas veces que Rebecca Jones tuvo un encuentro con amigos fue el pasado 3 de marzo. El director Francisco Franco y la actriz Nora Velázquez estuvieron con ella en una función especial de "Nada que ver", en las instalaciones de Videocine.
Apenas y podía caminar y por eso fue algo privado, lejos de los medios de comunicación. Salió feliz de lo que vio y agradecida con todo el mundo.
"Estaba delicada, pero contenta", deslizó uno de los presentes en la reunión.
Hoy, a los 65 años de edad, la actriz de cuatro décadas de carrera y quien durante los últimos años luchó contra el cáncer, ha fallecido.
Fue hija de un padre estadounidense, dedicado a la publicidad y madre mexicana, maestra de profesión. A los 16 años, mientras vivían en la capital mexicana, su familia sufrió un atentado con una bomba colocada en el buzón de la puerta de su casa, por lo que la familia decidió emigrar a EU.
Allá, mientras estudiaba, se mantuvo trabajando como mesera. Ella misma tenía que sacar las langostas vivas, presentarlas a los clientes y después de autorizada, llevarlas a que las cocinaran.
Estudió en la UCLA de Los Ángeles, donde tomó cursos de cine. Ya en sus veintes, decidió regresar a México apoyándose en su tía, la escritora Fernanda Villeli ("El maleficio" y "El diario de Daniela"), quien le presentó a las personas indicadas para entrar al entonces Centro de Capacitación Artística, hoy CEA.
"Me iba en combi y, cuando no me alcanzaba el dinero, en camión", contó en su momento al programa "“El minuto que cambió mi destino".
La obra de teatro "El coleccionista" fue su primera obra profesional, mientras que "Muchacha de barrio", su debut en el mundo de la telenovela..
"Mi tía me escribió un personaje que se llama Becky. Sergio Jiménez la dirigió y dijo que no se me habían notado los nervios, menos cuando tomé la taza de té, porque me temblaba todo", recordó entre risas a Gustavo Adolfo Infante.
Rostro de las telenovelas mexicanas
"El amor nunca muere", "El maleficio" y "La traición" formaron parte de su filmografía en los albores de los 80, lo que rápidamente la catapultó como una de las actrices jóvenes favoritas del público.
Fue parte del talento que a fines de los 90 emigró a TV Azteca y reafirmó su calidad con "La vida en el espejo", a la que seguirían "El alma herida" y "El país de las mujeres". En cine "El misterio del Trinidad", "Voy a explotar" y "Tercera llamada" conformaron su experiencia.
Contrajo matrimonio con el también actor Alejandro Camacho, con quien mantuvo relación por 26 años.
"No pido un milagro como algunos dicen por ahí, porque sé que Dios siempre está conmigo. Tampoco estoy luchando porque todos luchamos día con día por vivir”, escribió Rebecca hace dos semanas en su cuenta de Instagram.