Después del éxito de Gran Hermano, la TV y el streaming preparan realities para todos
Mientras los actores siguen reclamando por más ficción nacional, los realities acaparan cada vez más horas de contenido en las plataformas y en la televisión abierta. No es un fenómeno local sino que la tendencia es global. ¿Por qué sucede? ¿Cuál es el atractivo de estos formatos? ¿Cómo se explica el resurgimiento de los realities? ¿Hay poca producción de series y cine o solo se fueron de la TV abierta? Que los realities ganan terreno no parece ser una novedad, pero sí que esa tendencia se aceleró en los últimos meses. Una señal fueron los anuncios de reconocidos actores –que bien podrían estar encabezando una ficción en el prime time– ahora en roles de conductores de distintos estrenos.
Prime Video anunció el lanzamiento de La isla de las tentaciones, con Benjamín Vicuña y Florencia Peña. Un formato con muchas temporadas en distintos países en el que cinco parejas, en un momento crítico de su relación, ponen a prueba su amor conviviendo con diez solteros y solteras. Y durante tres semanas viven separados con constantes tentaciones. Se grabó en México, hay argentinos y chilenos y saldrá para los dos países a fines de 2024, o comienzos de 2025.
Por otro lado, llega Love is Blind, un exitoso formato que se hizo en Estados Unidos, Japón, Brasil, México, Suecia, Alemania y el Reino Unido. La versión argentina tiene a Wanda Nara y a Darío Barassi como conductores, con producción de Netflix. En tiempos donde cada vez menos gente se casa, el objetivo de este programa es formar parejas que terminen en el altar. Primero tienen citas en cápsulas sin verse, luego se proponen casamiento y comprometen, se conocen y, si ambos aceptan, se casan. La primera parte se grabó en México. Utilizaron el mismo set que se construyó para la edición de ese país. Las convivencias y las bodas se rodaron en la Argentina. Planean el estreno para el último trimestre de este año.
Un productor que trabajó en el proyecto pero que debe mantener la confidencialidad, asegura que quedaron muy conformes con el resultado. “Nos costó mucho el casting, había pasado lo mismo con la edición de México: conseguir hombres dispuestos a casarse y que vengan por eso y no para hacerse famosos, fue complicado”, detalló. Consultado por las expectativas con el producto, asegura que en los países latinoamericanos tienen “muy buena recepción los dating shows que se centran en la parte humana, el amor y las relaciones”. Además destaca que el formato viene con excelentes antecedentes. Incluso, el último estreno fue en Suecia, un mercado no tradicional para este tipo de programas.
Las experiencias de dating o citas son tendencia mundial: el público busca identificarse con protagonistas auténticos y reales, que hacen un casting porque no quieren conocerse por Tinder sino que quieren casarse. En México estuvo Enamorándonos, en Estados Unidos, el mencionado Love is Blind y Temptation Island, que fueron muy exitosos y tuvieron muchas temporadas. También Married at First Sight, una propuesta similar con mucho éxito en Australia, en Inglaterra y en los Estados Unidos.
La plataforma de la N roja ya tiene en su catálogo varias temporadas y de distintos países de Love is Blind, y también cuenta con otros formatos similares en la plataforma como Confianza: el juego de la codicia; El ultimátum y Cielo para dos. Además sumaron varias ediciones de formatos de cocina como Escuadrón pastelero, Academia de Chocolate, Batalla de Barbacoas y Chef 5 estrellas.
Por otro lado, Paramount está listo para estrenar Survivor. Se trata de un programa de supervivencia que fue grabado en Colombia durante 2023 con la conducción de Marley. El formato de origen sueco ya se vio en la pantalla chica con Julián Weich en 2000 y 2001. Si bien se sabe que esta edición es más extensa porque contará con 25 participantes en vez de los 16 de aquel Expedición Robinson, el espíritu es el mismo: sobrevivir en una isla por un premio millonario.
“Tenemos muchas expectativas con Survivor –adelanta Darío Turovelzky, vicepresidente ejecutivo de Broadcast & Estudios de América latina para Paramount Global, dueño de Telefe–. Estamos muy contentos con el resultado que hemos logrado. Survivor es un proyecto que llevamos más de diez años queriendo realizar y que, por sus costos y su envergadura, nunca habíamos podido concretar hasta ahora. Después de mucho trabajo y de encontrar la manera de llevarlo a cabo sin perder calidad, logramos hacerlo realidad. Las expectativas son muy altas porque vamos a traer de nuevo a la TV un formato que está en el inconsciente de la gente, pero que ahora se presenta con una apuesta mayor en términos de calidad visual. Realmente es un contenido extraordinario. Cada episodio es increíble y no tiene nada que envidiar a las ediciones hechas en otros países. Tiene calidad cinematográfica, la narrativa del storytelling es atrapante, el casting es maravilloso, los paisajes son espectaculares, y Marley está fenomenal”.
