Cómo recuperar la tradición del ballet en la ópera con una mirada actual

El bailarín y director del BAB Federico Fernández, el coreógrafo Emanuel Abruzzo y el productor artístico Juan Lavanga antes de la "Gala de ballets en la ópera", que se verá este domingo en la Ciudad Cultural Konex
MAURO ALFIERI

Mucho tiempo atrás la ópera y el ballet compartían escenario y público en la Francia barroca del siglo XVIII. Pero en la actualidad, sólo algunas grandes producciones líricas conservan mínimas escenas de baile, con muy poco espacio y protagonismo. Esto podría volver a cambiar.

El año pasado, durante la Gala Tchaikovsky del Konex, Luis Ovsejevich, presidente de la Fundación, le pidió al productor Juan Lavanga que pensara un próximo festival lírico que cerrara con una gala de ballet en las óperas, donde no pudieran faltar Verdi ni Wagner. “Él depositó esa confianza en mí y yo en Federico Fernández, que tiene un grupo privado con gente profesional y una actividad continua –cuenta Lavanga–. Federico se interesó en el proyecto y, a su vez, depositó su confianza en el coreógrafo Emanuel Abruzzo. Así que fue una hermosa cadena de confianza”.

El resultado es una Gala de ballets en la ópera, que la compañía Buenos Aires Ballet (BAB) presentará este domingo con ocho coreografías creadas para la ocasión y un pas de deux clásico, el de Guillermo Tell según Bournonville, que BAB incluye periódicamente en sus funciones. Participarán Ayelén Sánchez, Camila Bocca y el propio Fernández, primeros bailarines y solistas del Teatro Colón, y un conjunto de artistas del Ballet Estable del mismo teatro: Iara Fassi, Rocío Agüero, Milagros Niveyro, Lola Múgica Calvo, David Gómez, Nahuel Prozzi, David Juárez, Sebastián Bustos, Paulo Marcilio.

Director, productor y coreógrafo volverán a coincidir en el Konex después de la "Gala de ballets en la ópera" en la producción de una nueva versión de El Cascanueces para toda la familia, que se verá desde el 5 de junio
MAURO ALFIERI


Director, productor y coreógrafo volverán a coincidir en el Konex después de la "Gala de ballets en la ópera" en la producción de una nueva versión de El Cascanueces para toda la familia, que se verá desde el 5 de junio (MAURO ALFIERI/)

El programa está montado sobre fragmentos instrumentales de grandes óperas, que en algunos casos coinciden con los momentos bailados en las producciones líricas. A veces, una introducción cantada pone en clima, como la “Habanera” de Carmen, en la voz de María Calas.

“Es una música preciosa y en esta oportunidad podemos darle todo el protagonismo al ballet. Porque dentro de una ópera estamos en segundo plano –observa Fernández–. Sería maravilloso poder compartir la escena no solamente como un relleno para Aida”.

La obra Aida en el ensayo previo en el Teatro Colón
Alejandro Guyot


Las danzas de "Aida" en la última versión de esta ópera que se vio en el Teatro Colón (Alejandro Guyot/)

El ballet un engranaje que se suma a la maquinaria de Aida en el Colón

El espectáculo comenzará con La favorita, de Donizetti, que Abruzzo creó específicamente para Fernández y Bocca. “Tiene una variedad de colores, pero es la cuerda más clásica de toda la noche –advierte el coreógrafo– , lo más parecido a un pas de deux de repertorio”. En el otro extremo del arco se encuentra la danza de los velos de Salomé con música de Richard Strauss, en un lenguaje contemporáneo. Para eso contarán con Julieta Zabalza, como bailarina invitada. “Salomé me llevó a revisar el lenguaje de Jack Cole, un coreógrafo fundamental del cine musical –sigue Abruzzo–. Es posible que la versión de Rita Hayworth la haya hecho él”.

La gala se completa con Tristán e Isolda, Aida y Fausto. Y un fragmento de Sansón y Dalila, danza grupal “que tiene sus momentos de sensualidad, pero es un espectáculo totalmente ATP –aclara Fernández–, y el lenguaje de casi toda la gala es muy neoclásico, porque Emanuel tiene una técnica muy balanchineana”.

Como estas creaciones originales están llenas de detalles técnicos, Abruzzo ha concurrido a los ensayos, munido de todo tipo de artefactos para filmar desde todos los ángulos posibles, pulir hasta los últimos detalles y adaptar cada una de las coreografías para hacer lucir a los intérpretes. Como el dúo para Aida y Radamés, con el infaltable, Verdi, a la medida de quien lo baila. “Hay algo de Iara Fassi que le nace naturalmente en ciertas composiciones de formas y de movimientos que Emanuel supo ver y agrandar, para crear algo increíble”, asegura Fernández.

“Yo soy un asiduo espectador de ópera y el otro día en el ensayo vi con mucha admiración todos los cambios de estilo que fue poniendo Emanuel para cada obra, para cada pas de deux buscó detalles estilísticos que conectan con cada época, cada situación dramática. Y eso me pareció fundamental”, subraya Lavanga.

El último momento grupal de la Gala es el encore final. “Es un saludo de toda la compañía, muy al estilo del ballet ruso, que terminan con una gran coda, como recapitulando lo que viste en escenas anteriores”, explica Fernández.

El back de la Gala de ballets en la ópera tuvo una logística de agendas apretadas. Fernández y Abruzzo tienen próximamente viajes como jurados en concursos internacionales y funciones que volvieron a programarse. Además, Fernández ensaya Don José para la versión de Carmen que Alejandro Cervera estrenará el mes que viene en el Teatro Colón. Por su parte Lavanga trabaja en la producción, también para el Colón, de la reposición del Cascanueces de Nureyev para fin de año.

Los tres juntos vuelven a aunar criterios en una versión de El Cascanueces que se estrenará el 5 de junio y seguirá en el Konex por diez fines de semana. Tal vez el siguiente proyecto surja de esta gala de raíces líricas. “Lo que hice para Fausto podría convertirse en un ballet mucho más largo y concurrido –arriesga Abruzzo–. La historia está basada en la tradición de la Noche de Walpurgis, una fiesta que se hace antes del Primero de Mayo en algunas culturas europeas recordando las celebraciones alrededor de una fogata, para ahuyentar los hechizos de las brujas”.

Para agendar

Gala de ballets en la ópera, por Buenos Aires Ballet. En la Ciudad Cultural Konex, Sarmiento 3131, el domingo 15 de mayo, a las 19.30. Entradas desde $1.200.