El triunfal regreso de Derbez a la comedia: 'Todavía va a haber Eugenio para rato' [EXCLUSIVA]

Por primera vez en mucho tiempo, Eugenio Derbez vuelve a estar emocionado con el estreno de uno de sus proyectos para la televisión. Su sonrisa lo delata, así como el interés que pone en cada uno de los detalles que lo llevaron a protagonizar su nueva serie, Y Llegaron de Noche. Para el también productor mexicano esta entrega es especial, de inicio es su regreso a la comedia en la televisión, muy apegada a sus orígenes y a ese humor con el que se ganó el corazón del público gracias a shows como Al Derecho y Al Derbez, Derbez en Cuando o La Familia P. Luche. Además, vuelve a sentarse en la silla de director, un rol que no había hecho desde el estreno de su éxito en taquilla, No Se Aceptan Devoluciones (Instructions Not Included), en 2013.

Derbez tiene una versatilidad única para transformarse en los personajes de sus series al punto de hacer memorable cada uno de ellos, y este año, ese repertorio crece con su interpretación de Carlos Villarias, un divo en Hollywood que no puede rechazar la oportunidad de participar en la versión en español de Drácula, la icónica novela de Bram Stoker.

En entrevista con ¡HOLA! Américas, Eugenio nos cuenta que haber aceptado este papel no fue una decisión tomada al aire, detrás de ella está el orgullo de ser mexicano, además de querer contar y protagonizar tramas que enaltezcan a los latinos. Ese deseo coincidió con una maravillosa historia que sucedió en los estudios Universal en 1930, cuando durante el día, el actor austro-húngaro, Béla Lugosi, rodaba la famosa película, Drácula, y durante la noche un grupo de actores utilizaba esa locación para grabar exactamente la misma cinta pero en español con Carlos Villar en el protagónico. Durante años se pensó que aquella cinta estaba perdida, hasta que en la década de los 70s fue encontrada una copia en La Habana, Cuba, colocando a la versión en español por encima de su homónima ante los ojos de la crítica, aún después de haberse filmado con un presupuesto limitado y un casting improvisado.

Junto a un equipo de expertos en comedia y televisión, Eugenio va más allá de sólo contarnos aquella increíble historia, pues lo hacen de una divertida forma con el "detrás de cámaras" en el que nos adentra a la trama de los personajes involucrados en ella hace 93 años.

Derbez vuelve a hacer equipo con Rob Greenberg y Bob Fisher, creadores y escritores de otras piezas protagonizadas por él, como The Valet y Overboard. También se une a Ben Odell y Javier Williams como productores ejecutivos a través de 3Pas Studios la compañía de entretenimiento co-fundada junto a Odell; además de un trabajo de Visceral, con Pablo Calasso como su productor ejecutivo.

La historia cobra vida gracias al talento de actores y comediantes que aportan una chispa extra de humor, entre ellos Yare Santana (Lupita Tovar), Sofía Niño de Rivera (Cecilia, la intérprete), AJ Vaage (Paul Kohner), John Goodrich (George Melford), Jason Alexander (Carl Laemmle), Federico Espejo (Harker), y Daniel Raymond (Bela Lugosi); por mencionar algunos.

El resultado tiene muy contento a Eugenio, ávido de que el público pueda ver a través de ViX la serie que se estrenará este 4 de octubre, con la que el actor se enfrenta a un nuevo reto, no sólo por rodar una historia de época, sino por las consecuencias del accidente que sufrió en agosto de 2022, que le dejó una severa lesión en el hombro izquierdo.

Con una vida frente y detrás de cámaras que conoció gracias a su madre, Silvia Derbez, Eugenio nos revela si a sus 63 años ha pensado en el retiro y lo que opina sobre los cambios en la forma de hacer comedia.

¿Cómo surge la idea de crear una película dentro de una serie y con una historia de un personaje tan conocido?

“Pues mira, para mí fue una sorpresa cuando llegaron los escritores de la serie. Son dos escritores de mucho prestigio en Hollywood, ellos han hecho películas como ‘Wedding Crashers, ‘We're the Millers’, ‘How I Met Your Mother’. Y ellos son los que se acercan con nosotros, ya habíamos trabajado con ellos en un par de proyectos, y nos dicen: ‘Eugenio, siendo latino, ¿sabías que existía esta historia?’. Me la platican y nunca me enteré de que había un Drácula en español.

Empezó un Drácula en español que se filmó en 1930, junto con la de Béla Lugosi, me empiezan a contar la historia y luego me comentan que la crítica de Hollywood acordó que es mucho mejor la versión en español que la versión en inglés. Entonces para mí fue como ‘¡Tenemos contar esta historia!’. Yo, como latino, como mexicano, quiero contar historias de latinos que triunfaron, sus historias de éxito y, además es una trama con mucho humor”.

¡Una gran manera de volver a la televisión, desde tus raíces!

“Sí, es mi regreso a la televisión, a la comedia en español. Desde que me fui a Estados Unidos me había dedicado a hacer casi todas las cosas en inglés. Pero es la primera vez que hago comedia otra vez en español para la televisión, es mi regreso también como director porque no había dirigido desde ‘No se Aceptan Devoluciones’, entonces esto es como mi bebé. Este proyecto me tiene verdaderamente feliz”.

