Yahoo Estilo “En ‘¡Que viva México!’ hablo de la polarización e intolerancia en el país”: platicamos con Luis Estrada sobre su nueva peli
La sátira política mexicana no sería lo mismo sin los proyectos de Luis Estrada, director conocido por películas como La ley de Herodes, Un mundo maravilloso, El infierno y La dictadura perfecta.
Pero ahora, el cineasta de 61 años regresa con su proyecto más ambicioso hasta la fecha: ¡Que viva México!, un filme que, a través de la dinámica de la familia mexicana, busca reflejar la dura realidad que se vive en nuestro país desde hace muchos años.
Desde la corrupción, pobreza, abuso de poder y desigualdad, ¡Que viva México! nos relata a lo largo de 3 horas y 11 minutos, una historia con humor negro que, después de unas buenas risas, nos hace reflexionar sobre la situación en México.
¡Qué viva México!, que sale en cines el próximo 23 de marzo, cuenta la historia de Pancho, quien tras la muerte de su abuelo minero, viaja con su esposa e hijos a su pueblo natal, donde se reencontrará con su familia luego de mucho tiempo y entrará en una disputa por la esperada herencia.
Checa aquí el tráiler:
Además de la dirección de Estrada, la película cuenta con un elenco plagado de estrellas, incluyendo a Alfonso Herrera, Ana de la Reguera, Ana Martín y, por supuesto, Damián Alcázar y Joaquín Cosío -quienes interpretan varios papeles a la vez-.
En Animal MX tuvimos la oportunidad de hablar con Luis Estrada y gran parte del elenco, quienes nos contaron más sobre la importancia de este proyecto, el mensaje que deja y lo que nos muestra sobre México.
Una crítica ácida a la actualidad mexicana
“Es una película que va a trascender en el ámbito del entretenimiento y cultura, porque habla de temas muy cercanos al momento que vivimos. Habla de la polarización e intolerancia que se da en el país y que se ha vivido así por siglos, el problema es que ahora se ha agudizado y esa liga se está estirando y mi percepción es que si se estira de más puede romperse y las consecuencias podrían ser muy serias”, relata Estrada.
Para Alfonso Herrera y Damián Alcázar, la película muestra de forma ácida la realidad que se vive en el país.
“Luis plantea con esa película una polarización tremenda de los que creen que estamos en una guerra, de quienes no lo creen, de los piensan que están los de arriba contra los de abajo. Entonces plantea una radiografía muy ácida del momento actual, del contexto en el que nos encontramos, a través de una familia en la que cada miembro representa a sectores importantes de la sociedad mexicana”, explica Herrera, encargado de darle vida a Panchito en la película.
Alcázar, quien interpreta tres papeles diferentes, añade que actualmente, en México hay “un remolino” y considera que Luis Estrada, a través de esta película, refleja lo que todas las personas mexicanas vivimos.
“Ahí estamos todos, absolutamente todos. Estaos en un remolino que finalmente yo creo que va a ir hacia la calma. Tenemos que hacer cambios porque ya era urgente y necesario, porque si no nos quedamos sin país y ahí está en esta metáfora epopéyica con la crítica ácida que hace Luis en sus películas”, señala Alcázar.
Ana de la Reguera agrega que gracias a la ficción, también es posible decir cosas que en otros escenarios no sería posible.
“Ahora más que nunca, tomando en cuenta la cancelación y la polarización que vivimos, solamente con la ficción podemos decir cosas tremendas, espantosas y todo eso que queremos decir, y es lo que hacemos en esta película”, menciona De la Reguera, que interpreta a Mari.
Un trabajo creado para verse en el cine
Para Estrada, ¡Que viva México! es una película que, como dice el cliché, “se ve mejor en el cine”, y luchó para que llegara a las salas cinematográficas de México.
El filme iba a salir originalmente en Netflix, pero tras una disputa entre Estrada y la plataforma de streaming, la película pasó a manos de Sony Pictures y así el director consiguió su objetivo de que llegara a cines.
