Receta otoñal: crema de calabaza de castilla
¿Has probado la crema de calabaza de castilla? Seguramente has probado en tacha o caramelizada pero esta versión es igual de fantástica.
La crema de calabaza de castilla es un platillo de temporada ideal para degustarse en esta época en que comienzan los fríos y se empiezan a antojar entradas calientitas, espesas y reconfortantes.
Ingredientes
1 calabaza de castilla de 1 kilo
¼ de taza de echalote finamente picado
3 cucharadas de Oporto
2 cucharaditas de mantequilla
2 cucharadas de aceite de oliva
1 taza de consomé de pollo
Sal y pimienta de molino
4 cucharadas de crema
Leche al gusto
Sal y pimienta al gusto
Pepitas tostadas, crema, y aceite de oliva para servir.
Preparación crema de calabaza de Castilla
Cortar la calabaza en trozos medianos, retirar las semillas y la cáscara
Sofreír en una cucharada de mantequilla los trozos de calabaza en una sartén grande hasta que dore un poco. Bajar el fuego añadiendo un poco de agua y dejar vaporizar por diez minutos o hasta que esté suave.
Dejar enfriar hasta que se pueda manejar con facilidad. Apartar.
En una cacerola amplia y alta a fuego medio-bajo, calentar la otra cucharada de mantequilla y el aceite de oliva, agregar el echalote y saltear hasta que este suave y transparente.
Agregar el oporto y mover hasta que se incorpore y cocinar hasta que se reduzca a la mitad. Añadir el consomé, la leche, y la calabaza. Dejar hervir a fuego lento por 10 minutos.
Moler en la licuadora o una batidora hasta que quede con la consistencia deseada, suave y sin grumos.
Regresar a la olla, agregar la crema y sazonar con sal y pimienta al gusto.
Servir bien caliente con un chorrito de aceite de oliva, otro de crema y coronar con pepitas tostadas.
Esta crema, además de deliciosa es súper nutritiva, pues la calabaza de castilla es rica en proteínas, ácidos grasos omega 3, fibra, vitamina A y C, hierro, potasio, magnesio y zinc.
Estos nutrientes nos ayudan a prevenir enfermedades del corazón, cáncer y fortalece el sistema inmunológico, ayudando a combatir infecciones.
Por otro lado, sus pepitas son buena fuente de proteínas, grasas insaturadas Omega 3, vitaminas, minerales y compuestos bioactivos, que benefician la salud cardiovascular entre otras funciones.