Todo lo que hay que saber de Gisèle Pelicot, mujer que fue drogada y violada por su esposo, y más de 70 hombres por años
Se está llevando el juicio contra Dominique Pelicot y 50 hombres más que abusaron sexualmente de Gisèle Pelicot mientras ella estaba inconsciente.
Se está llevando a cabo, en Aviñón, Francia, el juicio contra Dominique Pelicot, quien está acusado de haber administrado ansiolíticos a su esposa Gisèle Pelicot, con el fin de dejarla inconsciente para que él y otros hombres abusaran sexualmente de ella. Los hechos, que ocurrieron entre 2011 y 2020, fueron registrados en video por este hombre, quien actualmente tiene 71 años.
En septiembre de 2020, el acusado fue detenido por filmar bajo las faldas de las mujeres que compraban en una tienda de comestibles. Por ello, la policía registró su domicilio e incautó sus dispositivos electrónicos; así como, una laptop. Fue entonces, cuando los agentes encontraron más de 20,000 audiovisuales y fotos en computadoras, y discos duros propiedad de Dominique en una carpeta titulada “abusos”. Gracias a ello, se pudo localizar a 50 de los 80 posibles implicados en dichas agresiones sexuales en contra de la víctima.
El agresor fue detenido en noviembre al ser señalado de delitos mayores. Este declaró que el primer año era el único en violar a su esposa dos o tres veces por semana. Sin embargo, gracias a la página web Coco.gg, comenzó a invitar a otros hombres a partir del 2012.
“No busqué a nadie, ellos mismos vinieron en mi busca. Me preguntaron y dije que sí. Ellos aceptaron, ellos vinieron. No esposé a nadie para que viniera a mi casa”, ha declarado durante el juicio.
Justamente, 50 de los implicados están siendo juzgados junto a Dominique; estos hombres, de entre 26 y 74 años, enfrentan penas de hasta 20 años de prisión. Algunos perpetraron el acto solo una vez, otros lo hicieron en varias ocasiones, y nunca pagaron por realizar el abuso sexual, aunque sabían que estaban siendo grabados, según informaron las autoridades.
“Mantengo que soy un violador, como todos los acusados en esta sala”, reconoció Dominique durante la audiencia. “Sabían todos su estado [el de Gisèle] antes de su llegada, lo sabían todo, no pueden decir lo contrario”.
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Por su parte, Gisèle Pelicot, quien se divorció y ha renunciado a su antiguo apellido pero lo utiliza en el juicio, tenía derecho, según la legislación francesa, a permanecer en el anonimato y a que el caso se juzgara en privado. Sin embargo, decidió que se hiciera público. De acuerdo con sus abogados, quería que se trasladara a los acusados la vergüenza. También espera que su caso pueda ser de ayuda para otras mujeres que son víctimas de abuso sexual al estar inconscientes por sustancias químicas, como ocurrió con ella. Esta acción la ha convertido en un estandarte de la lucha feminista y es consideraba una heroína de las sobrevivientes de agresiones sexuales en Francia. De hecho, de mujeres la apoyaron durante el fin de semana en actos celebrados en todo el país.
“En 50 años, he vivido con un hombre... No podía imaginar ni un solo segundo que podría haber cometido actos de violación”, expresó Gisèle en el juicio. “Es difícil para mí escuchar todavía hoy que era consciente que había cometido esos actos de violación y barbarie en mi contra”.
Dominique Pelicot ha pedido perdón a Gisèle y asegura que “ella no se merecía esto”. Ahora el juicio continúa y poco a poco deberán declarar cada uno de los otros presuntos violadores.