“Si yo fuera tu madre”: el extraño poema que la actriz AnnaLynne McCord le dedicó a Vladimir Putin, en medio de la invasión a Ucrania

“Si yo fuera tu madre”: el extraño poema que la actriz AnnaLynne McCord le dedicó a Vladimir Putin, en medio de la invasión a Ucrania
instagram.com/theannalynnemccord

En la madrugada del jueves, el mundo entero se conmovió con las primeras imágenes de la violenta invasión rusa a su vecina Ucrania. Las redes sociales se convirtieron, como era de esperarse, en un canal de debate y en la plataforma elegida por millones de personas para expresar sus opiniones sobre la decisión de Vladimir Putin y el desconsuelo ante la inminencia de una nueva guerra. Muchos famosos se volcaron también a Twitter y a Instagram para dejar plasmadas sus impresiones. La actriz estadounidense AnnaLynne McCord fue una de ellas, pero su mensaje terminó generando más controversia que adhesiones.

La actriz, conocida por ser una de las protagonistas de la remake 90210 y por participar en la serie Nip/Tuck, le dedicó un poema al presidente ruso y se grabó a sí misma recitándolo. El texto lleva por título “Si fuera tu madre” y, en él, da por sentado que “la base del problema” radica en la difícil infancia de Putin, que fue abandonado por sus padres a muy corta edad. Entonces, señala cuán distinta sería la historia si el mandatario fuera su hijo.

El video fue subido el jueves a la mañana, cuando las noticias daban cuenta de los primeros bombardeos a distintas ciudades ucranianas y ya se hablaba de las primeras víctimas fatales. En menos 24 horas, fue visto por más de 9 millones de personas y fue merecedor de varias imitaciones que distintos usuarios subieron a Twitter como respuesta.

“Estimado presidente Vladimir Putin: lamento mucho no haber sido tu madre. Si lo fuera, habrías sido muy amado, sostenido en los brazos de una luz alegre, y esta difícil situación nunca se hubiera desplegado ante nuestros ojos”, comienza expresando, sin dejar de mirar a cámara.

“Si yo fuera tu madre, el mundo habría sido cálido; con muchas risas y alegría. Nada nos haría daño. No puedo imaginar la mancha, el dolor que le robó el alma al niño pequeño que debes haber sido y te llevó a pensar que vivías en un mundo cruel e injusto. ¿Es por eso que ahora decidís que nadie vea lo bueno que hay en vos? ¿Es por eso que no te escondés ni te avergonzás de reconquistar el mundo? ¿Fue porque, tan temprano en la vida, toda esa lucha sacudió tu pequeño cuerpo con miedo?”, preguntó la actriz.

“Si yo hubiera sido tu madre y el mundo fuera frío, habría muerto para calentarte. Habría muerto para protegerte de la injusticia, la violencia, el terror y la incertidumbre. Habría muerto para darte vida. Oh, querido, señor presidente Putin, si tan solo hubiera sido tu madre... Tal vez la tortura de la juventud no hubiese impregnado dentro de tu corazón la adscripción a tal lealtad contra ese mundo que pensaste que era tan cruel“, expresó luego.

Y siguió especulando: “Quizás estimarías la vida humana. Y en esta noche, en lugar de Madre Rusia, me llamarías y yo liberaría tu mente con el amor que solo una madre puede dar y solo una madre puede quitar. Porque cuando abraza, una madre no hace daño y deja a su hijo por la promesa de un hombre... Sea cual sea su historia, señor presidente Putin, no puedo imaginar cómo se siente en su corazón, pero sé que si yo fuera tu madre, sería un comienzo hacia la conciencia de cuán poderoso ser de luz podrías ser si tu mente estuviera libre de la violencia que has visto cuando tenías dos o tres años. No puedo creer que nací demasiado tarde y en un lugar diferente cuando hubiera amado tanto verte jugar donde quiera que vayas”, concluyó.

Consultada por Newsweek, la actriz explicó que, al despertarse con semejante noticia, se sintió muy angustiada y pensó que lo mejor que podía hacer pasa sentirse mejor era expresar sus emociones. “Tuve que usar el arte porque no sabía qué hacer”, señaló. Y agregó: “Me siento desesperada y sé que gran parte del mundo se siente así”.

McCord es, además, una activa defensora contra la trata de personas y la violencia sexual. Esa experiencia y su propia lucha contra sus traumas, explicó, le ayudaron a entender que lo importante es abordar la raíz de los problemas y no solo tratar los síntomas. Con esa premisa, decidió escribir su poema centrándose en las que considera las causas del accionar del líder ruso. “Cuando miré a Putin, apenas me desperté, pensé: ‘¿Qué le pasó?’ Sé lo suficiente sobre el trauma y, claramente, parecía un problema con su mamá. Siempre hay una causa raíz”, fundamentó.