El viaje de Taylor Swift a Las Vegas termina con una victoria en el Supertazón

Taylor Swift abraza al ala cerrada de los Jefes de Kansas City Travis Kelce después de que los Jefes ganaron el Supertazón LVIII contra los 49ers de San Francisco en el Estadio Allegiant en Las Vegas, el domingo 11 de febrero de 2024. (Doug Mills/The New York Times)
Taylor Swift abraza al ala cerrada de los Jefes de Kansas City Travis Kelce después de que los Jefes ganaron el Supertazón LVIII contra los 49ers de San Francisco en el Estadio Allegiant en Las Vegas, el domingo 11 de febrero de 2024. (Doug Mills/The New York Times)

El domingo, los Jefes de Kansas City ganaron su tercer Supertazón en las últimas cinco temporadas al vencer 25-22 a los 49ers de San Francisco en tiempos extras. Y, mientras algunos jugadores de la NFL pasan toda su carrera sin ganar un campeonato, alguien que acaba de llegar a Kansas City probó las mieles de la victoria en su décimo tercer partido.

Taylor Swift, quien ha estado saliendo con Travis Kelce, el ala cerrada estrella de Kansas City, cambió la conversación de la NFL durante toda la temporada, pues atrajo a un nuevo público a la liga e inspiró fuertes emociones (tanto positivas como negativas) entre los aficionados. Y, como era de esperarse, estuvo en el estadio animando a Kelce y a los Jefes en su remontada.

Después del partido, Swift celebró en el campo con Donna Kelce y el resto de los familiares y amigos de Kansas City, mientras Travis Kelce cantaba una versión realmente memorable de “Viva Las Vegas”.

Luego, se encontró con Kelce para celebrar después de que pronunció unas palabras.

“Fue increíble”, le dijo Swift a Kelce en un video grabado en el campo después del juego. “Fue lo más fuera de serie que he vivido”.

‌Después del juego, a Kelce le preguntaron que si podía pensar en una pareja que hubiera tenido una mejor semana que la de ellos, con los dos Grammy que ganó Swift y su victoria en el Supertazón.

“Es como estar en la cima del mundo”, respondió. “Se siente genial”.

Las mujeres veían el Supertazón desde antes de que Taylor Swift y Travis Kelce fueran una pareja.
Las mujeres veían el Supertazón desde antes de que Taylor Swift y Travis Kelce fueran una pareja.

¿Alguien dudó de su asistencia?

Tal vez ya sepas que Swift es buena guardando secretos. Más allá de las fechas de sus conciertos, sus planes casi no se anuncian de antemano. Esto ha provocado que algunas personas hayan ideado sus propios métodos para averiguar qué está tramando. Por ejemplo, antes de un partido de Kansas City en octubre, un productor de la NBC mencionó que mandó un avión de reconocimiento para buscar escoltas policiales en los alrededores del Estadio MetLife con la esperanza de alertar al equipo de televisión en caso de que apareciera Swift. (Y sí llegó).

La semana pasada, a Kelce lo inundaron con preguntas sobre Swift y, aunque comentó que había escuchado parte de su próximo álbum —advertencia: le gustó—, no ofreció ningún detalle sobre si ella iba a estar en el juego.

Sin embargo, Swift llegó al Estadio Allegiant el domingo por la tarde a tiempo para el partido. Caminó por los túneles del estadio vestida con blusa y pantalones negros, así como una chaqueta roja en el hombro —y lució un collar de diamantes y oro personalizado de Stephanie Gottlieb con el número 87 de Kelce—, y luego se dirigió a las suites de lujo.

La transmisión de la CBS no la mostró mucho en una primera mitad discreta para Kelce y Kansas City, pero apareció de forma regular cuando el equipo remontó el marcador para ganar el partido y Kelce realizó varias jugadas clave en el último cuarto y en el tiempo extra.

Pero, ¿no estaba en Tokio… el sábado por la noche?

Por supuesto que sí. Su gira Eras se reanudó hace poco y el sábado por la noche, en Tokio, interpretó otro maratón de su extenso catálogo de canciones. Debido a que los vuelos de Tokio a Las Vegas suelen durar 13 horas o más y los seres humanos necesitan dormir, hubo preocupación de que no pudiera llegar a tiempo al partido.

La Embajada de Japón en Washington D. C. señaló que el tiempo no era un obstáculo real para Swift. En primer lugar, un avión privado reduce el tiempo del viaje (y es un lugar donde se puede dormir en paz si es necesario). En segundo lugar, la línea internacional de cambio de fecha estaba a su favor.

En 1873, antes de que existiera de manera oficial la línea internacional de fecha, el escritor Julio Verne trazó la ventaja temporal de Swift en “La vuelta al mundo en 80 días”. En el libro, el protagonista, Phileas Fogg, cree haber perdido su apuesta tan solo para darse cuenta de que la distancia y la dirección de sus viajes lo habían salvado:

En su viaje hacia el este se había dirigido hacia el sol, por lo que los días disminuían para él hasta cuatro minutos conforme cruzaba grados en esta dirección. Hay 360 grados en la circunferencia de la Tierra que al multiplicarse por cuatro minutos dan exactamente veinticuatro horas, es decir, el día que ganó sin querer. En otras palabras, aunque Phileas Fogg, mientras viajaba al este, vio que el sol pasó por el meridiano 80 veces, sus amigos en Londres tan solo lo vieron pasar por el meridiano 79 veces. Por eso lo esperaban en el Reform Club el sábado y no el domingo, como pensaba el señor Fogg.

