Anabel Pantoja se reajusta la banda gástrica para frenar el efecto rebote

En la tarde del martes 29, se vivió una máxima preocupación por Anabel Pantoja después de que tuviera que ser hospitalizada de urgencias. “Se mantenía duras penas en pie por el mareo que estaba sufriendo”, afirmaba Kiko Hernández, su compañero en Sálvame. Poco tiempo después, la sobrina de Isabel Pantoja entraba en directo en su programa a través de una llamada telefónica para comunicar lo sucedido.

Anabel Pantoja, antes y después de perder peso (Mediaset/GTres).
Anabel Pantoja, antes y después de perder peso (Mediaset/GTres).

“Fui por un fuerte dolor en la cabeza y también tenía un tapón en el oído”, relató Anabel, quien contó todos los detalles de su ingreso. “Estuve 5 horas en el hospital con pruebas y la vía”, añadió la colabora de Sálvame. Hasta la joven tuvo que someterse a un TAC para completar su evaluación clínico.

A la espera de estos resultados, la sobrina de Pantoja ya prevé regresar pronto al hospital por motivos estéticos. En concreto, quiere reajustarse la banda gástrica que le colocaron en 2013 para controlar sus problemas con la báscula. Es el dispositivo con el que consiguió perder 30 kilos y el mismo con el que Kiko Rivera alcanzó su actual silueta.

Sin embargo, parece que la situación de Anabel no está totalmente estable y, después de adelgazar tanto, está sufriendo en sus propias carnes –y nunca mejor dicho– el temido efecto rebote. Y es que es algo contra lo que lleva luchando la colaboradora de Sálvame desde que era adolescente: con sólo 18 años, llegó alcanzar los 100 kilos.

¿Merece la pena arriesgarse a pasar por quirófano? ¿No es mejor conseguirlo a base de dieta y deporte? ¿O, algo mejor, asumir que no pasa nada por tener unos kilos de más?