Los 50 suavizan a Liam Gallagher

Londres, 20 sep (EFE).- Han tenido que pasar más de dos décadas para que Liam Gallagher (pilar de Oasis junto a su hermano Noel) se sacudiera la etiqueta de "chico malo" del britpop. Ajeno a las polémicas del pasado, el músico celebra sus 50 años, que cumple este miércoles, con un viaje familiar a la apacible isla caribeña de Mustique.

El exvocalista de la icónica formación de Manchester -referente del siglo XX y disuelta en 2009 por irreconciliables rencillas con Noel- festejará su cumpleaños con unas idílicas vacaciones rodeado de amigos, su prometida, Debbie Gwyther, y sus hijos Molly, Gene y Lennon, según aseguran los medios británicos.

Gallagher, que el pasado 27 de mayo sacaba "C'mon You Know", su mejor trabajo en solitario para la crítica, se ha gastado la friolera de 30.000 libras (unos 34.258 euros) en alquilar una lujosa mansión con playa propia en la exclusiva Mustique para marcar su medio siglo de vida.

Los tabloides no esconden su estupefacción ante el tipo de celebración "tranquila" y llena de lujo escogida por quien fuera un notorio "enfant terrible" en los 90 y el artista díscolo del panorama nacional patrio, así como fuente inagotable de titulares provocadores a cuenta de borracheras, peleas y salidas de tono.

En una reciente entrevista con el dominical "Sunday Times", se observaba cómo a pesar de que el músico aún intercala una expresión malsonante cada seis palabras, su temperamento parece haberse templado con la edad.

"Me he hecho más humilde, he perdido varias cosas (a lo largo de los años), se me han roto matrimonios -dos, con la actriz Patsy Kensit y con la cantante Nicole Appleton- y cosas así. Te tienes que mirar en el espejo y recordar esto. Hay episodios de los que no estoy orgulloso, la he liado y he hecho estupideces", admitía.

Cuando la relación siempre al límite entre los Gallaguer saltó por los aires -justo antes de la actuación de Oasis en un festival cerca de París en 2009-, descomponiendo la banda y dejando desnortada a una legión de incondicionales, Liam atravesó una de las etapas más oscuras de su vida.

El músico llegó a reconocer que la desintegración del grupo le descolocó, pues siempre se había imaginado envejeciendo con Oasis, "un poco como los (Rolling) Stones".

Gallagher trató de recomponer su carrera creando, con el resto de integrantes de Oasis, el grupo Beady Eye, un proyecto que jamás cuajó entre los fans, sumiendo al artista en un abismo creativo.

UN REGRESO EXITOSO

Años después, en solitario, Liam volvería a reconectar con su parte artística, con los lanzamientos de "As You Were" (2017), "Why Me? Why Not? (2019) y con el más reciente "C'mon You Know" (2022), logrando la aprobación del público y el aplauso de la crítica.

En el último trabajo, claramente más experimental que los anteriores, vuelve a colaborar con los productores y compositores Andrew Wyatt y Greg Kurstin y coescribe el tema "Everything's Electric" -que interpretó en la última ceremonia de los premios Brit- con Kurstin y Dave Grohl.

Sus seguidores en Twitter también han comenzado a apreciar en los últimos meses un tono más amable cuando cuelga mensajes (a veces dardos) dirigidos a su hermano Noel. Hoy incluso él mismo reconoce que le "quiere", aunque sean caracteres destinados a no entenderse jamás.

"La verdad es que le quiero. Nos separamos hace 13 años, es ridículo. Podemos estar horas debatiendo sobre quién tuvo la culpa (...) Si él realmente quisiera ponerse en contacto -reflexiona Liam-, por el bien de mi madre -Peggy, de 75 años, con quien habla a diario telefónicamente-, podría hacerlo pero, obviamente, no quiere".

La relación entre los Gallagher ha estado históricamente salpicada de tensión, pullas mediáticas, peleas épicas y descalificaciones mutuas. Poco antes del final de Oasis, Noel calificaba públicamente a su hermano pequeño de "grosero, arrogante, intimidatorio y vago" y le afeaba ser "el tipo más cabreado" del mundo.

Lo que no parece haber cambiado es el perenne runrún acerca una hipotética reunión de Oasis, al acercarse el 30 aniversario de "Definitely Maybe" en 2024 y, un año después, el de "(What's the Story) Morning Glory?", dos trabajos elevados a la categoría de culto en el pop británico que, como era previsible, han disparado los rumores.

Patricia Rodríguez

(c) Agencia EFE