O, como lo resumió de forma más sucinta la serie “The West Wing” en una escena en la que se hablaba del viaje del presidente Bartlett de Tokio a Washington D. C. (y que hace poco se volvió viral en línea):

Josh: ¿Aterrizará en Washington una hora antes de despegar?

Sam: Sí.

Para las generaciones mayores, esas escenas ayudaron a explicar la logística de la línea de fecha internacional. Para la generación Z y las más jóvenes, es probable que su marco de referencia sea... cuando Taylor Swift voló a Las Vegas para el Supertazón.

¿Con quién se sentó?

Durante la temporada regular, Swift asistió a varios partidos en Kansas City donde se sentó en una suite de lujo bajo el control de Patrick Mahomes, amigo cercano y compañero de equipo desde hace mucho tiempo de Kelce. Al parecer, en poco tiempo se hizo amiga de la esposa de Mahomes, Brittany, y se le vio con regularidad con otros miembros de la familia Mahomes.

En algunos partidos, también estuvo con los padres de Kelce, Donna y Ed, así como sus propios padre, madre y hermano fueron con ella a un partido en Navidad. Durante el viaje de Swift a Nueva Jersey para asistir a un partido entre los Jefes y los Jets de Nueva York, estuvo sentada con amigos como los actores Ryan Reynolds y Blake Lively.

En un partido de la fase eliminatoria en Búfalo el mes pasado, ella y Kylie Kelce fueron algunas de las personas que aparecieron reaccionando mientras Jason Kelce bramaba sin camiseta y fraternizaba con el público.

Y en el partido de campeonato de la Conferencia Americana (AFC, por su sigla en inglés) en Baltimore, estuvo rodeada de familiares y colaboradores de Travis Kelce, entre ellos Donna y Ed Kelce, Jason y Kylie Kelce, así como los representantes de Kelce, Aaron y André Eanes. También había algunos amigos de Swift, como la actriz Keleigh Teller y la modelo Cara Delevingne.

Para el Supertazón, el elenco fue similar, con los Kelce, los hermanos Eanes y Lively con Swift y su familia. Además de la típica pandilla, en términos de la gente que con la que Swift apareció durante el partido, estuvo la rapera Ice Spice —quien entró al estadio con Swift— y la cantante Lana Del Rey.

¿Por qué llamó tanto la atención?

A nadie pareció importarle que Jack Nicholson fuera un elemento habitual en los partidos de los Lakers de Los Ángeles ni que Spike Lee estuviera más asociado a los Knicks de New York que la mayoría de los jugadores del equipo. Drake tan solo recibió una reprimenda menor cuando empezó a entrar a la cancha durante los tiempos fuera en los partidos de la fase eliminatoria de los Raptors de Toronto. Sin embargo, aunque Swift recibe relativamente poco tiempo al aire durante las transmisiones de los partidos de Kansas City, se ha vuelto el blanco de quienes siguen pensando que está recibiendo demasiada atención.

“La atención está ahí porque el público quiere verlo”, comentó Jason Kelce en una entrevista durante las festividades del Tazón de los Profesionales de la semana pasada. “Si la gente no quisiera verlo, no lo estarían mostrando”.

En palabras de Swift, tal vez haya “algunos papás e hijos amantes del futbol americano” enojados, pero las cadenas de televisión están encantadas. Un análisis de los índices de audiencia que realizó The New York Times indicó que Swift perfectamente puede ser un factor determinante en el aumento de la audiencia de la liga. El entrenador de los Jefes, Andy Reid, ha comentado en repetidas ocasiones que está contento de tenerla cerca y la NFL, la cual está disfrutando de una expansión inesperada de su audiencia inherente, ha recibido con los brazos abiertos que la asocien con la liga.

“Hay fanáticos de la NFL de todo tipo… incluso sensaciones mundiales”, mencionó Alex Riethmiller, vocero de la NFL. “Estamos encantados de tener a Taylor a bordo”.

Hablamos de Taylor. Seguro hubo algo de numerología, ¿no?

Swift ha comentado que le encanta el número 13 y sus seguidores parecen encontrarlo en todas partes. En el caso del Supertazón de este año, abundan los ejemplos:

— Supertazón 58 (5+8=13)

— 11 de febrero, 11/2 (11+2=13)

— Kansas City jugó contra los 49ers (4+9=13)

— Los 49ers fueron el equipo número uno de la Conferencia Nacional (NFC, por su sigla en inglés), mientras que los Jefes fueron el número tres de la AFC (1 y 3 - 13)

Al inicio del día, no estaba claro si era una buena o mala señal que el mariscal de campo titular de San Francisco, Brock Purdy, llevara el número 13. Sin embargo, al final, eso no importó, pues el décimo tercer partido de Swift en la NFL terminó con una victoria de los Jefes.

c.2024 The New York Times Company