Silvia Pinal reaparece con sus tres hijos para celebrar el 10 de mayo

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 11 (EL UNIVERSAL).- Silvia Pinal pasó un Día de las Madres apapachada por sus tres hijos y una de sus nietas, la diva de la Época de Oro del Cine Mexicano reapareció en redes sociales donde sus hijos difundieron fotos y videos de la comida familiar por el 10 de mayo.

Pinal, arreglada como a ella le gusta, le mandó un mensaje a las madres de México, mujeres luchonas "que llevan los pantalones" y sacan adelante a sus hijos y a su familia, así lo expresó acompañada de Sylvia Pasquel y Alejandra Guzmán, quienes abrazadas felicitaron a su madre.

"Felicidades mami por ser mom numer one", expresó la Guzmán; "te queremos, te amamos, te respetamos y estamos muy felices de estar aquí", remató Pasquel.

Sylvia Pasquel, Alejandra Guzmán, Luis Enrique Guzmán y Stephanie Salas se reunieron para celebrar el Día de las Madres en la casa de la primera actriz Silvia Pinal, quien se sentó en la cabecera de la mesa donde la familia disfrutó de platillos como moles, pollo y mixiotes.

No es tan común que los tres hijos de la primera actriz logren coincidir para estar junto en celebraciones importantes como el Día de las Madres, pero en esta ocasión lo lograron, además, Stephanie Salas, nieta de la diva mexicana también estuvo presente.

El productor Ivan Cochegrus fue uno de los invitados al festejo y también compartió una foto con su amiga, quien ha estado bien de salud después de que en diciembre de 2023 se contagiara de influenza y estuviera hospitalizada.

Fue Cochegrus quien a través de Instagram compartió un video en el que se observa la convivencia familiar entre hermanos.

Silvia Pinal también tuvo una hija llamada Viridiana, producto de su relación con Gustavo Alatriste, la joven, que comenzaba con éxito su carrera como actriz, falleció de un accidente automovilístico que sufrió en 1982; en su libro "Esta soy", Pinal narra a detalle cómo fue la última vez que vio a su hija con vida, así como lo traumante que resultó tener que reconocer su cuerpo.

"No me permití abrazarla, de ninguna manera podía sentir la frialdad de la muerte en aquel cuerpo que había visto unas horas antes. Mi niña, quien era mi gran felicidad y mi compañera, la mejor estudiante, con un futuro prometedor. No, no la toqué, no pude, habría sido como dar el cierre definitivo a algo que no aceptaba", confesó.