¿Tiene razón George Lucas en sus críticas al ‘Episodio VII’?

Que si el Episodio VII es “retro”, que si al menos sus naves y planetas eran “nuevos”, que si los de Disney son tratantes de blancas… Menudo calentón el de George Lucas tras ver lo que la casa de Mickey Mouse y J. J. Abrams habían hecho con su adorada franquicia. Esa cuyas películas él considera ‘hijos’ y cuyos derechos vendió hace tres años por 4.000 millones de dólares. Pero, ¿tiene razón Lucas en sus duras críticas –de las que se ha retractado inmediatamente después– a El despertar de la Fuerza?

(Foto: Getty Images)

Pues no, no y mil veces no. Se le puede aceptar eso de que la película es ‘retro’, pero eso no es malo. Porque precisamente parte del exotismo de este nuevo episodio de la saga galáctica por excelencia es ese tono que recuerda a las tres primeras, que eran las buenas. En lo de si han arriesgado o no con el guión, casi mejor no entrar por aquello de no spoilear a aquellos que aún no han acudido a verla al cine. Pero si decir, que, si bien el argumento tiene similitudes con las originales, también es cierto que hay cambios lo suficientemente sustanciosos como para que se considere una película distinta. O más bien como lo que es, una continuación del Episodio VI.

Nada de plagio, ni de remake ni cualquier otro término que se le parezca. Alguien dijo que la Historia es cíclica y en esa línea se mueve Star Wars: The Force Awakens. Además, ¿qué clase de argumento es que al menos sus naves y planetas eran nuevos? ¿Qué pasa que los que aparecen en esta no lo son? ¿Y qué pasa con personajes como Rey, Poe, Finn, Kylo Ren, Maz Kanata…?

(Foto: Lucasfilm / Disney)

Porque eso fue lo que dijo George Lucas en la entrevista concedida a The Hollywood Reporter y que tanto revuelo ha levantado en los últimos días. “Ellos han hecho una película retro. No me gusta. En cada película trabajé muy duro para hacerla diferente al resto. Las hice completamente diferentes, diferentes planetas, diferentes naves espaciales para hacerlas nuevas”, decía. Sí, es cierto, pero también lo es que la segunda trilogía era inferior en cuanto a calidad a la primera y que el Episodio VI está al nivel de la original.

Aunque lo peor, lo más duro que dijo no fue eso, sino acusar a Disney de ‘tratante de blancas’ solo porque a él no le gustó el resultado y él lo habría hecho de otra forma. Algo que ya se sabía, lo de que lo habría hecho de otra forma, vistos los Episodios I, II y III y el hecho de que decidiese desvincularse del proyecto tras vender los derechos porque “no estaba de acuerdo con las ideas” de los ahora propietarios.

(Foto: Lucasfilm / Disney)

Lucas dijo lo que dijo y una vez dicho no le ha quedado otra que retractarse, matizar y pedir disculpas por sus altisonantes declaraciones. Porque lo suyo suena más a pataleta que a argumentos objetivos y porque si la mayoría de la crítica y el público está encantado con el resultado, igual es que no tiene tanta razón como creía.

Ahora, vía comunicado, reconoce que se equivocó y argumenta que usó “una analogía muy inapropiada, y por ello me disculpo”. Al tiempo que aplaude el trabajo de J.J. Abrams mostrándose “impresionado con el récord de taquilla que está consiguiendo la nueva película”. No es para menos. George Lucas se merece todos los respetos, por ser quién es y por lo que ha hecho por el cine, pero si se ha equivocado, se ha equivocado. Quizá se dejó arrastrar momentáneamente al lado oscuro de la Fuerza.