Victoria de Suecia, protagonista involuntaria de un suceso policial: un intruso intenta colarse en su casa

La Casa Real sueca es noticia un día sí y otro también. Hace unos días conocíamos que los príncipes Carlos Felipe y Sofia habían dado positivo en COVID-19 y este viernes hemos sabido que, además, están esperando su tercer hijo para la próxima primavera. El resto de la Familia Real, por el momento, está libre del coronavirus, pero no exenta de protagonizar otros titulares como el que nos sorprendía hace apenas unas horas y que ha tenido a la heredera Victoria de Suecia en el epicentro de la información.

Los Reyes de Suecia, la princesa Victoria y su marido Daniel dan negativo

VER GALERÍA

Castillo de Haga
Castillo de Haga

Según ha informado Margreta Thorgren, jefa de prensa de la institución monárquica, un intruso intentó el jueves colarse en el castillo de Haga, residencia oficial de Victoria de Suecia y su familia, eso sí, sin éxito. El incidente provocó que se activara rápidamente el pertinente protocolo y se avisara al servicio de seguridad e, incluso, a la policía. Finalmente, el intento de allanamiento no fructificó, aunque no ha trascendido por el momento si alguno de los miembros de la Casa Real se encontraba en ese instante en el interior de la vivienda.

El suceso fue tal que se desplegó un amplio dispositivo policial y de seguridad en la zona: policía municipal de Estocolmo, guardaespaldas y departamento de seguridad de la Policía Nacional (Säpo) se desplazaron hasta Haga para comprobar que los 1.550 metros cuadrados construidos se encontraban en perfecto estado. Así era y hasta el momento no se ha producido ninguna detención en relación con el incidente ocurrido en la que es la residencia de Victoria de Suecia desde hace diez años.

Entramos en la casa de Victoria y Daniel de Suecia: así es por dentro

VER GALERÍA

Victoria de Suecia
Victoria de Suecia

El castillo, construido a principios del siglo XIX al más puro estilo de una villa italiana, está conectado a un parque abierto al público. Posee 25 habitaciones para uso privado, ubicadas en los pisos superiores. La planta baja está destinada a presentaciones y audiencias públicas. Desde 1966 hasta 2009 se utilizó para acoger a los mandatarios extranjeros durante las visitas de Estado.

No es la primera vez que algún miembro de la Familia Real sueca sufre un susto de este tipo, aunque en esta ocasión no ha habido allanamiento ni robo. Hace unos meses Magdalena de Suecia y su marido, Chris O'Neill fueron víctimas de un asalto en su domicilio de Miami, y por este motivo decidieron mudarse a otra vivienda. En 2018, los Bernadotte vieron con impotencia cómo dos personas se llevaban varias joyas pertenecientes a la Corona y que se encontraban en la catedral de Strängnäs. Los cacos se marcharon navegando y no fue hasta febrero de 2019 cuando se recuperó el botín.