Renée Zellweger tomó un descanso de Hollywood porque estaba 'harta del sonido de su propia voz'

La actriz de 55 años se embarcó en un paréntesis de seis años en 2010, y ha reconocido ahora que 'necesitaba' un descanso de la industria del cine. credit:Bang Showbiz
La actriz de 55 años se embarcó en un paréntesis de seis años en 2010, y ha reconocido ahora que 'necesitaba' un descanso de la industria del cine. credit:Bang Showbiz

Renée Zellweger tomó un descanso de Hollywood porque estaba 'harta del sonido de su propia voz'.

La actriz de 55 años se embarcó en un paréntesis de seis años en 2010, y ha reconocido ahora que "necesitaba" un descanso de la industria del cine.

A la pregunta de por qué decidió tomar un descanso de seis años, Renée declaró a la revista Vogue británica: "Porque lo necesitaba. Estaba harta del sonido de mi propia voz. Cuando estaba trabajando, me decía: 'Dios mío, escúchate. ¿Estás triste otra vez, Renée? ¿Es esta tu voz de loca?'. Era una regurgitación de las mismas experiencias emocionales".

Renée "escribió música y estudió derecho internacional" durante su descanso.

La actriz también se esforzó por adoptar un estilo de vida más saludable.

Cuando se le preguntó qué hizo durante su tiempo libre, la estrella señaló: "Escribí música y estudié derecho internacional. Construí una casa, rescaté a un par de perritos mayores, creé una sociedad que dio lugar a una productora, defendí a una amiga enferma y recaudé fondos para ella, y pasé mucho tiempo con la familia y los ahijados y recorriendo el país en coche con los perros. Me siento más sana".

Mientras tanto, Renée explicó recientemente que el personaje de Bridget Jones "siempre estará presente" en su vida.

La actriz es más conocida por interpretar al personaje en la franquicia cinematográfica que hace ganar dinero, por lo que le resulta fácil relacionarse con su alter ego.

Según declaró a la revista Empire: "Me identifico tanto con ella que siento que siempre está presente. A veces la siento en mis torpezas y pienso en ella cuando tengo una de esas experiencias extracorpóreas en las que te ves a ti misma hablando y piensas: 'Cierra la boca. Deja de hablar. Vale, ahora deja de hablar. Ahora: deja de hablar. Ahora: deja de hablar. Para ya'. Así que siento que hay partes de Bridget que viajan conmigo, y normalmente son la incomodidad y esos momentos de, no sé, humillación pública con los que todos nos identificamos".