Selena Gomez cumple 30 años en “el mejor momento” de su vida y se sigue multiplicando: brilla como estrella pop, empresaria, actriz y conductora
Durante años, Selena Gomez estuvo acostumbrada a ponerse demasiadas metas para sí misma, en gran medida por la presión que ejerció la industria sobre ella. Sin embargo, hoy, a sus 30 años, que los cumple este viernes, se muestra libre de imposiciones y simplemente disfruta de lo que llegó de manera sorpresiva.
La actriz, cantante, productora, conductora y empresaria aprendió a renunciar a las expectativas. “Cuando era más joven le tenía miedo a este momento”, le reveló a la revista People respecto al cambio de década. “Pensaba que mi vida tenía que verse de determinada manera, pero ahora miro lo que estoy haciendo y pienso: ‘¡Wow!, esto no era lo que esperaba, pero no podría estar más entusiasmada’. Me saqué de encima el peso de las opiniones ajenas y eso fue maravilloso”.
Recientemente, la multifacética artista oriunda de Grand Prairie, Texas recibió una nominación al Emmy por ser productora de Only Murders in the Building, la serie de Star+ en la que interpreta con hilarante sarcasmo a Mabel, esa joven que oficia de perfecto contrapunto para los personajes de Martin Short y Steve Martin, este último co creador de una de las mejores comedias del año, que ya tiene una tercera temporada confirmada. La camaradería entre los actores se percibe no solo dentro de la ficción sino por fuera, cuando en las red carpets los actores no tienen más que halagos para Selena.
“Siento que el hecho de que ella no haya sido nominada como actriz hizo que a las nominaciones les falte algo, Selena nos equilibra”, declaró Short, quien se mostró decepcionado por la falta de reconocimiento a Gomez, quien encontró en la serie el vehículo perfecto para, como ella misma expresó, alejarse de la opinión de terceros. “Ahora puedo pasar tiempo con estas leyendas, escuchar anécdotas y pedirles consejos. Me encanta”, dijo la estrella.
La nominación al Emmy como productora llegó apenas unos meses después de haber competido en los Grammy por primera vez en su larga carrera y con un trabajo muy especial para ella: Revelación, su primer EP grabado enteramente en español. El giro de timón que se produjo desde el lanzamiento de Rare en 2020 fue muy recibido por sus colegas de la industria musical. Sin dudas, el combo Only Murders in the Building + Revelación fue efectivo. Gomez siempre tuvo fe en ambos proyectos, se salió de su zona de confort y eso dio sus eventuales frutos.
“Me emocioné mucho cuando me enteré que me habían nominado al Grammy por primera vez”, expresó. “Puse mi corazón y mi alma en el disco, y fue más fácil para mí cantar en español que hablar. Quise cubrir todas las bases, que las letras fueran hermosas, que tuvieran relación con lo que estaba viviendo en ese momento, y que cada sonido fuera auténtico. Estoy muy orgullosa de lo que hice”, añadió.
“Si lo hubiera lanzado antes, no habría tenido el mismo impacto”, declaró en una charla con la revista Rolling Stone. “Aprender nuevamente el castellano fue una forma de decir que siento que pertenezco. No me siento tan juzgada. Quizás esto viene de años de gente diciendo que no soy una verdadera artista. Explorar este costado de mi vida fue absolutamente maravilloso. Me permitió llevar mi voz a otro lado. Me sentía muy segura a la hora de cantar. Espero que la gente escuche todo el trabajo que hay detrás y lo disfrute”.
Si bien Revelación no obtuvo el Grammy, Gomez se centró en el valor de la nominación en sí misma y lo que eso implicaba en su carrera, y mantuvo esa actitud cuando supo que era candidata al Emmy como productora, tan solo la segunda mujer latina en lograrlo . La artista se viene expandiendo y brillando en todo lo que aborda. “Solo voy adonde me dice el corazón”, asevera.
