"Si una sociedad se junta hay cambios": Carlos Amorales

CIUDAD DE MÉXICO, febrero 6 (EL UNIVERSAL).- Tras su cierre al público en 2017, el deteriorado Polyforum Siqueiros se convierte en uno de los puntos de encuentro principales de la Semana del Arte, pues albergará el performance "Estados Fragmentados", de Carlos Amorales (Ciudad de México, 1970), el 7 de febrero, con dos funciones ya agotadas a las 20 y 21:30 horas, como parte de la Feria Material.

Es el estreno de este proyecto que ha trabajado Amorales en el último año, quien se encargó de la escritura de las canciones y el diseño del vestuario. La obra cuenta el mito de la deidad con forma de serpiente llamada Naga, creadora de la humanidad a través del canto. Si bien las Nagas son figuras de mitologías y religiones orientales, el mito fue creado por la Inteligencia Artificial de Chat GPT y moldeado por el artista.

En el performance, que plantea una reflexión sobre cómo las discrepancias ideológicas y la radicalización política han fragmentado a la sociedad, participan la cantante experimental Sarmen Almond, el percusionista Diego Espinosa y la coreógrafa Priscila Hernández, así como 20 cantantes, 20 percusionistas y 20 bailarines.

Amorales explica más sobre el trasfondo de este performance y comparte sus reflexiones en torno a la fragmentación con la que lidia la sociedad y cómo ha decidido mantenerse optimista con respecto al futuro del país y la humanidad.

¿En qué consiste Estados Fragmentados?

Es una fusión de distintas disciplinas. Yo principalmente soy artista visual, parto de ahí, y en los últimos años he venido trabajando con el canto y coros. Es una historia mitológica, yo creé las canciones y trabajo con la cantante Sarmen Almond. Trabajé una contrapropuesta al canto con el percusionista Diego Espinosa. Les pedí que compusieran música que se hace con el cuerpo, cada uno por su lado. Se usa la voz y la percusión de golpear el propio cuerpo. El mito es sobre la creación del mundo, viene de una imagen que se me apareció, me imaginé una especie de deidad creando el mundo con su voz y busqué en línea si existía el mito. Le pregunté a Chat GPT y me dijo que ese mito no existía y le pedí que me escribiera un mito, que yo fui transformando. Se volvió el mito de una serpiente (Naga) mitológica que crea el mundo cantando, quería crear una cosa arcaica y primigenia, como lo es el origen del mundo, con algo contemporáneo, como lo es la Inteligencia Artificial.

¿De dónde viene el título de "Estados Fragmentados"?

Viene un poco de la idea de Estados Unidos, pero son Estados fragmentados, lo contrario. Vivimos en un mundo que se está fragmentando, suceden muchas contradicciones, como en las ideologías.

Sobre la deidad Naga, ¿fue creación de Chat GPT o suya?

No, yo se lo atribuí. Hace dos años hice una obra, La serpiente de los días, para el Museo Kaluz, sobre la pandemia, este momento de espanto. Durante el proceso de esta nueva pieza empezó a salir este personaje, pero menos oscuro, antes era un monstruo y ahora siento que es sublime. Es casi como si fuera una segunda parte de esa historia. Exactamente no sé por qué la idea de trabajar con las serpientes; vi que las Nagas son serpientes que acompañaron a Buda, pero también acá en México tenemos a Quetzalcóatl… veo muchas conexiones posibles.

¿Está a favor de usar la Inteligencia Artificial para hacer arte?

Creo que está generando el mismo espanto que causó la fotografía. Pero lo importante es entender cómo trabajarla. No me siento un partidario de la tecnología, pero tampoco estoy en contra. Fue más la curiosidad de ver qué es, cómo nos funciona. Me interesa más la parte existencial, cómo es que nos afectará.

¿Por qué eligió el Polyforum?

Lo principal del performance es el canto coral y generalmente eso se hace en iglesias y este lugar tiene esa especie de grandeza. Y sentí que tiene una relación muy fuerte con el contenido del mural, que es "La marcha de la humanidad", de Siqueiros.

¿Usted hizo los vestuarios?

El vestuario salió de unos dibujos que hice en papel japonés; cuando lo compré, me dijeron que era el mismo material que usaba (el diseñador de modas) Issey Miyake. Experimenté mucho, los pinté con spray; hicimos un primer traje en blanco y me encantó. Los trajes son segundas pieles y se vuelven parte de la representación de la serpiente, además el patrón de líneas es como si fuera de piel de serpiente.

¿Con este performance qué busca comunicar?

El canto es etéreo, no existe y es algo que flota en el aire, es espiritual. En un coro hay gente unida cantando, son parte de algo. Esa dimensión de trabajar en grupo es importante hoy que siento que todo está fragmentado. La idea de cantar juntos puede hacernos sentir parte de algo que vale la pena. Cuando una sociedad se junta, puede haber cambios y mejorar.

Sobre las elecciones en 2018 dijo que veía que el país estaba de la chingada... ¿y hoy?

Pues seguimos… Es muy contradictorio, hay cosas que están peor y otras que no; ha sido un sexenio bien raro y complejo. Yo me siento positivo en el fondo. No quiero sonar partidista, pero visité las Utopías y es bonito ver que es algo que está ocurriendo, no sólo es un plan y no fue hecho en un sentido electoral. Y en lo negativo pues está la violencia y el narco que siguen súper fuerte. Siempre me ha gustado tener una postura crítica, pero es importante dar un paso y tomar compromisos que puedan tener repercusión social. Acabo de tener un hijo y pienso que hay que pensar positivo.