Luego de participar de los Juegos Olímpicos 2024 que se desarrollan en París como espectador de lujo, Tom Cruise se convertirá en uno de los protagonistas del evento deportivo más importante del mundo: la estrella de Hollywood fue convocada para desplegar toda su destreza durante la ceremonia de clausura en la capital francesa.

Según publicó Variety, el protagonista de Misión imposible, de 62 años, hará gala de su gran estado físico y de todo lo que aprendió durante su carrera, plagada de películas de acción: la propuesta radicaría en una gran acrobacia dentro del show que se realizará el domingo 11 en el Estadio de Francia y en el que los organizadores prometen “artistas de fama mundial” y más referencias a la mitología griega.

Tal como sucedió con la ceremonia de apertura, de la que participaron entre otras celebridades Celine Dion, Lady Gaga, el director artístico de los Juegos Olímpicos de París, Thomas Jolly, busca lograr un gran impacto con la ceremonia de clausura. Con ese objetivo, contactó a Cruise para invitarlo a ser parte de la puesta.

El actor hizo una alto en las jornadas de filmación de Misión imposible 8, rodaje que tiene lugar en los estudios Pinewood de Londres y varias locaciones europeas, para disfrutar de los Juegos Olímpicos de punta a punta: no solo asistió a la ceremonia de apertura, sino que, además, fue testigo privilegiado de varias competencias deportivas, entre ellas las de gimnasia y natación femeninas. Incluso, se codeó con varios colegas mientras la gimnasta estadounidense Simone Biles recorría su camino hacia la medalla dorada.

La información de Variety coincide con el adelanto que hizo en mayo el blog francés Sortir à Paris. En esa oportunidad, el actor fue visto filmando una escena a bordo de una moto con una gran bandera en la que recorría la Avenida de los Campos Elíseos luego de partir desde el Arco de Triunfo. Cruise fue nombrado Caballero de la prestigiosa Legión de Honor de Francia la semana pasada y su rol en el evento será central: entregará la bandera a Los Ángeles, ciudad que será sede de los próximos Juegos, a realizarse en 2028.

Un show de impacto

A diferencia de lo que sucedió con la apertura, que tuvo lugar en las afueras del estadio con el río Sena como uno de los grandes protagonistas de la noche, la ceremonia de clausura se realizará al interior del Stade de France. El show, titulado “Récords”, trazará hitos a lo largo de la historia de los Juegos Olímpicos, promete “nuevas interpretaciones” y un viaje a través del tiempo. Según confió la organización, se contrataron “artistas de fama mundial” y habrá “más de cien intérpretes, acróbatas, bailarines y artistas de circo” para animar la velada.

Celine Dion y Lady Gaga, los destacados de la apertura

Lady Gaga cautivó al público internacional con una magnífica interpretación de “Mon Truc En Plumes”, de Renée Jeanmaire como parte de la inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024. La artista descendió a lo largo de unas escaleras a la vera del río Sena y le rindió homenaje a la artista francesa, acompañada por bailarines que danzaron a su lado con abanicos de plumas rosas.

La actriz y compositora lució un vestuario ajustado negro de Dior. Si bien es la primera vez que Gaga actúa en los Juegos Olímpicos, su espectáculo fue muy bien recibido por el público internacional y, tal como sucedió con su participación en el SuperBowl 2017, tuvo impacto global inmediato.

Así como Lady Gaga le aportó glamour a la noche, la emoción llegó en el cierre de la mano de Celine Dion. La cantante canadiense tuvo su gran regreso a los escenarios luego de haber sido diagnosticada con el síndrome de persona rígida en diciembre de 2022: enfundada en un espectacular vestido blanco con brillos, entonó una poderosa versión de “Hymne A L’Amour”, de Edith Piaf.

El despliegue escénico estuvo a cargo de Thomas Jolly, reconocido por el exitoso musical de ópera rock Starmania. Jolly diseñó el espectáculo y reunió a más de 3000 actores, bailarines e intérpretes musicales para participar en distintos momentos y lugares a lo largo de toda la ceremonia inaugural, que no estuvo exenta de polémicas.