Saw: El Juego Macabro, de James Wan, ¿qué dijo la crítica en su estreno?

En el cine, el terror adquiere diferentes formas y enfoques con la intención de sorprender al público. En su momento, Saw: El Juego Macabro (48%) generó un gran impacto que hasta el día de hoy se recuerda bien. Al parecer la audiencia quedó encantada con una película llena de torturas, siendo que cada castigo que presentaba era más original que el anterior, así como también más espeluznante. Además no era una película “bonita” precisamente, ni una que se veía bien; parte de eso que la hizo diferente del resto eran sus imágenes ásperas y sucias, lo que también dio mucho de qué hablar.

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James Wan ya estaba haciendo lo que mejor sabe hacer con este filme que llegó a cines en la época de Halloween de 2004 gracias a que un año antes presentó un cortometraje con la misma idea para de allí lograr hacer una película, y a que fue suficiente para convencer a productores y estudios de realizarla. En el tiempo en que se estrenó fue catalogada como un soplo de aire fresco para el género, entre otros elogios. En la actualidad es fácil olvidar este ícono del cine de terror por la cantidad de estrenos y lo bien que le puede ir a una película de este tipo, pero esta cinta hizo lo que otras no: recaudó cien veces su presupuesto y originó una franquicia de 10 películas.

Saw: El Juego Macabro (48%) empieza con dos hombres que se despiertan en un baño sucio y se dan cuenta que están encadenados en extremos opuestos de la habitación. Ninguno conoce al otro y están confundidos por la situación en la que se encuentran. Allí notan el cadáver de un hombre que recibió un disparo en la cabeza en el medio de la habitación. En una mano sostiene un arma y en la otra una grabadora. Adam (Leigh Whannell, el director de El Hombre Invisible (90%) y además guionista de esta película) y Lawrence (Cary Elwes), los dos hombres encadenados en el baño, descubren que tienen una cinta. Una vez en la grabadora, suena una voz que les dice que son parte de un juego que deberán ganar para sobrevivir.

Se trata de Jigsaw, un notorio criminal que pone a sus víctimas en situaciones de vida o muerte. Al comienzo se desconoce si tiene una justificación para eso o si solo trata de ser malvado, pero más adelante se revela que su intención es la de poner a prueba sus ganas de vivir. Allí es cuando de seguro muchos recordarán al icónico y tétrico muñeco que aparece en una pantalla o que a veces anda en bicicleta y cuya presencia solo sirve para las malas noticias.

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No ahondaremos en la filosofía de Jigsaw, pero sí hay que mencionar que tenía una forma interesante de abordar sus creencias. Uno de los mejores giros de la trama, además del final, es que este asesino veía sus acciones de una manera diferente ya que las torturas tenían el objetivo de actuar como un castigo por los pecados del pasado y a la vez como una oportunidad para que las víctimas puedan redimirse. Por supuesto que eso no quita que aquellos sobrevivientes quedarán traumatizados y heridos, pero esa es la mentalidad de este personaje cuyo nombre se revela como John Kramer.

Es también conocido que él, de alguna extraña forma, estaba convencido de que no es un asesino ya que ni siquiera tuvo contacto con las herramientas que provocaron las muertes. No tiene mucho sentido pero es algo que va con las creencias de Jigsaw y es lo que se aplica a lo largo de las películas. Dejando de lado esos detalles, la cinta se volvió un éxito de taquilla y el personaje pasó a ser uno de los favoritos del público, y a pesar de que esta primera película fue exprimida hasta el cansancio para dar lugar a otras, no hay que subestimar su poder.

Con un presupuesto de US$1.2 millones, esta producción pasó a obtener US$103.9 millones. No solo fue un gran éxito sino que eso le permitió convertirse en la película de terror más rentable desde Scream: Grita Antes de Morir (78%). Pero eso no fue todo para este proyecto, ya que muy poco se habla del hecho de que este fue la ópera prima de James Wan y que además tuvo su estreno en el Festival de Cine de Sundance.

El impacto causado por la cinta no refleja la opinión que tuvo la crítica en su estreno. La mayoría de comentarios fueron de mixtos a negativos, siendo una constante las menciones a una trama "absurda" y lo violenta que es. Varias críticas la señalaron como una película vacía y cruel, pero nadie tenía idea de que al final el público quedaría encantado. Esto fue lo que dijeron los medios especializados en su estreno:

Jordan Crucchiola de New York Magazine/Vulture:

David Germain de Associated Press:

James Christopher de Times (UK):

Peter Bradshaw de Guardian:

Derek Malcolm de London Evening Standard:

Shaun Munro de Flickering Myth:

David Gritten de Daily Telepgraph:

Scott Tobias de AV Club:

J. R. Jones de Chicago Reader:

Kim Newman de Empire Magazine:

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