La serie también tiene un poco de esta barrera del idioma que, con mucho humor, se intenta hablar en inglés o español creando un hilarante caos.

“Justo a eso se enfrenta este mundo, a todos los problemas que surgieron a raíz de que salieron las películas sonoras, ¿no? Cuando era el cine mudo las películas viajaban por todo el mundo, o sea, las películas de Chaplin, El Gordo y El Flaco, Rodolfo Valentino; todas esas películas viajaban por todo el mundo y todo mundo las entendía porque no había textos, eran nada más imágenes; y cuando empiezan las películas sonoras y hablan, pues empiezan a hablar en inglés y en ese entonces no había ni subtítulos ni doblaje ni nada. Entonces el mercado internacional se les cae y Hollywood empieza ver qué hacer.

Nadie quiere comprar las películas fuera de Estados Unidos y ahí es donde sale la idea, que viene del productor Carl Laemmle, y él es el que inicia con esta idea de hacer una versión mostrando los mismos sets y el mismo vestuario.

Lo que planteó en el primer episodio es real, eso de dónde hacen los castings, que más que hacer a la gente actuar, era ‘pruébate el vestuario y si te queda ya estás contratado’. Es real, son datos reales. Hicieron el casting por el vestuario, no, a ver, pruébate el saco te queda, pues órale ya eres. Hablas español y te queda el vestuario, ya, contratado. Es una historia de éxito, pero también con mucho humor. Hay muchas pequeñas historias que además están dentro de la serie, y que creo que la hacen una delicia. Todos los personajes son una joya. ¡No sabes a mí cómo me emociona! Porque pocas veces te encuentras un proyecto en donde todos los personajes, que para donde voltees, hay uno que te enamora. Ese es el caso de ‘Y Llegaron de Noche’, que todos los personajes tienen historias de sus propias historias y cada uno te va contando una cosa diferente. Además, todos están basados en hechos de la vida real”.

¿Por qué una serie y no una película?

“Porque había tantas cosas que contar que sentimos que nos daba más para una serie que para una película. Sentimos que era más el formato de serie que de películas. Son cosas que a veces nos juntamos y debatimos: ‘¿cómo la ven como serie?’, ‘¿Como sería como película?’, y ahí decidimos que por la cantidad de personajes y de historias que tenemos que contar, necesitaba más tiempo que 1 hora con 50 minutos; y es por eso que decidimos hacer estos ocho episodios de como 40 minutos”.

¿Fueron difíciles las grabaciones? ¿Hay secuelas de aquella lesión en el brazo que tuviste en agosto de 2022?

“Fíjate, fue muy difícil por muchas razones. Es una serie de época. Teníamos casi todos los días entre 100 y 150 extras, los cuales tenías que maquillar y vestir de época porque estamos filmando en los estudios. Ahí siempre había una cantidad importante de gente entrando, saliendo, con vestidos, diferentes personajes, el staff mismo además del staff real de la película.

Era complicado porque tenías que tener el camarógrafo, el asistente de producción, el iluminador, el utilero de la de mentiras más los de verdad. Era como tener dos staffs todo el tiempo, una cantidad impresionante de gente en los foros. Tuvimos que iluminar con luces de 1930 y todo fue un reto porque el fotógrafo nos dijo que no podía tener doble iluminación y necesitaba los focos de esa época.

Hay escenas en el castillo que están iluminadas con velas, con cientos y cientos de velas. A nivel técnico fue muy complicado, pero el resultado es hermoso porque ves una verdad absoluta a nivel estético, o sea, visualmente la serie es un caramelo.

Y, bueno, hablando cosas como las de mi brazo, no sabes, hay una escena de una pelea que no les quiero spoilear, en donde sí me preocupé porque no tiene mucho que salí de lo del accidente del hombro y era una pelea bastante complicada y bastante larga.

Nos fueron a entrenar, estuvimos entrenando durante semanas para esa pelea. Afortunadamente todo bien, pero sí le tenía mucho miedo a que no fuera capaz de realizar la escena justo por la lesión del hombro”.

Te unes a un gran elenco de actores y comediantes, ¿pero qué tan difícil es para un actor o comediante trabajar con Eugenio Derbez?

“(Risas) No, al contrario. A mí me tocó dirigir el piloto del primer episodio y el último, y lo difícil de dirigir el piloto y el primer episodio siempre es que tienes que encontrar los personajes y poner el tono de cómo va a ser cada uno. De ahí se basan los demás directores y los actores para decir: ‘Ah, ok así son los personajes’. A partir de aquí todo tiene que ser igual.

Entonces, yo siento que al revés, esa es una teoría mía, siento que un director que es actor tiene muchas más armas que uno que es simplemente director. Porque puedes encontrar secretos de cómo comunicarte con tus compañeros porque has estado del otro lado. Eso te ayuda mucho a poder comunicarte con ellos y saber cómo pedirles ciertas cosas. Sobre todo en comedia, en donde tienes que explicarles aquí hazme esta pausa, aquí hazme este gesto; a veces tienes que guiarlos para que den justamente lo que se necesita para que el chiste caiga”.

