¿Tronarse los dedos causa artritis? La verdad detrás de un mito popular
"Sonarte los dedos te va a dar artritis en las manos", me decía mi mamá para evitar que me los tronara. "¡No te suenes los dedos, se te van a poner gruesos!", insistía cuando veía que sus consejos no surtían efecto.
Pero es que esa sensación extrañamente placentera se hace irresistible y era como si los deditos te hablaran cada día, clamando ser tronados otra vez, "¡Estamos apretados!". En realidad no están apretados, no están de ningún modo. No necesitan ser tronados para que suenen, así que de alguna manera la voz materna hizo efecto y ya no me los sueno, más cuando me pregunto si tendrá razón con el tema de la artritis y la deformación.
"Es un mito que tronarse los dedos cause artritis. Pero sí está muy extendido que haga daño y pueda generar deformaciones. En realidad, no hay un respaldo científico que compruebe que se afectan las articulaciones de los dedos cuando lo tronamos", dice el fisioterapeuta Carlos Rojas.
"Aunque hay quienes piensan que sí puede generar daño, yo soy de la vertiente que piensa que no. De hecho, yo mismo tengo ese hábito y no tengo ningún tipo de deformidad a mis 53 años de edad", dice el especialista y agrega que los dedos suenan porque se forma una cápsula de gas dentro de lo que es el líquido sinovial y eso es lo que explota cuando los traccionamos".
Más específicamente, este gas que compone estas burbujas es nitrógeno, según explica el especialista en reumatología Jason Liebowitz, médico consultado por el HuffPost, quien agrega que no existen evidencias científicas de que tronar los dedos se asocie con el desarrollo de artritis, ni tampoco de que sea perjudicial para la salud de las manos, por lo menos de una manera evidente.
"La artritis no se genera porque se suenen los dedos, es una patología definida hereditaria que puede ser de distintos tipos y contempla inflamación y la cristalización del líquido sinovial. Para decirlo coloquialmente, el líquido sinovial es como un aceite lubricante que protege las articulaciones, es como decir el líquido que se aplica en las visagras de las puertas para evitar que se oxiden", dice Rojas y agrega: “ese líquido, en las personas propensas a esta enfermedad hereditaria, se cristaliza y provoca que se pierda movilidad en las articulaciones, dolor, rigidez y que se genere cierta deformidad".
Se han realizado muchos estudios en este sentido y hasta ahora no se ha encontrado una relación entre la enfermedad y la acción de sonarnos los dedos, uno de los más reconocidos es el del doctor Donald Unger, ganador del premio Nobel, por su investigación. Y es que Unger se tronó dos veces al día, todos los días durante más de 50 años, los dedos de su mano izquierda, mientras que en la mano derecha no los tronó. Al culminar el experimento notó que no había cambio en la mano izquierda, de hecho, las dos manos estaban iguales.
No aparece artritis, ¿pero puede ocurrir algo más?
Si bien el tema de la artritis y la deformación causada por tronar los dedos permanece en el limbo de los mitos, es importante tener en cuenta que tronar los dedos o cualquier otra parte con demasiada fuerza sí podría ocasionar un daño en los tendones que conectan músculos y huesos. Aunque es algo que ocurre raramente, sí puede pasar. Así lo especifica el doctor Scott Zashin, citado por el HuffPost.
Aunque es una rareza, sí es posible que se generen algunas lesiones o que el tronar los dedos esté relacionado con la debilidad en las manos o hinchazón. Así lo expuso un estudio publicado en la década de los 90 que examinó la relación entre el tronar de los dedos y las funciones de las manos.
Adicionalmente, hay que decir que, aunque no hay daños comprobados, tampoco se ha demostrado que sonar, traccionar o tronar los dedos y las articulaciones, sea beneficioso de alguna manera. De hecho, si de algún perjuicio hablamos, está el que sufren quienes detestan el sonido que hacen las burbujas de aire en nuestras articulaciones al explotar.
Asimismo, debemos estar alerta ante cualquier molestia que podamos sentir en los dedos y que estemos confundiendo con esa rigidez que provoca tronarse los dedos, pero puede estarse tratando de alguna afección importante.
Si se siente dolor en los dedos, o presentamos hinchazón, debilidad, deformación lo más recomendable es visitar al especialista, puesto que podemos estar ante uno de los tipos de artritis. De hecho, según se explica en los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades, la artritis comprende más de 100 enfermedades y afecciones reumáticas, entre las cuales la artrosis es la más común. Existen la artritis reumatoide, el lupus, y la fibromialgia, entre otras, que no solo afectan los dedos sino también otros órganos.