Un nuevo estudio da razón a las mujeres: las vacunas del COVID pueden alterar su ciclo menstrual
Durante gran parte de mi vida adulta he tomado regularmentepíldoras anticonceptivas, por lo que mi período ha sido inexistente. Así que imagina mi sorpresa cuando, en diciembre de 2021, tuve el período y unos cólicos menstruales insoportables. Fue algo tan inusual que acudí a Urgencias preocupada porque el dolor y la sangre fueran la señal de algo aterrador, como un embarazo ectópico o una enfermedad no diagnosticada.
Ni el médico de Urgencias, ni el ginecólogo al que acudí posteriormente, me dieron una explicación oficial a lo que me ocurría. Sin embargo, algunos meses después, cuando acudí a otro ginecólogo, me sugirió que los síntomas podrían estar relacionados con mi reciente vacuna del COVID.
Aunque después de la inyección había sufrido las reacciones típicas, como fiebre leve y dolores musculares, nunca se me ocurrió pensar que la vacuna del COVID podría afectar mi ciclo menstrual. Pero lo cierto es que existe una creciente evidencia que sustenta esta teoría.
La última, un estudio publicado en Science Advances en septiembre de 2023 realizado por Kristine Blix, del Instituto Noruego de Salud Pública en Oslo, descubrió que las mujeres que no menstrúan tenían más probabilidades de experimentar sangrado vaginal inesperado después de la vacunación del COVID-19 que antes de que existieran las vacunas. La muestra incluyó tanto a mujeres posmenopáusicas como premenopáusicas, personas como yo que no tienen su período debido al consumo de anticonceptivos.
Antes de esa investigación, en enero de 2022, un estudio financiado por el Instituto Nacional de Salud descubrió que la vacuna del COVID-19 se asoció con un ligero aumento temporal de la duración del ciclo menstrual.
Y hace un año, en septiembre de 2022, un gran estudio publicado en BMJ Medicine en el que se analizaron los datos de casi 20 000 personas, confirmó el vínculo entre la vacunación del COVID-19 y el aumento temporal de la duración del ciclo menstrual.
Además de esos estudios publicados, también hay muchas evidencias anecdóticas, o al menos eso fue lo que encontré cuando eché un vistazo en Reddit mientras intentaba comprender la causa de mis síntomas.
“Después de la inyección, básicamente tuve 2 períodos al mes”, escribió una persona en un hilo de diciembre de 2022. “Mi período era mucho más abundante de lo que solía ser antes de vacunarme”.
Otra persona contó: “cuando mi madre se vacunó, tuvo el período. Hacía ocho años que había tenido la menopausia y no había menstruado desde entonces. Tan pronto como se vacunó, al día siguiente, comenzó a sangrar durante una semana. Después de eso no volvió a menstruar. Fue muy extraño, de manera que se hizo muchas pruebas, pero los resultados eran normales”.
Otra mujer escribió: “tuve manchas durante todo el mes de julio” y dijo que sus períodos se volvieron “tan severos” que los calambres menstruales la hacían vomitar, algo que, por desgracia, me resultaba familiar.
Kate Clancy, antropóloga biológica de la Universidad de Illinois, también notó una avalancha de evidencias anecdóticas, como escribió en un reciente artículo de opinión para el Washington Post, algo que finalmente la motivó, junto a un colega, a realizar una encuesta a 165 000 personas sobre sus patrones menstruales después de la vacunación.
“Nuestra encuesta tenía como objetivo documentar las experiencias de los participantes durante las primeras fases de la vacuna. Queríamos recopilar esos datos sobre el terreno, a medida que surgían, por lo que nuestra muestra fue autoseleccionada. Sin embargo, fue sorprendente descubrir el gran volumen de encuestadas sorprendidas por un sangrado abundante y doloroso”, escribió. “Las personas informaron que los cambios en la menstruación eran incómodos y a menudo dolorosos. Algunas incluso describieron un sangrado tan profuso que traspasaba la ropa en el trabajo. Las mujeres posmenopáusicas estaban aterrorizadas por la posibilidad de tener cáncer”.
Entonces, ¿qué está pasando?
El Dr. Amesh Adalja, académico principal del Centro Johns Hopkins para la Seguridad de la Salud, explicó que es importante que las personas sepan que lo que les ocurre tiene una explicación. Aunque es necesario estudiar esta teoría más a fondo, las vacunas del COVID causan una respuesta inflamatoria en el cuerpo, por lo que algunas personas sufren fiebre o escalofríos horas después de la inyección. Otros factores, como la enfermedad, también generan una respuesta inflamatoria que puede afectar el ciclo menstrual.
“En general, sabemos desde hace tiempo que la inflamación influye en los ciclos menstruales alterando la cantidad de sangrado. La respuesta inmunitaria puede alterar todos los factores relacionados con la menstruación”, indicó.
Adalja sugiere que ahora este fenómeno ha llamado la atención porque como sociedad hemos estado “siguiendo muy de cerca los efectos de las vacunas del COVID-19” en particular.
Sin embargo, como señaló un artículo de opinión del New York Times de Alice Lu-Culligan y el Dr. Randi Hutter Epstein, ambos de la Escuela de Medicina de Yale, los ensayos clínicos no suelen investigar y documentar los cambios menstruales como hacen con otras reacciones, lo cual forma “parte de una larga historia en la Medicina que no toma en serio los cuerpos de las mujeres”.
Esos cambios menstruales tienen sentido puesto que “el sistema inmunitario influye en cada fase del periodo, por lo que es posible que las vacunas, que están diseñadas para activar una respuesta inmunitaria, cambien temporalmente el curso normal del mismo. Por ejemplo, un sistema inmunitario activado podría alterar el equilibrio habitual de las células y moléculas inmunitarias en el útero. De hecho, los estudios han descubierto que ese tipo de trastornos contribuyen a los cambios en el ciclo menstrual, incluyendo un sangrado más abundante”.
Ese tipo de cambios son un efecto secundario potencial y temporal de la vacuna. Si te ocurre, debes comentárselo a tu médico.
Vale la pena señalar que “no está relacionado con ningún tipo de riesgo para la salud”, señaló Adalja. Sin embargo, es normal que si le ocurre a una persona posmenopáusica, “se someta a una serie de exámenes médicos para descartar patologías como el cáncer de endometrio. De hecho, es importante que cuando los médicos analicen el sangrado posmenopáusico, se aseguren de que la culpa es de la vacuna y no de un tumor endometrial”.
Sin duda, esta información me habría resultado muy útil cuando estaba preocupada por lo que le ocurría a mis periodos.
Elizabeth Swenson, ginecóloga obstetra de Wisp, coincide: “es importante realizar investigaciones sobre los efectos de los medicamentos en el cuerpo... El ciclo menstrual es un componente clave de la salud femenina, por lo que es imprescindible conocer todo lo que podamos sobre cualquier cosa que pueda afectarlo, por el bien de la salud de las mujeres en el futuro.