Fue a Los 8 escalones, contó su historia de amor y desconcertó a Guido Kazcka: “¿Por la pastina?”

Los 8 escalones de los 3 millones (eltrece) se convirtió en uno de los programas favoritos del público, puesto que, además de ser una forma de entretenimiento, también se puede jugar desde el hogar. De lunes a viernes, varias personas se suman al ciclo para ganar los millones y, si es posible, también la llave para jugar en la final por el departamento a estrenar. En una de las últimas ediciones, se hizo presente un hombre que contó su historia de amor y llamó la atención de Guido Kaczka.

Resulta que, cuando el conductor estaba presentando a los jugadores, quiso saber más sobre Ramón, de 41 años de edad, quien estaba por contestar en la ronda de preguntas. “¿Con quién viniste?”, le preguntó Guido, a lo que él detalló: “Con mi señora, Patricia, mi hija Aurora y mi tía Graciela”.

“¿Y hace cuánto que salen?”, indagó Guido, que quiso saber más sobre su historia. “Desde 2018″, reveló el participante. “¿Y cómo se conocieron?”, agregó el presentador, quien no se esperaba lo que el jugador iba a contarle sobre los inicios de su relación de pareja. “Yo fui a comprarle materiales para construir mi consultorio. Ella trabajaba en un lugar que vendían porcelanato, ese tipo de cosas”, recordó, para sorpresa de todos los presentes.

¿Y entonces, qué, te lleva a pasear por los lugares que hay por ahí, recorrés como seis, siete baños?”, le dijo el conductor, a lo que Ramón explicó: “Más o menos, sí. Me pasó el teléfono”. Esta respuesta, como era de esperar, dejó sin palabras a Guido, quien lanzó: “¿Y le pediste el teléfono ahí? Nada que ver”. “Y bueno Guido, uno maneja más o menos la cosa. Y la primera pregunta que le hago, un viernes a la noche, es si vendía pastina”, se sinceró el participante, al respecto del producto que se necesita para las construcciones.

“¿Qué, de la nada, le mandaste un mensaje, viernes por la noche, por la pastina a la vendedora?”, expresó el conductor del programa de entretenimiento, realmente sorprendido por el método de conquista. “Claro”, asintió él, entre risas. “Y ella pensaba que yo le había mandado un mensaje para salir a tomar un trago, no para que le pregunte por una pastina”, siguió el hombre.

“¿Y entonces?”, quiso saber Guido, ya totalmente desconcertado por lo que escuchaba. “Y nada, ahí empezó un ida y vuelta…”, le dijo Ramón. “‘Pero qué pastina pavote’, te puso, ‘quiero salir’”, sentenció Guido, con humor. “Y bueno, más o menos”, cerró Ramón. Claramente, la situación hizo reír a todos los presentes.