Esta es la verdadera razón por la que asesinaron a Prue en 'Embrujadas', según dos de las protagonistas

Shannen Doherty, la encargada de dar vida a Prue Halliwell en las tres primeras temporadas de 'Embrujadas' credit:Bang Showbiz
Shannen Doherty, la encargada de dar vida a Prue Halliwell en las tres primeras temporadas de 'Embrujadas' credit:Bang Showbiz

Han tenido que pasar diecisiete años para que hayamos podido descubrir por fin qué pasó exactamente en la serie 'Embrujadas' -conocida también como 'Charmed'- para que una de las tres hermanas fuera asesinada y los guionistas se inventaran una nueva hermanastra para continuar con la historia.

Que las protagonistas mantenían una relación muy complicada era un secreto a voces incluso antes de que Shannen Doherty dejara la serie. La actriz, que ya había salido mal parada de 'Beverly Hills, 90210' por sus discusiones con el resto del reparto, aseguró en su momento que había sido su decisión abandonar el proyecto. Sin embargo, en la industria siempre se rumoreó que había sido despedida sin miramientos por su comportamiento difícil.

Este lunes su compañera de reparto Holly Marie Combs ha acudido al podcast de Shannen para explicar qué ocurrió realmente, y su versión de los hechos dista mucho de la 'no-oficial' que se conocía hasta ahora. Según su testimonio, ni era necesario despedir a Shannen ni ella era partidaria de hacerlo. El problema es que la tercera estrella de la serie, Alyssa Milano, había dado un ultimátum al productor Jonathan Levin porque se negaba a seguir trabajando con Shannen.

"Jonathan me dijo: 'No era nuestra intención, pero nos han arrinconado, estamos en una situación en la que es una u otra'", le confesó Levin durante una reunión que Holly convocó a principios del 2000 para pedirle explicaciones.

Holly Marie Combs ha dado a entender que Alyssa había construido un caso contra ellas dos, "documentando cada ocasión en que se había sentido incómoda en el set", y amenazó supuestamente con denunciar a los productores por crear un "ambiente hostil en el lugar de trabajo" si la obligaban a marcharse.

A Holly, que protagonizó las ocho temporadas de 1998 a 2006 como Piper, toda aquella situación la pilló completamente desprevenida. Ella no recuerda que se intercambiaran "palabras fuera de tono" ni que se hubieran producido "altercados" en público. De hecho, insiste en que las tensiones entre ellas se producían siempre entre bastidores y que ni el equipo ni las estrellas invitadas se percataron nunca de ello.

La actriz decidió que no quería seguir trabajando en la serie sin Shannen, pero la respuesta fue tajante: si se marchaba, sería ella a quien acabarían demandando por incumplimiento de contrato. "Hay intérpretes que se comporta realmente mal y se salen con la suya. Creo que la gente no entiende que eso no fue lo que pasó con nosotras", ha lamentado Holly.

Al final, el personaje de Prue Halliwell murió al final de la tercera temporada y fue sustituido por Rose McGowan en el papel de Paige.

A Shannen ya no le da vergüenza reconocer que se pasó un año reviviendo todas sus interacciones con Alyssa, y fue incapaz de recordar un solo momento en que se portara mal con ella. Es más, asegura que no podría haber sido más amable y comprensiva cuando la dirigió en uno de los episodios.

También tiene claro que a día hoy habría emprendido acciones legales y habría sido honesta con los fans acerca de su despido, porque su silencio -para salvar su orgullo- hizo que quedara como la mala de la historia.

"A medida que te haces mayor, aceptas que una situación ocurrió. Aceptarlo y seguir adelante con tu vida no equivale a perdonar. Simplemente aprendes una lección y miras a alguien de otra manera y sigues adelante", ha reconocido con resignación.