Aunque no te lo creas, estos desayunos te pueden ayudar a perder peso

Hay algo en los desayunos que lo convierten en la comida más especial del día. No es solo que nutricionistas y expertos digan, cada dos por tres, que “no hay que saltársela bajo ningún concepto y que es la más importante”. No, lo que queremos decir va mucho más allá. Para empezar, tiene su propia edición especial, el brunch, y en determinados fines de semana somos capaces de sacrificar el almuerzo en detrimento de ésta. Cuando estamos de vacaciones en hoteles (¡y lo tenemos incluido!) es la comida estrella y, además, muchos llegamos a afirmar que sin el café de la mañana “no somos personas”. Si la toma o no de una comida es capaz de anular nuestra humanidad, es de debe ser importante… Y ahí va otro argumento más en su favor: lo que desayunes puede ayudarte si estás buscando perder peso. Ajá. Como lo oyes. Los señores de la bata blanca han descubierto, con el paso de los años, que hay comidas que, tomadas a primera hora de la mañana, ayuda a adelgazar. Toma nota porque te van a sorprender.

Huevos para desayunar, una gran opción para perder peso (Pexels)
Huevos para desayunar, una gran opción para perder peso (Pexels)

Huevos. Un estudio desarrollado en la universidad estadounidense de San Luis dictaminó que tomar dos huevos por la mañana echaba un cable con la pérdida de peso a aquellas personas que estaban siguiendo algún tipo de dieta para adelgazar. La prueba se hizo durante ocho semanas con dos grupos de voluntarios y los que habían tomado huevos redujeron peso, grasa corporal y la circunferencia de su cintura.

Carne de pollo y brócoli, un desayuno sano (Pexels)
Carne de pollo y brócoli, un desayuno sano (Pexels)

Carne. En 2016, el entrenador personal británico Greg Cornthwaite, descubrió que comer carne en el desayuno puede ayudar a perder peso y grasa corporal. La prueba la realizó con raciones de 500 calorías ricas en proteínas como un pincho de carne con brócoli al vapor. Otra cosa es que eso apetezca por la mañana, claro…

El pescado puede ser una buena opción para empezar el día (Pixabay)
El pescado puede ser una buena opción para empezar el día (Pixabay)

Pescado. Los japoneses son aficionados a tomar pescado para desayunar y no es una opción nada desdeñable para mantenerse delgado. Si sustituimos las calorías de los cereales y la leche por las proteínas del pescado, estaremos haciendo que nuestra primera comida del día sea mucho más saludable.

Un poco de pastel de chocolate para desayunar está bien, dice la ciencia (Pixabay)
Un poco de pastel de chocolate para desayunar está bien, dice la ciencia (Pixabay)

Pastel de chocolate. Hace cinco años, un estudio de la Universidad de Tel Aviv (Israel) concluyó que tomar una ración de pastel de chocolate como parte de un desayuno completo podía ayudar con la pérdida de peso. La razón esgrimida por los científicos era que las personas que se daban ese capricho tenían menos antojo de picoteo el resto del día y, por tanto, comían menos a la larga.

La mantequilla de cacahuete sí puede ser un buen desayuno (Wikipedia)
La mantequilla de cacahuete sí puede ser un buen desayuno (Wikipedia)

Mantequilla de cacahuete. Aunque parezca descabellado y nos suene a desayuno alto n calorías, lo cierto es que la mantequilla de cacahuete es grasa saludable que, además, contiene proteínas. Por ello, es una opción de desayuno más saludable que otras que, en el medio plazo, nos puede echar un cable para quitarnos unos kilitos.

Tomar porridge para desayunar está bien (Flickr)
Tomar porridge para desayunar está bien (Flickr)

Avena. El ‘porridge’ británico, hecho a partir de avena, está considerado como uno de los mejores desayunos para mantenerse en forma. Según un estudio publicado en el Journal of the American College of Nutrition, la avena te mantiene satisfecho durante más tiempo que, por ejemplo, los cereales industriales y te aporta muchas menos calorías.

Un gran desayuno puede ayudar a adelgazar (Flickr)
Un gran desayuno puede ayudar a adelgazar (Flickr)

Mucha cantidad. Los investigadores de la Universidad de Loma Linda, en California, han concluido que tomar un desayuno contundente ayuda a la pérdida de peso. Lo que proponen estos expertos es ese viejo dicho de abuela de “desayunar como un rey”, para luego comer con más moderación, evitar el picoteo entre horas e incluso ahorrarnos la cena, cambiándola por una merienda tardía. Al parecer, cuantas más horas pasen entre la comida del día anterior y el (sustancioso) desayuno de la mañana siguiente, mucho mejor para nuestro cuerpo.