La tierna reacción de la mamá de José María Muscari al enterarse de que se convirtió en abuela
Con un tierno video, José María Muscari compartió con sus seguidores la reacción de su mamá cuando le contó que se había convertido en abuela. El productor teatral, quien reveló ayer que cumplió uno de los sueños más grandes de su vida al adoptar a un adolescente de 15 años, guardó durante meses el material y tras revelar su flamante paternidad dejó en evidencia la dulzura y el apoyo incondicional de Cuky al recibir la noticia.
“Este fue el maravilloso momento que mamá Cuky influencer se enteró de que es abuela”, escribió sobre un breve video que publicó en sus historias de Instagram. La secuencia arranca con un grito de ella. “¡Ayyy!, ¿en serio?”, le dice a su hijo mientras no deja de abrazarlo ni de mirarlo a los ojos. Con un gesto de felicidad, el productor asiente con la cabeza. “Mañana lo voy a ir a conocer”, agrega.
La mujer, feliz, lo besa, lo abraza y le dice, sin soltarlo: “Te felicito, hijo. Van a ser muy compañeros”. Muscari, en ese momento, se quiebra y no puede dejar de llorar. “Te va a querer. Vos lo tenés que querer”, continúa Cuky con ternura. “Lo que me estás contando... ¡Tengo una cosa...! ¡Un nietito! No, un nieto, pero no tan chiquito. Está bien esta edad”, sigue Cuky, y luego escucha con mucha atención todo lo que Muscari le cuenta del joven: que quiere estudiar biología, que le gustan mucho los animales y que pasó mucho tiempo de su vida en hogares.
“Estoy muy emocionada. Lo vas a ayudar en cosas del corazón, ¿te das cuenta?”, le dice Cuky a su hijo con la voz entrecortada. “Como vos lo hiciste conmigo”, cierra la tierna charla Muscari con los ojos llenos de lágrimas. “Este video lo guardé por meses para mostrar el amor en estado puro”, escribió Muscari sobre la segunda parte de la secuencia.
Un gran día
Muscari usó su cuenta de Instagram para presentar a su hijo. El posteo llegó luego de un largo camino, lleno de amor, de emociones y de encuentros, pero también de viajes, trámites y espera. “Hoy es el gran comienzo de mi vida como padre de Lucio”, escribió junto a una imagen en donde se ve al joven de espaldas y al dramaturgo abrazándolo y mirando a cámara con una sonrisa. “Mi hijo tiene 15 años y nos elegimos, nos adoptamos y la vida nos unió. Gracias universo, gracias Lucio”, sumó y de inmediato aclaró que “por su edad y por el proceso de guarda” no puede por un tiempo mostrar fotos con su cara.
El mensaje continuó con una breve descripción de su camino hacia la paternidad. “Siempre deseé ser padre y llegó el momento. Lucio llegó a mi vida y yo a la de él. Lucio me adoptó y yo lo adopté. Y ahora todo es amor, intensidad, emociones y vida increíble con un adolescente. Lucio, mi hijo, tiene 15 años y si bien estamos en un proceso de guarda, hoy ya es mi hijo porque así lo indica mi corazón. Estos últimos meses fueron de mucha intensidad para ambos y ahora nos estamos aclimatando al otro: quizás nos estábamos buscando y no lo sabíamos”, compartió.
Muscari recordó la primera vez que vio a Lucio y lo que sintió en ese momento. “Hace unos meses yo estaba de viaje, de vacaciones en Europa y un video de Lucio en las redes sociales que se hizo viral contando su historia desde Corrientes, me atravesó como un rayo y sentí algo inexplicable, una certeza atravesó mi alma y mi razón y sentí una claridad apabullante: ‘Es mi hijo’. Y con esa certeza me anoté en la convocatoria pública y la vida hizo lo suyo”.
Por último, Muscari explicó cómo cambió su forma de entender la adopción una vez que supo de la existencia de Lucio: “Durante muchos años creí que sería padre de un bebé y hoy, a mis 47 años, amo que mi bebé ya tiene 15 años y aún nos quedan muchísimos años de padre e hijo juntos por recorrer”. Y cerró emocionado: “Amo irme a dormir después de llevarle un vaso de agua a su habitación y ver si está todo bien y despertarme un rato antes que él a la mañana para irlo a despertar con abrazos. Amo que me diga : “Pa, papá, viejo o viejito”. Amo a Lucio , mi hijo. (....) Lucio es amor. Escribo y no puedo parar de llorar, se me moja la pantalla y no es metáfora, no puedo contener el torrente de lágrimas del amor”.