Yahoo Estilo Richard Armitage, Thorin en El Hobbit, no tiene interés en ver Los Anillos de Poder
A más de medio año de que El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder (90%) fue transmitida en Amazon Prime Video, la polémica sigue en pie, porque la mayoría de los fans de las películas de Peter Jackson (Muertos de Miedo (64%), King Kong (2005) (84%), Jamás Llegarán a Viejos (100%)) y los libros de J.R.R. Tolkien no estuvieron felices con el trabajo de los showrunners. Aunque algunos de los actores de las películas recibieron con los brazos abiertos la serie, otros como Bernard Hill ni siquiera tuvieron la intención de verla, y ahora se suma a esos actores Richard Armitage, quien interpretó a Thorin en la trilogía de El Hobbit.
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Además de haber sido un rey enano de la Tierra Media, Armitage tiene créditos en Capitán América: El primer vengador (79%), Alicia: A Través del Espejo (30%), Castlevania (100%), Ocean's 8: Las Estafadoras (58%), y Barrenderos espaciales (75%), entre otras. En las tres entregas de El Hobbit, el actor británico puso su alma y es algo que se nota, pues el personaje de Thorin, en gran parte por la actuación de Armitage, es de lo mejor que tuvo la irregular saga.
Aunque en su momento él defendió las películas y se expresaba muy feliz de haber formado parte de ese universo, actualmente Armitage dice que no tiene ningún interés en el género fantástico, y por esa razón ni siquiera quiere ver Los Anillos de Poder. Esto lo dio a conocer en entrevista con Radio Times (vía Comic Book Resources):
Después de dos años y medio de la Tierra Media, ya no me atrae la fantasía. Es muy, muy escasa... Pero también lo son nuestras opciones nuevas de películas hoy.
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El show de Amazon, según la propia empresa, fue un éxito masivo de audiencia, pero reportes más recientes indicaron que la mayoría de los espectadores no terminaron de ver la primera temporada, lo que indica una muy baja retención, y eso no puede ser algo bueno. Si la segunda temporada mejora la retención, tal vez veamos concretarse el plan de los showrunners de tener cinco temporadas.
Cuando la trilogía de El Hobbit llegó a los cines entre 2012 y 2014, los fanáticos de J.R.R. Tolkien y de la aclamada trilogía de El Señor de los Anillos, tenían altas expectativas. Si bien la nueva saga fue un éxito de taquilla, generando casi US$ 3 mil millones en total, El Hobbit no fue recibida con el mismo fervor crítico ni la misma aceptación por parte del fandom de Tolkien que El Señor de los Anillos.
La elección de dividir El Hobbit, una novela relativamente corta, en tres largometrajes, fue vista por algunos críticos y fanáticos como un intento de maximizar las ganancias a expensas de la coherencia narrativa. Esto se reflejó en la percepción de que las películas estaban infladas y desequilibradas, con la inclusión de tramas secundarias y personajes que no se encontraban en el texto original de Tolkien.
En segundo lugar, el cambio en el tono de la trilogía también dividió a los fanáticos. Mientras que los libros de El Señor de los Anillos se destacan por su tono épico y oscuro, El Hobbit es una novela infantil. La decisión de Jackson de introducir un tono más oscuro y elementos de batalla más intensos en El Hobbit fue vista por algunos como un alejamiento innecesario del espíritu de la obra original.
Además, el excesivo apoyo de la trilogía de El Hobbit en los efectos generados por computadora (CGI), en comparación con la combinación de efectos prácticos y digitales en El Señor de los Anillos, fue una de las críticas más sonadas, por reducir el realismo y la inmersión en la trama. Sin duda la trilogía de El Hobbit sufrió de las inevitables comparaciones con su predecesora. Las expectativas eran altas, y para muchos, simplemente no pudo replicar la misma magia, profundidad narrativa y desarrollo de personajes que hicieron de El Señor de los Anillos un hito en la historia del cine.
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