Si viajas en avión con tus hijos, asegúrate de llevar la documentación que valide el parentesco

Los recientes incidentes en los aeropuertos sugieren que llevar el acta de nacimiento, el pasaporte u otros documentos de tus hijos ayudará a mitigar los incidentes en la sección de seguridad, que son alarmantes y a menudo hacen perder mucho tiempo. (Lucy Engelman/The New York Times)
Los recientes incidentes en los aeropuertos sugieren que llevar el acta de nacimiento, el pasaporte u otros documentos de tus hijos ayudará a mitigar los incidentes en la sección de seguridad, que son alarmantes y a menudo hacen perder mucho tiempo. (Lucy Engelman/The New York Times)

Shimea Hooks estaba tan distraída con su equipaje de mano lleno de leche materna que no entendía qué le estaba diciendo el agente de la Administración de la Seguridad en el Transporte (TSA, por su sigla en inglés).

Hooks, de 32 años, estaba en el aeropuerto internacional de San Diego, a punto de volar sola por primera vez con su hijo, Caleb, que entonces tenía 5 meses. En el control de seguridad, el agente miró a Hooks, que es negra, y luego a Caleb, que es mitad coreano y no se parece a ella para nada.

“¿Dónde está su papá?”, le preguntó al agente.

Caleb tiene dos madres: Hooks, que lo adoptó; y la esposa de ella, Corritta Lewis, que lo dio a luz. En ese momento, los trámites de adopción no habían finalizado, y Hooks se dio cuenta de que no llevaba ninguna documentación legal que demostrara el parentesco que tiene con su hijo.

“Yo era una mamá nueva y tenía a este bebé que se veía asiático”, relató Hooks, que dirige un sitio de viajes familiares junto a Lewis. Ella cree que la señalaron porque era una madre soltera que viajaba sola y porque su hijo es de otra raza. “Me dio miedo que me fueran a quitar a mi hijo”.

Los padres que viajan con niños suelen estar tan concentrados en acordarse de los boletos y en montones de cosas, como pañales y juguetes, que se olvidan de empacar un elemento fundamental: la prueba de parentesco con sus hijos. Es un descuido, dicen los abogados especializados en derecho de familia, que puede provocar importantes retrasos en los aeropuertos y pasos fronterizos, sobre todo cuando los padres están divorciados o en casos en los que existen estructuras familiares no tradicionales, o cuando los hijos no tienen los mismos apellidos que sus padres.

La ley no obliga a los padres a llevar esos documentos cuando vuelan. Pero en 2020, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos hizo de la lucha contra el tráfico de niños una de sus prioridades, y en marzo puso en marcha nuevos programas de formación contra el tráfico en colaboración con el Departamento de Transporte, específicamente para los empleados del sector aéreo.

También se han producido varios incidentes de importancia con viajeros detenidos por la policía, como el de una madre que viajaba con su hija birracial en Denver y el de una mujer negra que volaba con su hermana blanca de 4 años en Dallas, de las que se sospechó erróneamente que eran víctimas de trata. Estos casos han llevado a los abogados especializados en derecho de familia a hacer un llamado a la prudencia. En las redes sociales y en los foros de viajes en línea, muchos padres que han viajado solos con sus hijos han compartido historias de agentes de la TSA que interrogan directamente a sus hijos pequeños para establecer la relación, sobre todo cuando el padre o madre en cuestión no tiene el mismo color de piel o apellido que su hijo.

“Siempre les digo a mis clientes que lleven consigo el certificado de nacimiento del niño y cualquier pasaporte a su nombre”, dijo Josh Northam, abogado de derecho de familia en Dallas. Cuando hay disputas de custodia, añadió Northam, los padres deben tener también el formulario de “consentimiento para viajar” que suelen exigir las órdenes judiciales existentes.

En el caso de Hooks, el agente llamó a un colega y ambos le pidieron que explicara su relación con el niño. Luego le pidieron que mostrara fotos en su teléfono para demostrar que era su madre. Después de que les enseñó varias fotos tomadas en casa con Caleb y su esposa, la dejaron pasar.

Hoy en día, cuando Hooks o Lewis vuelan con Caleb, que ahora tiene 3 años, cada una lleva un paquete lleno de papeles, incluyendo sus formularios de adopción, su certificado de nacimiento y muchas fotos familiares.

La mayoría de los agentes de la TSA no son agentes policiales y no están facultados para arrestar a las personas. Pero sí pueden detener a los viajeros y llamar a la policía aeroportuaria, que se encuentra en el lugar y si puede realizar detenciones.

Los trabajadores de la TSA, los agentes del Departamento de Seguridad Nacional y de la Administración Federal de Aviación y los empleados de las principales aerolíneas reciben formación obligatoria sobre el secuestro y el tráfico de niños, y con justa razón: el Departamento de Estado de Estados Unidos calcula que 24,9 millones de personas son víctimas de trata en todo el mundo, y se cree que los niños constituyen casi un tercio de las víctimas, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, o UNICEF.

Miles de agentes de la TSA reciben también formación sobre detección de comportamientos y así aprender a identificar los signos de estrés o miedo entre los pasajeros y marcarlos para que sean sometidos a más revisiones.

En los puntos de control de seguridad, la TSA ha modificado los procedimientos de control diseñados para niños que se ven de 12 años o menos. Por ejemplo, se permite que los niños más pequeños se dejen puestos los zapatos y las chamarras ligeras durante el control, y se procura no separarlos de sus padres o tutores. Pero algunos padres dicen que también interrogan directamente a sus hijos.

En los casos en que los padres se están divorciando o se encuentran en una disputa por la custodia, la necesidad de llevar la documentación es aún más urgente, afirmó Andrew Zashin, un abogado de derecho de familia y profesor adjunto de la Facultad de Derecho de la Universidad Case Western Reserve. Esto se debe a que tener la custodia de los hijos no garantiza automáticamente a los padres el derecho a subir a un avión con ellos.

“Hay una diferencia entre los derechos de custodia y los derechos de posesión”, explicó Zashin. “El hecho de tener derechos de custodia no significa que tengas derecho a hacer lo que quieras con un niño”.

Zashin dijo que es mejor planearlo con mucha antelación y llevar una copia de todos los acuerdos de custodia, con un sello de notario para mayor seguridad, así como una carta firmada por el otro progenitor en la que este da su consentimiento para que el menor viaje. Esta idea se aplica tanto a los viajes internacionales como a los nacionales si se va de un estado a otro.

E incluso cuando no hay disputas por la custodia, dijo Zashin, cualquier padre que viaje con niños debe adoptar una actitud de “más vale prevenir que lamentar”. El abogado recomienda viajar con el acta de nacimiento y el pasaporte del niño, así como con documentos que solo tendrían los padres, como las boletas de la escuela o los historiales médicos, que pueden ayudar mucho a disipar las sospechas en un control de seguridad.

“No es necesario llevar una maleta llena de cosas”, dice. “Pero debes tener una pequeña bolsa con todo lo que podrías necesitar. Y luego esperar que no necesites nada de eso”.

c.2022 The New York Times Company