Aceite, chocolate, barro y escenas de celos: las anécdotas de Thalía y Eduardo Capetillo a 25 años de Marimar
Un caballo aceitado, lodo de chocolate, barro real y una media tijera genial que nadie grabó. Thalía y Eduardo Capetillo se reencontraron a 25 años de Marimar y regalaron a millones de fanáticos anécdotas y recuerdos de la telenovela que catapultó a la actriz al estrellato a nivel mundial.
“¡25 años después y sigo sintiendo el mismo amor y el mismo cariño hacia Marimar y todo lo que representó y aún sigue representando para mí!”. Con estas palabras, Thalía presentaba en su canal de YouTube el reencuentro con su antiguo galán. “Estoy muy emocionada de tenerlos aquí, porque hoy es un día especial en el que toda la magia se reunió para poder disfrutar de una conversación única que hemos esperado por muchos años”, adelantó la actriz y cantante.
A la hora de darle la bienvenida a Capetillo, lo presentó como un “gran amigo y gran colega” y alguien a quien admira muchísimo. Ya con el galán también en cámara, Thalía recordó que ambos abandonaron el grupo musical Timbiriche el mismo año. Y entonces, llegó el momento que los fanáticos esperaban: el de rememorar los tiempos de Marimar.
“La invitación para participar de la telenovela representó pasar al prime time, y me encantó la propuesta. Fíjate que yo nunca fui bueno para el fútbol, pero eso de que el personaje fuera futbolista me llamó mucho la atención. Ya luego vino el caballo, las botas vaqueras y la chamarra con el cuello levantado”, repasó el actor entre risas. Y Thalía completó la anécdota: “¡Te derretías en la playa! Te ponían un cartón atrás para que el cuello no se cayera. Era muy estereotípica la imagen del galán y de la chica de la novela. ¡Tenías hasta irritada la cara por ese cuello”.
“Pero fue increíble. Desde ese primer día fue un proyecto maravilloso. Tú en ese momento ya eras una megaestrella de la televisión, es importante decirlo”, continuó Capetillo. “Venías de hacer María Mercedes. Para el cuate que hiciera ese personaje, sería como sacarse la lotería” , señaló el actor.
” La escena en la que entramos con un caballo y que se usó en la presentación es uno de los peores recuerdos que tengo. Tú ibas con tus mega jeans, te aceitaron todo, y yo iba con el vestidito, con unos shorts abajo, pero me resbalaba”, recordó la actriz. Y Capetillo explicó: “Es que me aceitaron a mí y también al caballo”.
Pero esa no fue la única escena de la entrada de la novela que trajo problemas. “Fui a tomar clases con un futbolista profesional, Agustín Manso. De hecho, es él quien me tira la pelota en la escena de la presentación para que yo hiciera una media tijera”, recordó Capetillo. Y, entre risas, Thalía acotó, pícara: “Te costaba. Me acuerdo que hiciste un berrinche porque una te salió ‘cañón’ y justo no la grabaron” .
“Me da mucho orgullo vernos, porque es un trabajo que sin duda alguna marcó para mí un antes y un después de mi vida en la televisión. Yo he vivido de la televisión durante muchos años, y el hecho de que aún hoy Marimar siga repitiéndose en tantos lugares y siga estando en primer lugar de audiencia es increíble”, expresó el actor.
Luego, eligió una anécdota para elogiar a su compañera: “Me quedé con la boca cerrada cuanto te vi en esa escena, que es icónica, en la que tienes que recuperar del lodo las perlas de un collar. Yo estuve ahí; nadie me lo contó. No chistaste, lo hiciste al pie de la letra y lo repetiste todas las veces que fue necesario”.
Entonces, la cantante relató: “Estábamos apasionados. Habían preparado el lodo. La productora dijo: ‘Pongámosle chocolate’ e hicieron el chocolate, pero yo lo veía anaranjado. Efectivamente, cuando grabo la primera escena y saco la cadena, se veía naranja. Entonces, me fui a un rinconcito y le dije a la productora que lo hiciéramos bien. Era una escena contundente que iba a repetirse como venganza en el final. Se tenía que hacer de verdad. ¡Después de grabar, me tuve que ir directo al mar!”.
“Apenas cruzaba la puerta, yo me metía en Marimar y tú en Sergio. ¡Éramos bebés! ¡Qué bonita pareja hacíamos!”, se asombró la actriz mientras veían viejas escenas.
En ese momento, Thalía compartió otras imágenes de la telenovela, pero doblada en otros idiomas, como francés, portugués o tagalo. “Es impactante”, indicó Capetillo. Y contó: “Tuve la oportunidad de ir a Filipinas después de que tú hayas estado ahí. Me pidieron que cantara un tema en tagalo. Y me presentaron diciendo: ‘El joven Sergio nos canta un tema en nuestro idioma’. El estadio se venía abajo ¡Mi telonero allí fue Pulgoso, el perro de la telenovela!”.
Thalía decidió entonces leer algunas de las preguntas de sus fans. Uno quería saber si era cierto que Bibi Gaytán, la entonces novia y hoy esposa de Capetillo, se negaba a ver los besos entre su pareja y su excompañera de Timbiriche. “Ese es uno de los grandes mitos, sin dudas. Es importante contarle a la audiencia que grabábamos en dos foros que daban puerta con puerta. Ella estaba grabando Dos mujeres, un camino en un estudio y nosotros Marimar en otro”, explicó el actor.
“Había un monitor afuera de cada estudio que utilizaban los maquilladores, los peinadores o la vestuarista para ver si había que retocar algún detalle. Ese monitor estaba prendido todo el tiempo. ¿Y qué pasaba?”, preguntó Thalía, picante.
Acorralado, Capetillo señaló: “El mito tiene parte de realidad”. En medio de un ataque de risas, Thalía contó su versión. “Era al revés. Tú mandabas a apagar el otro monitor. ¡No querías ver a ‘Poncharello’ [el actor Erick Estrada] besando a tu Bibi!”.
Ya serio, el actor contó que aún hoy le cuesta encarar las escenas románticas. “Lo hemos llevado bastante bien. Lo que pasa es que siempre me he tensado en esas escenas. Creo que tiene que ver con que nunca sabes cómo va a reaccionar la actriz y no quieres quedar mal con ella. He tenido que trabajar con actrices muy guapas y es muy delicado que ella termine pensando que me quiero pasar. Entonces, trato de ser muy mesurado. A veces, me paso para el otro lado y dicen: ‘¿A éste que le pasa?’”.
“¡Qué bueno que lo dices! Porque en las pocas escenas de besos que hemos tenido, que deben haber sido tres, parecía que traías un palo metido. Estabas así, duro, tenso” , remató la actriz.
Más adelante, en otro tamo de la charla, recordaron uno de los momentos más tristes en la vida de la protagonista de la telenovela: la traumática muerte de sus abuelos. Sobre esa escena, la actriz recordó un dato que dejó perplejos a sus seguidores: “Cuando en la telenovela los abuelitos mueren en el incendio del jacal, Ada Carrasco, la actriz que hacía de mi abuelita, muere al otro día en la vida real. ¡Qué fuerte!” .
Los dos agradecieron haber formado parte del proyecto, pero a la hora de contar cuál fue el peor momento que pasaron durante las grabaciones, no lo dudaron. Carrillo eligió “alguna de las insolaciones” que sufrió en la playa”. En tanto, Thalía recordó la escena en un precipicio: “Yo no tenía arnés, ni nada. No había un colchón abajo, nada. ¡Qué atrevidos todos!”.