¿El hombre cobra más?

Hace algún tiempo, la versión inglesa de una importante revista femenina de tirada mundial tomó la decisión de encuadrar al “feminismo” como un producto que necesita una actualización, con el objetivo de mejorar su imagen y reposicionarse. Con este propósito en la mira, convocó a tres prestigiosas agencias de publicidad para que asesoraran respecto del camino que debería tomar una comunicación efectiva.

Hace bastante tiempo que el rol de la mujer viene cambiando, poniendo la proa hacia nuevos rumbos. Cada vez más hombres se incorporan activamente a tareas como el cambio de pañales — y no como excepción—, impensadas hace no mucho tiempo. No es algo infrecuente que el “hombre de la casa” se encargue de pasar la aspiradora en la casa a fin de repartir equitativamente las tareas de limpieza. Todo ello, sin sentir el más mínimo menoscabo por realizarlas con habitualidad. Tampoco rehuirle al planchado de camisas, o alternarse como cocineros dependiendo de quién llegue más cansado.

Pero en el área laboral no todo resultaría tan equitativo. Según informaciones actuales, las compañías de Gran Bretaña se verán obligadas a revelar su brecha salarial de género. Las nuevas reglas aplicarán a todas las compañías que tengan más de 250 empleados. Eso ayudará a que el gobierno identifique a las compañías con la menor cantidad de mujeres en su liderazgo. (Fuente: CNNMoney)

Quizás se vean revitalizados antiguos conceptos como el de Christine de Pizan, autora en el siglo XV de “Ciudad de Damas”, ni los preceptos vertidos por Betty Friedan en “La mística femenina” durante la década del 60, ni del más moderno post-estructuralismo que ha tomado conciencia de que no existe un único modelo de mujer, por el contrario, da expansión a múltiples modelos de mujer.

Se pone de relieve la desigualdad con la nueva reglamentación británica, que impone a alrededor de 8.000 empresas la publicación de su brecha promedio de género y de bonos. Asimismo, deberán informar el número de hombres y mujeres que se encuentran en cada rango de sueldos.

La mujer actual comprende perfectamente que el espacio se gana con dedicación, entusiasmo, profesionalismo, astucia, talento y por supuesto algo de “sex appeal”, por qué no admitirlo. Por medio de los datos que el gobierno británico ha decidido recabar, se intenta planifica y crear tablas de clasificación sobre la brecha salarial de género, para que cualquier persona pueda revisar el estado de las compañías en cada sector, y poder identificar a aquellas con la menor cantidad de mujeres en su liderazgo.

Hasta el momento no eran totalmente desconocidos los datos que aseguraban que por cada dólar que un hombre gana en los Estados Unidos, una mujer recibe 77 céntimos, y el “Feminist Times” en su momento ha informado que las mujeres británicas ganan un 15% menos que sus pares masculinos.

Los economistas dan varias razones para explicar esta diferencia. En EE.UU., según el Departamento de Empleo, los hombres tienen aproximadamente el doble de posibilidades de trabajar más de 40 horas a la semana. No obstante, una mujer que trabaja 40 horas semanales gana el 88% del salario de hombre que también trabaja 40 horas. Es decir, la brecha salarial se traduce en un 12%.

Aunque la grieta se ha estado cerrando durante décadas, el progreso se ha detenido en los últimos años. Ahora tendrán que pasar 118 años para que la brecha económica entre hombres y mujeres se cierre, divulgó el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) en su más reciente referencia “Global Gender Gap”, según la información periodística de CNNMoney.

Seguramente que las tareas pendientes, tendientes a revertir la situación de disparidad podrán llevarse a cabo de un modo más eficiente. Muchas voces se han alzado y han calificado de “inadmisibles” los datos arrojados por los estudios e informes, y han aseverado que la sociedad no puede aceptar la situación de brecha salarial por género.