"No nos damos permiso de reír"

Con tantos años en la industria, ¿qué ha sido lo más complicado al enfrentarte a los cambios en la comedia? ¿Hacia dónde crees que va la comedia ahora que hay más canales de difusión?

“Yo creo que estamos pasando por un momento complicado, debo confesártelo. De por sí la comedia siempre evoluciona. Yo me acuerdo que cuando estaba haciendo mis programas, alguna vez dije que iba a hacer uno en donde iba a mezclar comedia de antes con la actual y empecé a ver todos esos programas que me fascinaban cuando era niño. Y cuando fui a la bibliotecas de Televisa (México) y empecé a sacar los programas para verlos nuevamente, ya no me resultaron tan chistosos como cuando los vi por primera vez.

Eso es porque el ritmo era mucho más lento, había un chiste cada cinco minutos y ahora como que todo es rápido, muy rápido. La comedia evoluciona, pero creo que lo que nos puede estar haciendo daño en la actualidad es que ahorita todo es políticamente incorrecto, no nos damos permiso de reír.

Esta cuestión de que todo es ofensivo, de que todo es políticamente incorrecto, de que todo está mal, de que no te puedes burlar de nada, creo que está matando la comedia. La comedia es eso, burlarte de algo, o sea, si yo te digo: ‘Fíjate que un borrachito que iba pasando y de repente...’. Lo que haya hecho el borrachito no quiere decir ni que apoyes al alcoholismo, no quiere decir ni que estés de acuerdo con lo que hizo el borrachito, pero ahorita ya todo es como ofensivo. O ‘¿Por qué te burlas del borrachito? Mi papá es alcohólico’. ‘El alcoholismo es una enfermedad, ¿cómo te atreves?’. Y si dices que él estaba haciendo pipí, responden: ‘¿Por qué normalizas que alguien se haga pipí en la calle?’. Esto lo estoy inventando, no pasó, quizá estoy exagerando, pero estamos pasando por una etapa en donde ya todo es ofensivo y es como, a ver, relájense, es un chiste. Es como si el día de mañana no pudieras hacer tampoco una serie porque podrían decir: ‘¡Ah! ¿Cómo se atreven a hacer una serie de un asesino? Están fomentando que la gente, mate’. Y no, estamos contando una historia de un asesino o de un enfermo o de un personaje que no quiere decir que le estemos fomentando, que tú como actor estés de acuerdo en cómo se comportó tal persona. Nada más estoy contando un chiste, estoy contando una historia, pero estamos pasando por tiempos difíciles con eso”.

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¿Qué le dirías a las personas que consideran que todo es ofensivo?

“Que se están perdiendo y se van a perder de cosas muy interesantes, la verdad. Yo lo veo porque continuamente lo platico con todos mis compañeros comediantes. Hay ideas maravillosas, nos mandamos mensajitos de repente de, no sé, si sucedió algo, escribimos entre nosotros, porque antes lo hubiéramos puesto en redes sociales y la gente se hubiera muerto de la risa. Ahora ya nos da miedo. Ahora ya nada más lo compartimos entre nosotros.

Creo que se están perdiendo de mucho, yo creo que están matando el humor con ese afán de estar siempre en lo correcto. El humor de eso se trata, de pisar callos, el humor siempre se burla de algo y en el momento en el que quieres decir ‘no te burles de tal’, se acaba el humor, ya no hay chistes. Entonces ya no puedes hacer humor porque el humor siempre se va a burlar de algo".

¿Hubo alguna parte de la serie que dejaran fuera por este detalle?

“Sí, hubo muchas que tuvimos discusiones, y duele. Yo siempre las peleo, siempre trato de hacer mi estilo de humor y el que no quiera verlo, pues no lo vea, pero creo que coartarnos a nosotros mismos es el peor error que podemos cometer. De repente hay discusiones en donde tienes que consultarlo con el estudio, con los productores; y sí, llegó a haber un par de ocasiones en la serie, pero en general la mayoría las peleé para que no me quitaran nada, y espero que nadie se ofenda".

Hablando de esos años de experiencia, ¿has pensado o ha pasado por tu mente la idea del retiro o seguirás llevando la risa a la gente por tanto tiempo como sea posible?

“Mira, hay años como éste y el pasado que de repente digo, no, ya me quiero retirar. Pero por otro lado, ahora sí, como dicen los memes, luego veo lo que estoy haciendo y se me pasa.

Me emocionan mucho proyectos como ‘Y Llegaron de Noche' porque hay cosas que te apasionan y que te enamoran, y este proyecto, de verdad, ¡no tienes idea la ilusión que me hace!

Son de esas cosas que digo por eso decidí ser actor y por eso decidí dedicarme a esto, por proyectos así. Me llena de orgullo verlo, es de estas cosas que ya no puedo esperar a que la gente vea y que ya quiero que salga para que la gente lo vea.

Así es que por lo pronto no, no creo retirarme porque estoy haciendo cosas que me tienen muy emocionado y muy ilusionado. Todavía va a haber Eugenio para rato".