Selena, ese nombre con destino de estrella
Ricardo Joel Gomez y Mandy Teefey no dudaron en el nombre que iban a ponerle a su hija cuando naciera y había una razón muy clara detrás de su decisión: la inspiración de la fallecida cantante Selena Quintanilla. Teefey, ella misma actriz, impulsó a Gomez (a quien dio a luz cuando tenía 16 años) a abocarse al mundo artístico cuando vio que su pequeña tenía un gran talento. “Mi mamá hizo muchos sacrificios por mí toda su vida, tenía tres trabajos y nos quedábamos sin dinero con frecuencia, pero nunca dejó de luchar por mi futuro”, manifestó Selena, quien a sus cinco años afrontó el divorcio de sus padres, hecho que le generó una angustia que tardó años en poder erradicar. “Me fui a vivir con mi mamá, quien era muy chica y a quien vi dejar todo por mí. Ella tenía una gran responsabilidad siendo tan solo una adolescente”, remarcó Gomez, quien a los siete años comenzó a presentarse en diversos castings.
En 2002 fue elegida para la serie Barney & Friends, el puntapié de una carrera como figura de Disney en producciones como Hannah Montana y Wizards of Waverly Place, la ficción que le brindó una enorme popularidad gracias al papel de Alex Russo, y en la que empezó a probarse como cantante. En 2008 formó la banda de pop-rock Selena Gomez & the Scene y al año siguiente editó el disco debut, Kiss & Tell. Luego vinieron A Year Without Rain y When the Sun Goes Down, el álbum previo a la disolución del grupo, en 2012. Gomez ya estaba lista para lanzarse como solista y lo hizo con Stars Dance, en el que coqueteó con el electropop y de donde surgió su primer gran hit, “Come & Get It”. En 2015 llegó Revival y el éxito de “Hands to Myself” y en 2020 Rare, álbum descrito por Gomez como “el diario íntimo de mi vida” , y el que tiene una de sus baladas más tristes, “Lose You to Love Me”.
Cuando uno la escucha a Selena interpretar esa canción, se percibe cierta fragilidad en ella, que proviene de un cúmulo de experiencias de vida que la artista fue volcando en sus trabajos. Si bien logró el éxito gracias a películas como Another Cinderella Story y Monte Carlo, y series como Sonny with a Chance y So Random! en las que hizo breves pero reconocidas intervenciones, es en su discografía donde más se percibe la madurez vocal e interpretativa de Selena. Uno la conoce si sabe leer entrelíneas, si ve más allá de ese mote de “chica Disney” que encasilló a muchas figuras, como su colega y amiga, Miley Cyrus .
Una luchadora y fuente de inspiración para el mundo
Desde que en 2014 fue diagnosticada con lupus, la vida de Selena Gomez ya no fue la misma que antes. La enfermedad autoinmune trajo consigo ataques de pánico, trastorno de ansiedad y un cuadro severo de depresión. En 2017, se sometió a un trasplante de riñón por los daños que le había provocado tener lupus y la donante fue su entonces amiga, Francia Raisa. En 2020, con suma tranquilidad, compartió con el mundo que es bipolar. El lugar que eligió para contarlo fue un vivo de Instagram con Miley Cyrus, donde intentó sacarle el estigma a las enfermedades de salud mental. “Luego de años de atravesar diferentes cosas, supe que era bipolar”, contó. “Cuando tuve esa información, recibí la ayuda necesaria. No me asusté cuando lo supe”.
Para Selena, peor fue haber vivido años sufriendo sin conocer la razón, sobre todo al haber estado tan expuesta, ya sea por el fanatismo que generó como por sus relaciones de alto perfil con Nick Jonas, Justin Bieber y The Weeknd. “Soy de Texas y allí no se habla de salud mental libremente”, le contó Gomez a Cyrus. “Tenés que hacerte la cool, y por eso vi a muchas jóvenes crecer con ira, porque no podían hablar de lo que les estaba pasando. Yo quise tener toda la información y sacarme el temor, pero es una batalla que tendré que dar por el resto de mi vida”.