El formato tuvo 46 temporadas en los Estados Unidos y en las primeras ediciones alcanzó ratings similares al Superbowl. La versión argentina 2024 estará más centrada en la supervivencia que en la estrategia. Y a diferencia del norteamericano, que se emitía una vez por semana, el de nuestro país tendrá una edición diaria como el de Australia. En este reality de competencia, como fue también en The Challenge, el público no tiene voz ni voto. Además de la plataforma, Survivor saldrá al aire por Telefe, que planea terminar Gran Hermano en julio.
En materia de números, los realities no son producciones económicas. Los realities mencionados tienen un presupuesto, dependiendo de la cantidad de capítulos –los envíos suelen tener entre cuatro y ocho–, de entre 90.000 a 156.000 dólares el episodio. También aparecen megaproducciones que invierten entre 5 y 8 millones de dólares por temporada. México y los Estados Unidos son los mercados más fuertes y más caros. El presupuesto se reduce un poco en locaciones como Colombia o República Dominicana, y más aún en la Argentina.
Otro contenido que está listo y con dos temporadas en carpeta es LOL: El que ríe último. Una con la conducción de Marcelo Tinelli y otra con la de Susana Giménez. Ya vimos una con la diva de los teléfonos y Grego Rosello. Son comediantes encerrados en una casa intentando no reírse. Una producción que se graba en dos días y que tiene como gasto principal los hosts, en este caso dos primeras figuras argentinas, y el casting. Como se graba de corrido en 48 horas, se reducen los gastos. Lo produce Prime Video y el costo ronda los 4 millones de dólares.
Con esa misma plataforma el conductor del Bailando grabó Los Tinelli. Un docufollow o docurreality donde se sigue a la figura y su entorno. Funcionó muy bien con Los Montaner, que está por estrenar segunda temporada en Disney+, y con los mexicanos Derbez y su De viaje con los Derbez, que acumula 3 temporadas en VIX. Wanda Nara está preparando el suyo.
Hay otro reality que está funcionando en España que combina celebridades con retos, sale los viernes a la noche por Antena 3 y tanto Susana Giménez como Marcelo Tinelli averiguaron opciones para adquirir el formato. Se trata de El desafío, un reality show de estudio en el que ocho famosos compiten mostrando sus destrezas, que pueden ir desde aguantar cuatro minutos bajo el agua hasta caminar por una cuerda con fuego; desde un increíble número de pole dancing hasta una coreografía con un “balancín mortal” manteniendo el equilibrio en el aire.
Adrian Santucho, experimentado productor que llevó adelante realities en la Argentina, México y Estados Unidos asegura que hoy los formatos “están más marcados por la presencia de famosos que por la necesidad de descubrir nuevos talentos. Hoy se revalida al famoso”. Al consultarle por el éxito de viejos realities como Gran Hermano asegura que hay un “resurgimiento de los realities como los conocimos y como los volvimos a conocer y eso tiene que ver con que las plataformas están descubriendo ahora cómo su audiencia consume contenido de no ficción”. “El reality tuvo un renacer porque los viejos consumidores lo buscan por añoranza”, explica el argentino, radicado en Miami hace 17 años.
El resurgimiento y el interés por los realities parece ser cíclico. Estuvieron más de una década en la pantalla chica hasta que se agotaron. Y ahora, 20 años después de aquellos debuts, hay audiencias nuevas que no habían nacido cuando los formatos actuales irrumpieron en la televisión, que se sienten atraídas por este tipo de contenido y que además consumen a través de diferentes plataformas. Sucedió con Gran Hermano, que regresó al canal de las pelotas en 2022 con la edición número 11, con récord de audiencia y mucha repercusión en el streaming del canal y redes sociales. Esta edición que está por terminar, se convirtió en una de las más extensas con 7 meses de encierro.
“Justamente esta edición de Gran Hermano acaba de ser distinguida con el Big Brother Award a la Mejor Temporada Extensa del Formato en el Mundo –explica Turovelzky–. Este galardón destaca a las mejores producciones del popular reality show alrededor del mundo. Realmente ha sido un gran desafío planificar esta temporada, y siempre es un gran aprendizaje. Cuando un proyecto tiene un gran performance, uno no quisiera que se terminara nunca, pero la verdad es que fue planificado con esta duración. Nos sorprendió que tuvo mayor repercusión que incluso la edición anterior, logrando nuevos récords de audiencia”.
