Yahoo Estilo Sylvester Stallone lamenta que las películas de superhéroes hayan eclipsado al cine de acción
Sylvester Stallone, mejor conocido por sus personajes en el cine de acción como Rambo, o por el inolvidable boxeador Rocky Balboa, ha sido parte del cine de superhéroes desde hace varios años; en los 90 fue protagonista de El Juez (1995) (18%), basada en un cómic clásico, y hace unos años lo vimos en Guardianes de la Galaxia Vol. 2 (82%) como Stakar Ogord. En 2021 puso su voz a King Shark en El escuadrón suicida (91%), y hace unos meses se estrenó Némesis (37%), donde él interpreta a un superhéroe retirado. Sin embargo, en una reciente entrevista lanzó una sutil crítica al subgénero de superhéroes, especialmente a las producciones que abusan de los efectos generados por computadora (CGI), y que han desplazado del gusto popular al cine de acción.
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En una reciente entrevista con The Hollywood Reporter, Stallone recordó que fue considerado para varios papeles de superhéroe, como el de Superman, pero no los obtenía porque no tenía el aspecto de un superhéroe. También mencionó que esperaba obtener el papel de Nick Fury, por tratarse de un personaje secundario. Al ser cuestionado sobre el exceso de películas de superhéroes y la decadencia del cine de acción, el actor comentó (vía Comic Book Movie):
Sí, es [frustrante], [las grandes películas de acción son] como comprar un reloj antiguo. Originalmente costaba $35 y ahora cuesta $35,000. ¿Por qué? Porque están hechas a mano. No eran exageradas. No eran sobrenaturales. Era algo que un ser humano único podía lograr. Por eso creo que Rambo: First Blood es una de las primeras películas de acción. Me basé en la actuación corporal para contar la historia. El personaje nunca habla, pero sabes exactamente lo que está pasando a través de los otros personajes. Son casi como narradores en su tragedia griega. El tipo nunca deja de moverse, y eso es lo que yo llamo una 'película de acción'. No hay una toma CGI. La audiencia dice: Eso es bastante especial.
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El cine de superhéroes, nos guste o no, lleva dominando la industria desde hace al menos dos décadas. En la primera década de los 2000 la fantasía y el género young adult eran más abundantes, pero con la llegada del Universo Cinematográfico de Marvel comenzó una nueva era para el subgénero, y ha llegado hasta la actualidad rompiendo récords y logrando cautivar a millones.
En los primeros años del siglo XXI tuvimos algunos hitos como X-Men (81%) y El Hombre Araña (89%), pero ha sido a partir de 2008 que los superhéroes comenzaron a acaparar las carteleras. La trilogía de Batman de Christopher Nolan (Memento (92%), Interestelar (71%), El Origen (86%)) fue un éxito en taquilla y los críticos la elogiaron sin medida. Para 2012, cuando esa saga llegó a su fin con El Caballero de la Noche Asciende (87%), Marvel también estrenó su primer gran crossover, Los Vengadores (92%), y a partir de ahí las cosas no volvieron a ser las mismas.
Quizá se le pueda reprochar a Marvel el abuso y la calidad irregular del CGI, pero la realidad es que los efectos visuales siempre han sido una herramienta en el cine, y pueden ofrecer resultados mediocres pero también grandiosos. Los personajes creados a partir de motion capture como Gollum, Davy Jones, Caesar o Thanos, son considerados grandes logros, y también hay casos decepcionantes, como el villano de Eternals (58%), o la protagonista de She-Hulk: Attorney at Law (74%).
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