Los zapatos que llevaba tu madre hace 20 años y que vas a querer ahora

Para entender las tendencias de este otoño tenemos que, como siempre, volver nuestra mirada atrás. Pero también hay que hacer un ejercicio de comunión de elementos que son muy distintos entre sí para que las ideas se muestren medianamente organizadas. Sino, es imposible descifrar que tiene que ver un top blanco de tirantes tan básico como el que lucíamos en los 90 con las piezas de estilo dominatrix que prometen estar a la orden del día durante los próximos meses, el regreso de las hombreras en clave maxi, el boom de la estética colegial o la omnipresencia del color rosa. Porque en efecto nada hay en común entre todos estos elementos. Sin embargo, están llamados a triunfar esta temporada.

Si nos adentramos en el terreno del calzado la cosa de complica aún más porque confluyen aún más caminos: botas cowboy, mocasines, botas mosqueteras arrugadas y zapatos en clave retro. Estos últimos son los que nos han llamado la atención especialmente dado que son los típicos de los que seguro renegaste hace años.

Look del desfile de Tory Burch con zapatos acabados en punta (Photo by ANGELA WEISS / AFP) (Photo by ANGELA WEISS/AFP via Getty Images)
Look del desfile de Tory Burch con zapatos acabados en punta (Photo by ANGELA WEISS / AFP) (Photo by ANGELA WEISS/AFP via Getty Images)

Acabados en punta y con un tacón que se ha bautizado como "sensato" precisamente porque no se olvida de que el calzado también debe ser cómodo, es ese zapato que nuestras abuelas y madres llevaron sin parar hace años en multitud de versiones. Elegante, discreto y de lo más versátil -te sirve para ir de boda con un vestido y para el día a día con un vaquero te eleva al instante un estilismo– lo tiene todo a su favor para entrar en nuestro armario. Quien nos iba a decir que lo que conseguiría que nos quitáramos las zapatillas serían modelos de estética vintage como estos, ¿verdad?

Llevábamos ya demasiado tiempo recurriendo a las deportivas para todo y, aunque no se nos pide que renunciemos a ellas directamente, sí que las diferentes firmas están incitando a través de sus propuestas a que poco a poco recuperemos los looks algo más formales para determinadas ocasiones. Y en eso este calzado es clave porque, como decíamos, no se le puede poner un solo pero. Tanto es así que en las tiendas se ha versionado de mil y una formas. En Zara, por ejemplo, los hay de decenas de colores, con detalles de pedrería, en tweed, de piel, metalizados, con apliques... esa misma tónica es la que encontramos en Mango, donde están en tonos intensos como rojo y azul que son realmente apetecibles.

Si nos vamos a marcas específicas de calzado la oferta se multiplica aún más y hay otros sellos como Bimani que directamente lo han convertido en uno de los emblemas de sus novedades de la temporada al lanzarlo interpretado en una paleta de colores ideal para los meses de frío que lleva el inconfundible aire retro que tanto nos gusta.

Parece una revelación contra los atrevidos códigos que mandaban hasta ahora y que situaban a las altísimas plataformas y las puntas redondeadas como estrellas y en cierto modo lo es, porque ahora la altura se baja considerablemente al situar el tacón en poco más de 4 centímetros como máximo y el acabado es siempre de lo más afilado.

Esto demuestra que estos kitten heels que adoraban las mujeres en la década de los 60 –años que resultan clave entre las tendencias este otoño-invierno– tienen aún mucho más recorrido de esperado. ¡Larga vida a este tacón vintage que también puede ser actual!

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