El regreso de Kanye: rodeado de sus hijos, con su esposa ejerciendo de madrastra y con un capuchón negro del KKK

Este lunes por la noche Kanye West ha presentado oficialmente su esperado nuevo disco junto a Ty Dolla $ign en un evento privado celebrado en Miami. Previamente había realizado varias apariciones sorpresas a lo largo del fin de semana en distintos clubes de la ciudad para actuar en directo, pero esta cita era la que estaban esperando todos sus fans para descubrir las canciones de 'Vultures'.

Está por ver si este trabajo consigue rehabilitar la imagen pública del rapero, que ha quedado fuertemente dañada a raíz de sus comentarios antisemitas y sus salidas de tono. Por el momento, no parece que tenga intención de rectificar porque en un momento de la noche se puso una capucha puntiaguda muy similar a las que han utilizado históricamente los miembros del grupo supremacista blanco Ku Klux Klan, aunque la suya era de color negro.

En realidad, no es la primera vez que utiliza un accesorio así en el marco de su carrera profesional; en 2013 ya se puso uno casi idéntico para el videoclip de su sencillo 'Black Skinhead'. Sin embargo, en aquel momento todavía gozaba del favor del público y los patrocinadores, y su uso se entendió como una provocación para reforzar visualmente el mensaje de la canción. Esta vez no ha ocurrido lo mismo, y las redes sociales han cargado muy duro en su contra.

Quienes no le han dado la espalda, incluso después de que perdiera sus multimillonarios contratos con GAP o Adidas, son sus compañeros de la escena rap. Offset, Lil Durk, Chris Brown, Kodak Black y Freddie Gibbs en otros le han acompañado hoy en la presentación de su trabajo.

Tampoco quiso perderse la cita su esposa Bianca Censori, que aprovechó la ocasión para demostrar que está perfectamente integrada en la familia de Kanye. Bianca, que dejó de lado sus atuendos más provocadores para apostar por ropa deportiva, llegó al lugar del evento llevando en brazos a su hijastra Chicago, y detrás suyo iban North y Saint. El único que faltaba era Psalm, el menor de los cuatro hijos que el rapero tiene con su ex Kim Kardashian.

Como detalle curioso, Kanye decidió prescindir una vez más de los zapatos, como hizo a menudo este verano durante sus vacaciones en Italia, y se protegió de los flashes de los paparazzi envolviéndose una especie de pañuelo alrededor de la cabeza.