La reina Isabel murió tras sufrir cáncer de huesos, según afirma Boris Johnson
La reina Isabel murió tras sufrir cáncer de huesos, según afirma el ex primer ministro británico Boris Johnson.
El ex líder conservador, de 60 años, conoció a la monarca, que murió a los 96 años en septiembre de 2022 en el castillo de Balmoral, en Escocia, dos días después de que ella se reuniera con él en su querida casa de allí.
En sus próximas memorias, 'Desatado', relata su último encuentro con la reina y asegura: "Yo sabía desde hacía un año o más que ella tenía una forma de cáncer de huesos, y sus médicos estaban preocupados de que en cualquier momento pudiera entrar en un declive agudo".
Antes de su último encuentro con Su Majestad, Boris dijo que el secretario privado de la Reina, Edward Young, le advirtió que su salud había "decaído bastante durante el verano".
Y añadió en su libro, que publica por entregas el Daily Mail: "Parecía pálida y más encorvada, y tenía moretones oscuros en las manos y las muñecas, probablemente por goteos o inyecciones. Pero su mente -como también había dicho Eduardo- estaba completamente intacta por su enfermedad, y de vez en cuando en nuestra conversación todavía mostraba esa gran sonrisa blanca en su repentina belleza que levantaba el ánimo".
Boris también afirmó que la Reina "supo todo el verano que se iría" pero que estaba "decidida a aguantar y cumplir con su último deber" supervisando la "transición pacífica y ordenada" del poder de él a su sucesora en el cargo de Primera Ministra, Liz Truss.
Boris renunció formalmente a su cargo de Primer Ministro durante su encuentro con la Reina, tras convertirse en el 14º dirigente británico de su reinado.
También cuenta en su libro el último consejo que ella le dio, que según él fue: "No tiene sentido amargarse".
Y añadió: "Y amén a eso. Si todo el mundo en la política -y en la vida- pudiera verlo tan claramente como ella, el mundo sería un lugar mucho, mucho más feliz".
El escritor Gyles Brandreth, de 76 años, también ha escrito sobre cómo la Reina padecía una rara forma de mieloma -un cáncer de médula ósea- antes de su muerte en su libro de 2022, 'Elizabeth: An Intimate Portrait'.