Reese Witherspoon y su recuerdo de una escena de sexo que protagonizó a los 19 años: “No fue una buena experiencia”
Reese Witherspoon es una de las actrices más populares y queridas de Hollywood. Gracias a su talento, constancia y carisma ha sabido ganarse un lugar en la industria tanto delante de la pantalla como detrás, ya que en los últimos años la rubia ha sorprendido en su faceta de productora. Sin embargo, a lo largo del camino la estrella estadounidense ha participado de algunos proyectos de los que no guarda un buen recuerdo. Tal es el caso de Miedo, un thriller psicosexual que protagonizó en 1996 junto al actor Mark Wahlberg.
En este film, dirigido por James Foley, Witherspoon interpreta a Nicole Walker, una chica que siempre soñó con enamorarse de alguien especial. Así es como David McCall (interpretado por Mark Wahlberg) se cruza en su camino y la conquista al instante; lo que esta joven no sabe es que detrás de esa fachada de hombre sexy y sensible se esconde un hombre posesivo y manipulador. Si bien la historia no se destaca por su originalidad, sí dio que hablar por sus fuertes escenas. De hecho, hasta se llegó a insinuar un posible affaire entre los protagonistas .
“No tenía control sobre eso”, dijo Witherspoon en una reciente entrevista con Harper’s Bazaar haciendo referencia a una secuencia en particular: esa que filmó en un parque de diversiones y donde tuvo que fingir un orgasmo en la montaña rusa cuando apenas tenía 19 años. Tras asegurar que se sintió bastante incómoda y hasta solicitó una doble de riesgo para evitar desnudarse en cámara, la actriz reveló: “ No estaba explícito en el guion que eso es lo que iba a pasar, así que creo que eso fue algo que el director pensó por su cuenta y luego me preguntó en el set si lo haría, y dije que no. No fue una experiencia particularmente buena ”.
A pesar de la incomodidad que le generó rodar esa escena, la intérprete de Legalmente rubia explicó como ese hecho la ayudó a comprender lo que quería hacer y lo que no en el medio: “ Ciertamente, no estoy traumatizada ni nada por eso, pero fue formativo. Me hizo comprender cuál era mi lugar en el orden jerárquico del cine. Creo que es otra de esas historias que me hizo querer impulsar el cambio y ser alguien que quizás pueda estar en una mejor posición de liderazgo para contar historias desde una perspectiva femenina en lugar de desde la mirada masculina ”, advirtió quién en 2016 pudo cumplir su sueño con su productora Hello Sunshine, responsable de exitosas ficciones como Todos quieren a Daisy Jones, The Morning Show, Little Fires Everywhere y Big Little Lies.
Proporcionar una plataforma para que las mujeres cuenten “sus historias con sus propias palabras” es el objetivo de esta empresa que casualmente nació con el movimiento #MeToo, campaña en la que Witherspoon participó activamente al revelar que un director la había agredido sexualmente cuando tenía 16 años. “Hello Sunshine se creó en torno a la idea de que los medios estaban dominados en gran medida por voces masculinas y perspectivas masculinas, por lo que para poder crear oportunidades en las que las mujeres cuenten sus historias con sus propias palabras, solo obtienes una mejor perspectiva de la experiencia humana. Pienso en la experiencia limitada de esa expresión que tenía mi madre o mi abuela de los artistas en ese momento, porque las mujeres estaban muy sublimadas. Es solo un nuevo momento, una nueva era para que las mujeres tengan éxito y se destaquen, y estoy feliz de ser el combustible que necesitan”, confesó tras lanzarse de lleno al mundo de la producción.
“Antes de Legalmente rubia, me sentía muy competitiva y celosa de otras mujeres y no solidaria” , reconoció en la misma entrevista mientras recordaba el esfuerzo sin éxito que hizo para quedarse con papeles populares como el de Ni idea (1995) y Romeo y Julieta (1996). “Estaba realmente infeliz, no estaba viendo la abundancia de oportunidades”, aseguró.
Según sus propios dichos, ser madre a los 22 años fue un punto de inflexión en su carrera. “ Cuando quedé embarazada de Ava, me pregunté: ‘¿A quién quiero que vea mi hija?’. Realmente quiero ser una mujer a la que ella admire, así que trabajé mucho en eso ”, confesó quien desde entonces empezó a elegir más cuidadosamente sus papeles. “Obtuve La trampa, y terminé en Amor a colores, lo cual fue increíble. Ava me preguntó el otro día de dónde se me ocurrieron estos personajes, como Tracy Flick (de La trampa), Elle Woods (de Legalmente rubia) y Melanie Smooter (de No me olvides). Los creé a todos en el lapso de cinco, seis años, cuando tenía 20 años... A veces miro hacia atrás y digo: ‘¿Cómo diablos hice eso?’”, contó aún sorprendida.
“Ella es uno de los seres humanos más altamente productivos que he conocido. Es increíble”, dice Jennifer Aniston, coprotagonista y coproductora ejecutiva de Witherspoon en el drama de Apple TV+ The Morning Show. En el mismo sentido, Julianna Margulies advierte: “No tengo fuerzas para hacer lo que ella hace. Reese de alguna manera se las arregla para compartimentar, y es buena para estar a cargo”.
“Dios, lo sé. Me emociona mucho el trabajo, así que obtengo toneladas de energía nerviosa”, reconoció la artista, que fue una de las pioneras en esto de corregir o cambiar los sistemas arraigados de Hollywood que han excluido y explotado a las mujeres. A pesar de que su productora fue vendida a Candle Media por 900 millones de dólares en 2021, Witherspoon sigue levantando la bandera por aquellas historias que realcen las voces femeninas.