Este escenario en el que los realities ganan terreno parece potenciado por las quejas de los actores por la falta de ficción en la pantalla chica. Sin embargo, más del 70 por ciento de los catálogos de las plataformas en Argentina está dominado por series y películas. El mismísimo Adrián Suar, que cerró Polka, participa de la producción de ficciones argentinas en conjunto con Kapow, como el caso de Los protectores y Envidiosa, la ficción de Netflix que tiene a Griselda Siciliani como protagonista.
Mientras antes las novelas se consumían en vivo por canales de aire, hoy hay una amplia oferta pero por fuera de los canales de TV tradicionales. Un relevamiento de PlumResearch determinó que los espectadores de la Argentina, Brasil, Colombia y México pasaron 39.000 millones de horas viendo contenido de Netflix en 2023.
Además examinaron la distribución de producciones originales de Netflix y allí se revelaron distintos patrones de consumo: los Estados Unidos emerge como el principal consumidor de contenido original de la plataforma, reclamando un sustancial 45% del consumo de contenido latino. Brasil le sigue de cerca, dedicando el 42% de su tiempo de consumo de contenido LATAM a las producciones originales de Netflix. México y la audiencia hispana de EE. UU. poseen un consumo significativo, con tasas que oscilan entre el 30% y el 35%. Argentina y Colombia, aunque ligeramente rezagados, aún representan un 25%.
2023 fue un año prolífico para las series argentinas: El reino, El amor después del amor, Nada, División Palermo, El encargado, Barrabrava, Chueco, Iosi: el espía arrepentido, Porno y helado. También hubo varias películas con estreno en cine y ventana con estreno en plataformas: desde las mundialistas Muchachos y Elijo Creer; Blondi, de Dolores Fonzi; la premiada Puan, La extorsión con Guillermo Francella, Casi muerta con Natalia Oreiro y La uruguaya, del libro de Pedro Mairal, entre otras.
“Las audiencias siempre buscan experiencias atractivas e innovadoras, sin importar el género –dice Turovelzky–. En general, no solo aquí, sino en el mundo, hay momentos en los que ciertas tendencias se fortalecen como favoritas. A veces son los realities, pero también hemos visto el predominio de los game shows, de los programas de entretenimiento, y en otros momentos de las ficciones cortas. En los últimos años, el entretenimiento y los realities han logrado atraer a las audiencias y, en consecuencia, también han generado ingresos comerciales y nuevas oportunidades de negocio. Pero la ficción sigue siendo un gran activo para la TV abierta en general en todo el mundo. En nuestro caso, no solo está asociada a adquisiciones de otros países, sino que también tenemos producciones locales. Estamos en preproducción de una nueva ficción en conjunto con Underground y Telemundo, una gran comedia para la familia. Nos hemos reunido nuevamente con Sebastián Ortega y Pablo Cullel para unir fuerzas, como lo hemos hecho anteriormente con historias icónicas como Graduados, 100 días para enamorarse y Educando a Nina.”
Sin embargo, sí es cierto que el nivel de producciones cayó en relación con años anteriores. La firma británica de investigación y datos Ampere Analysis determinó que lo largo de 2023, las siete principales plataformas de streaming encargaron en conjunto 196 producciones en Latinoamérica. La cifra significa un descenso del 37,6% respecto de 2022, cuando la región alcanzó el pico histórico de 314 encargos para streaming, y es incluso un 13,7% menor que la de 2021, cuando dieron luz verde a 227 títulos. Puntualizando en Netflix, su producción en América Latina se redujo a la mitad de 2022 a 2023, de 83 a 42 títulos, cifra que también representó una fuerte caída respecto de los 73 de 2021. Sin embargo, se mantuvo como el streamer que más contenidos latinoamericanos encarga cada año.
A modo de cierre e ilustrando el panorama, Telemundo logró quedarse con el prime time. Por primera vez tienen el primer puesto en audiencia en ese horario, por sobre Univision. No fue con ninguna de sus telenovelas, sino con La casa de los famosos que terminó su temporada y hoy con Top Chef VIP, la versión americana hispanohablante de MasterChef Celebrity. Un reality que siempre fue semanal, y que hoy se convirtió en diario. El rating manda.