Todos los shows de Paul McCartney en Argentina: un telonero famoso, la nena que le pidió tocar el bajo, los homenajes y el guiño cordobés
Cuando este sábado a las 21, Paul McCartney salude al público con su brazo en alto desde el escenario ubicado de espaldas a la avenida Figueroa Alcorta, será la quinta vez que el beatle se haya presentado sobre suelo local. Aunque se tomó sus buenos años en llegar (y así y todo fue catorce meses antes del debut porteño de The Rolling Stones), Sir Paul mantuvo con la Argentina un vínculo que se sostuvo en la incertidumbre por más de una década y media, pero que cobró vigor en la frecuencia de las visitas posteriores, permitiéndose incursiones más allá de la ciudad de Buenos Aires, como volverá a ocurrir a finales de octubre en Córdoba.
Para matizar la espera antes de sus nuevos shows en la Argentina (este sábado y domingo en River y el 23 en el estadio Mario Alberto Kempes), decidimos armar este repaso por todas sus visitas anteriores para saber qué pasó, qué particularidades tuvieron y también intentar adivinar qué ocurrirá de acá a tan solo unos días en el Monumental.
1993: 10, 11 y 12 de diciembre, River Plate
Aunque cueste creerlo, Paul McCartney recién emprendió su primera gira mundial en 1989, para promocionar su octavo disco en solitario, el por entonces flamante Flowers in the Dirt. Sin embargo, las únicas escalas sudamericanas de esa gira fueron el 20 y el 21 de abril de 1990 en el estadio Maracaná, por lo que el público porteño debió esperar tres años más para poder saldar la deuda de ver a un beatle sobre el escenario.
Con el disco Off the Ground a cuestas, McCartney emprendió su segundo tour global, oportunamente titulado The New World Tour, y esa vez sí hubo recompensa para sus fans argentinos. Con Nito Mestre como telonero, Macca dio tres shows en el Monumental, en donde las canciones de su por entonces flamante último disco (“Hope of Deliverance”, “Looking For Changes”, “Biker Like an Icon”, “C’Mon People”) se mezclaron con clásicos de los “Fab Four”, como “Drive My Car”, “Magical Mystery Tour”, “Let It Be”, “Hey Jude” y “Penny Lane”. Fue además la única visita a la Argentina de McCartney con su esposa Linda, que murió en 1998.
2010: 10 y 11 de noviembre, River Plate
Con el paso de los años, una nueva visita de McCartney a la Argentina se perfilaba cada vez como algo menos probable, hasta que en 2010 la maquinaria se volvió a encender. Aunque en todo ese tiempo Paul nunca se alejó de los escenarios, esta vez volvió a bajar a Sudamérica para celebrar la reedición de Band on the Run, considerado por muchos como el pico de su carrera pos Beatles. Hubo varias canciones de ese álbum de Wings (“Mrs Vandebilt”, “Let Me Roll It”, “Nineteen Hundred and Eighty-Five” y también la canción que da nombre al disco), como también dos canciones de The Fireman, su proyecto experimental junto al músico y productor Youth (“Sing the Changes” y “Highway”).
Con banda nueva y en paz con su pasado en todas sus formas, McCartney se permitió guiños para el público más conocedor de su obra. En la primera noche abrió con un medley entre “Venus and Mars”, “Rock Show” y “Jet”, al igual que en el álbum en vivo Wings Over America, y a lo largo de las dos noches se permitió desenterrar clásicos que para muchos parecían olvidados como “I’m Looking Through You”, “Two Of Us”, “I’ve Just Seen a Face” y “Bluebird”, interpretada por primera vez en vivo desde 1976. El plus estuvo puesto en dos homenajes a John Lennon (primero con la cita a “Give Peace a Chance” al final de “A Day in the Life”; después, en la inmensa soledad de “Here Today”) y George Harrison, con una versión de “Something” que fue del ukelele a la solemnidad de la banda completa.
2016: 15 de noviembre, estadio Mario Kempes, Córdoba; 17 y 19 de noviembre, Estadio Único de La Plata
En 2012, cuando Paul McCartney anunció una visita a Uruguay sin escala argentina, el periodista cordobés José Heinz imaginó en Twitter un hipotético saludo de Sir Paul en tierras serranas diciéndole a su público “¡Hola, culiados!”. Cuatro años después, la imaginación fue copada por la realidad cuando Macca dio el primer show de su carrera en el Mario Alberto Kempes, como antesala de sus primeros (y hasta ahora únicas) presentaciones en La Plata, en el marco de la gira One on One, prolongación de Out There!, el tour con el que había llegado no una sino dos veces a la otra orilla del Río de la Plata. Desde su última visita a la Argentina, McCartney había publicado dos discos de estudio, lo suficiente como para darle a sus presentaciones en vivo una lavada de cara.
Las canciones de New (la homónima, pero también “Save Us”, y “Queenie Eye”) y también la balada “My Valentine” fueron las canciones que refrescaron un repertorio con fuerte presencia de clásicos de The Beatles y con algunas sorpresas. Por primera vez sonó en estas latitudes “A Hard Day’s Night” y hubo lugar también para el experimento electrónico de “Temporary Secretary” (incomprendido en 1980, pero puesto en valor dos décadas y media más tarde), además de permitirse desenterrar una canción de la prehistoria beatle como “In Spite of All the Danger” como parte de un segmento acústico en el que también sonó “Love Me Do”.
Hubo además espacio para la introspección psicodélica de “Being for the Benefit of Mr. Kite!”, y también para el pastiche de “Four-Five Seconds”, la canción que McCartney grabó junto a Kanye West y Rihanna. Cerca de los bises, el primer show en La Plata tuvo un momento por demás especial cuando McCartney invitó a subir al escenario a una niña a cantar “Get Back”, que no dudó en colgarse un bajo para cantar junto a su ídolo, y que años después triunfó con su nombre propio, Leila Harfuch Lacase.
2019: 23 de marzo, Campo Argentino de Polo
Con un nuevo disco a cuestas, la cuarta visita de Paul McCartney a la Argentina prometía una renovación de sus presentaciones en vivo sin descuidar los clásicos que el público espera de una leyenda viva. Y si bien “Fuh You”, “Come Back to Me” y el previsible “Who Cares” de Egypt Station funcionaron como una novedad, la cuarta visita de Sir Paul a la Argentina fue, en términos estadísticos, la de mayor repertorio beatle por función, con una treintena de canciones de los cuatro de Liverpool, aunque sin sorpresas en la lista, más allá de la incorporación de “From Me To You” o el regreso de “Got to Get You Into My Life” después de algunos años de ausencia.
Quizás el mayor factor diferencial pasó a estar en el armado del espectáculo. Por primera vez desde la gira mundial de Wings de 1975, McCartney pasó a contar con una sección de vientos de trompeta, saxo y trombón que supieron sumar su aporte en temas clave (“Letting Go”, “Lady Madonna”, “Let It Be”, la ya mencionada “Got to…”). La nota disonante no estuvo ni en la selección de canciones ni en la interpretación (que, como en todas las anteriores, tuvo a Charly García en los asientos de la primera fila): después de un conflicto entre los vecinos de la zona y Hernán Cattáneo -que se presentó en el mismo lugar el fin de semana previo-, la justicia porteña impuso un límite de volumen y decibeles para los futuros shows a realizarse en el Campo de Polo. Como consecuencia, lo que se vivió esa noche en Palermo fue una fiesta incompleta en donde el público del campo general y gran parte de las plateas apenas pudo escuchar al beatle, motivo más que suficiente para ir este fin de semana a Núñez y sacarse de encima el mal recuerdo.