Abrirse a nuevas experiencias, y otras 8 lecciones que tus hijos pueden aprender en un viaje

Texto: Bárbara Asnaghi

Los niños suelen entusiasmarse a la hora de viajar. Trasladarse hacia lo desconocido en compañía de su familia, les da la expectativa de vivir una aventura, sin abandonar la seguridad del hogar. Y al regresar, probablemente se lleven consigo valiosas lecciones de esa experiencia, como las que siguen.

Viajar puede enseñarle mucho a tus hijos. - Foto: Hero Images / Getty Images

· Ser responsable

Si el niño no es demasiado pequeño, podrá llevar su propio equipaje o mochila, y encargarse de mantenerla “a salvo” durante todo el viaje. Este aprendizaje le servirá luego para cuidar sus pertenencias al ir a la escuela, de visita en casa de sus amigos, e incluso cuando crezca, como se detalla en la revista Lonely Planet.

· Manejarse sin tecnología

Un viaje puede ser una excelente oportunidad para desconectarse (literalmente). En muchas zonas o momentos, no le será posible utilizar tecnología, ya sea porque no hay Wi-Fi, o no hay en dónde cargar dispositivos, o bien, porque hay demasiado para hacer. Durante un viaje en coche, por ejemplo, le puedes preguntar qué dicen los letreros de distancias y velocidad, qué figuras ve y de qué color son los senderos, para que aprenda a orientarse por sí mismo.

· Usar el dinero

Sobre todo si viajan a un lugar con moneda distinta a la propia, tu hijo tendrá oportunidad de comprender el valor y el uso del dinero. Calcular el cambio de una a otra, usar monedas y billetes distintos, probablemente lo ayude a prestar más atención al uso del dinero cuando vuelva a casa.

· Comunicarse

Si el destino tiene otro idioma, tu hijo podrá beneficiarse de comprender las diferencias y similitudes entre una y otra, y la importancia del lenguaje para comunicarse. Enseñarle a decir “gracias”, “hola” y “por favor” en el otro idioma antes de viajar, puede ser una buena idea.

· Probar nuevos alimentos

A través de la comida se puede viajar también. Probar platillos de otras culturas puede hacer que tu hijo expanda sus horizontes alimenticios y se anime a saborear nuevos alimentos en casa. Por otro lado, podría entender el valor de comer en familia.

· Ser pacientes

En cualquier vacación, algo sale siempre mal. A veces se pierde el equipaje, otra se pierden los viajeros. Otras el clima lluvioso se adueña de la escena. Aprender a lidiar con los imprevistos podría hacer que tus hijos practiquen la paciencia, y luego lo apliquen en su vida cotidiana.

· Vivir de forma más simple

Al viajar, siempre se debe economizar ropa, espacio, y artículos para entretenerse. Eso puede enseñarles a los niños que pueden estar bien y divertirse sin necesidad de tenerlo “todo”.

· Planificar y prever

Un viaje con niños deja poco lugar a la improvisación. Podrías sentarte con ellos antes de viajar, explicarles el itinerario y pedirles que aporten ideas, como señala un artículo de una madre y blogger, en el sitio Chicago Now.

Además, puedes pedirles que antes del viaje armen una lista (escrita o dibujada) de lo que necesitarán. Esto los hará pensar “hacia delante” y adelantarse a las situaciones, una habilidad esencial para la vida adulta.

· Ser más abierto a nuevas experiencias e ideas

El mundo de los niños suele ser reducido. Al viajar, podrán ver que existen otras formas de vivir y de relacionarse, y esto podría ayudarlos a abrirse a nuevas ideas y situaciones una vez que regresen a casa.

¿Qué es lo que más disfrutas de viajar con tus niños?

@Barbaraine

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