Selena tomó esos momentos duros en los que se sentía abatida y los utilizó para concebir algo que pudiera ayudar a personas alrededor del mundo. Por un lado, creó Wondermind, una plataforma que sirve como espacio para hablar sobre problemáticas de salud mental y en la que se pueden encontrar herramientas para la vida cotidiana , textos alusivos y una comunidad que sirve como sostén. La mamá de Selena y la CEO Daniella Pierson contribuyeron para la gestación de la tan necesaria compañía que se lanzó este año. “ Hablar de tus traumas y exponer tus sentimientos más profundos puede ser terrorífico, pero ayuda a sentirse menos solitaria”, declararon las mujeres fundadoras. “Quiero decirles a todos los que sufren que está bien no estar bien”, subrayó Selena en diálogo con el programa Good Morning America.
Asimismo, Selena y su madre fueron productoras ejecutivas de un proyecto muy importante para la artista: la adaptación de la novela de Jay Asher, 13 Reasons Why, estrenada en 2017 en Netflix. La novela había resonado muy fuerte en Gomez y decidió que una adaptación era una gran forma de hablar sobre salud mental y suicidio, tópicos dirigidos a una audiencia juvenil.
“Son temáticas muy importantes, aunque complejas de mostrar, pero me siento afortunada de poder hacerlo”, declaró Selena, quien ya era mucho más que una chica Disney, que una popstar, que una actriz que se seguía desafiando (en Spring Breakers y Rudderless, por ejemplo). Gomez se abocó al activismo, a dar luchas sobre enfermedades de salud mental, a hablar de su propia experiencia y a tomar las riendas de su futuro. Como productora, también apoyó films como la comedia The Broken Hearts Gallery y This Is the Year.
Una artista todoterreno
La pandemia fue un momento bisagra para el mundo y Gomez no fue la excepción. “Al comienzo, no pude manejarlo bien, tuve un principio de depresión”, contó. Para poder salir adelante, cambió el foco y, además de empezar a concebir Wondermind, también se centró en su faceta de entrepreneur con su línea de belleza, Rare Beauty y en ese disco tan personal para ella que le valió su primera nominación al Grammy. Como si esto fuera poco, en agosto de 2020 se estrenó Selena + Chef, programa culinario que condujo con chefs invitados y que fue renovado para una cuarta temporada. La calidez de la joven para comandar el ciclo de HBO Max traspasó la pantalla y se convirtió en un exponente más de su deseo por encontrar maneras de disfrutar la simpleza de lo cotidiano.
Es por eso que ahora usa las redes sociales con menos frecuencia y solo cuando siente que tiene “algo importante” para decir. “Hace tres años que no tengo redes sociales. Posteo a través de mi equipo: saco la foto, escribo la bajada, hago lo que tengo que hacer. Pero saber lo que la gente cree, en base a lo que le están mostrando, me desagrada. No es verdadero y es dañino. No podía quedarme sin hacer nada. Quizás antes me habría dado miedo, pero ahora prefiero jugármela por millones de personas”, le contó a Rolling Stone.
Esa facilidad para despegarse de lo virtual llegó gracias al tiempo que pasó en una clínica psiquiátrica por su cuadro de depresión, tiempo que la conectó con lo vital, un adjetivo que le sienta bien a esta etapa de su vida. Aunque digan que la edad es un número, Selena sí siente que los 30 la encontraron con una estabilidad emocional y profesional que por tanto tiempo buscó. “De todos modos me sorprendo”, remarcó. “Estoy en un gran momento de mi vida, haciendo las cosas que me gustan. Estoy feliz, más presente, más conectada con la gente. Cuanto más crezco, más evoluciono y siento una necesidad mayor de controlar mis sentimientos. Siempre quise esto: poder mirarme en el espejo y sentir confianza en mí misma”.