“El poder hacer lo que te gusta es un privilegio que a veces damos por sentado y yo no lo hago. Cada película me ha costado mucho trabajo, cada una de ellas ha sido un reto porque cada una es más ambiciosa que la otra y esta es la más ambiciosa. El tamaño de la ambición es igual al tamaño a la satisfacción, con el plus adicional que es haber hecho lo posible para que llegara a las salas cinematográficas. Es un cliché, pero el cine se ve mejor en el cine y ahí van a poder ver por primera vez ¡Que viva México! Yo creo en el proceso, porque en mucho tiempo pensé que no lo iba a conseguir, entonces el 23 de marzo será un logro personal y un logro para el equipo”, menciona el director.
Además, considera que la película no tiene mensajes porque, según él, “cada espectador ve una película diferente dependiendo de su visión del mundo, formación profesional, de su cultra o capacidad de análisis”.
Lo que sí cree, es que la película trascenderá en el ámbito del entretenimiento y cultural por el momento actual que vivimos, y quienes la vean pasarán un muy buen rato.
Alcázar, sin embargo, resalta que el streaming también ayuda, especialmente a aquellas personas que no tienen la oportunidad de ver las películas en el cine.
“Ellos (las plataformas de streaming) van a ser capaces de explotar la película y al mismo tiempo mostrarla al mundo, no nada más lo van a ver los mexicanos, la van a ver en todos lados, la va a ver quien quiera ver cine mexicano. Ojalá que tengan tino (las plataformas) y le den a las buenas películas”, menciona Alcázar.
Una experiencia divertida
Como mencionamos arriba, tanto Alcázar como Cosío interpretan tres personajes diferentes, lo que se volvió en un reto divertido para el equipo y elenco.
“Para mí era estar haciendo acrobacia, pero me encanta y me divertía muchísimo pasar de un personaje a otro. Lo difícil eran los cambios de caracterización porque eran 2 horas para caracterizar a cada personaje. Era un esfuerzo tremendo para todos, del equipo de maquillaje y caracterización, y mis compañeros esperando que el otro personaje estuviera listo, pero yo estaba divertidísimo”, revela Alcázar, quien le da vida a Rosendo, Regino y Ambrosio.
Herrera menciona que fue un placer ver a los dos actores interpretando varios personajes al mismo tiempo y se queda con un momento favorito en particular.
“Hay una escena en particular, que era de las primeras que filmamos, en la que interactúan todos, entonces era fascinante ver el trabajo de Damián interpretando a uno, luego cortando y luego yéndonos a otro ángulo para cubrir esa parte. Más o menos armando el rompecabezas de ver cómo quedaría en edición, entonces era un disrute, es un disfrute estar en un set de Luis y es un disfrute estar con compañeros que admiras y ver el trabajo, estar ahí es fascinante”, cuenta Herrera.
Ana de la Reguera admite que el poder trabajar con Luis Estrada fue un sueño hecho realidad y se sintió encantada luego de conocer a su personaje.
“Cuando yo leí a mi personaje dije ‘me encanta’ porque yo crecí en una familia de clase media alta, que quería pretender, que quería vivir en una casa bonita, por este sueño de querer un estatus mejor y tener una mejor vida”, menciona la actriz de 45 años.
Por último, la De la Reguera señala que otro de los aspectos divertidos es que la película tiene muchas capas y esto hará que la gente la reciba de formas diferentes.
“Sus películas tienen muchas capas, como dice, cada espectador la verá de manera diferente. Te puedes quedar en la capa 1 y te divierte, pero ves la segunda capa y dices ‘esto está muy cabrón’, y en la tercera capa dices ‘esto es el centro del país’, o sea puedes ir viendo la película de muchas maneras y eso es lo interesante de ¡Que viva México!, la gente la va a recibir de muchas maneras”, cuenta la actriz.
