Una antigua fábrica, convertida en sofisticado hogar

Texto: Lizbeth López

En las afueras de la ciudad española de Barcelona, en la localidad de San Justo Desvern, se encuentra esta enorme construcción que fue una fábrica y que, ahora, se alza como una gran escultura habitable, reconstruida por el arquitecto Ricardo Bofill.

Comienzos

El primer acercamiento del arquitecto con el inmueble, fue en el año de 1973, cuando supo que dejarían de utilizarla como planta de producción, y quiso adquirirla para transformarla en su espacio para vivir y trabajar. Y aunque no lo logró en ese momento, años después pudo ser dueño del terreno.

El enorme contraste entre el gris del concreto y el entorno natural que la rodea, es en sí misma una muestra de lo que este proyecto significa. “Seducidos por las contradicciones y la ambigüedad del lugar, decidimos quedarnos con la fábrica, y modificando su brutalidad original, esculpirla como una obra de arte”, describe el sitio web del arquitecto.

Al ver la enorme construcción, el arquitecto Ricardo Bofill se propuso transformar su “brutalidad” en una obra de arte. – Foto: instagram.com/bofillarquitectura
Al ver la enorme construcción, el arquitecto Ricardo Bofill se propuso transformar su “brutalidad” en una obra de arte. – Foto: instagram.com/bofillarquitectura

Deconstrucción

El proceso para lograr que esta construcción dejara de ser una pila de cemento, ha sido largo. Primero se tuvo que demoler gran parte de lo ya hecho para dejar al descubierto las formas de los cimientos.

Posteriormente, se creó el entorno vegetal que ahora rodea la estructura, que incluye palmeras, eucaliptos, olivos y plantas trepadoras. Y al final, se cambió la funcionalidad de los 5 mil metros cuadrados (5,979 yardas cuadradas) de obra.

La abundante vegetación cubre muros y se muestra en todo su esplendor. – Foto: instagram.com/bofillarquitectura
La abundante vegetación cubre muros y se muestra en todo su esplendor. – Foto: instagram.com/bofillarquitectura

Espacios multifacéticos

Actualmente en los silos (las torres cilíndricas de cemento), se encuentra el estudio del Taller de Arquitectura de Bofill. El despacho del catalán, en el primer piso de uno de ellos, es un espacio con aire minimalista, con amplias entradas de luz natural y techos altos.

En lo que alguna vez fue el área de manufactura, actualmente está instalada una amplia sala de conferencias y exposiciones, conocida como La Catedral.

Además, cuenta con departamentos para invitados, que comparten los jardines de la residencia principal y están rodeados de esculturas no intencionales, como escaleras que no llevan a ningún sitio, de acuerdo con la revista Architectural Digest.

La realización de un hogar

El espacio de residencia consta de una gran sala de estar decorada con colores neutros y ventanas en arco. La cocina-comedor es un punto de reunión moderno, con muebles de mármol y hierro forjado, en los que destaca la combinación blanco y negro con acentos ocre.

Pero la magia de La Fábrica, es que cada espacio está particularmente decorado. No hay habitaciones iguales, ni muebles en serie, todo está pensado específicamente para el lugar que ocupa y para formar una elegante armonía.

Los interiores ostentan una decoración minimalista, que se basa en la elegancia y no precisamente en el lujo. – Foto: instagram.com/bofillarquitectura
Los interiores ostentan una decoración minimalista, que se basa en la elegancia y no precisamente en el lujo. – Foto: instagram.com/bofillarquitectura

¿Qué estructura arquitectónica convertirías en tu hogar?

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