Cabeceras originales y muy económicas

Las cabeceras de las camas son parte importante de la decoración pero además son prácticos ya que ayudan a que las almohadas no se caigan y otorgan soporte a tu cabeza al dormir pero no todas las camas tienen un respaldo incorporado y es ahí dónde tienes que comprar un respaldo o cabecera que a veces te cuesta hasta casi lo mismo que la cama en sí. Ya sea sólo por decoración o por comodidad hoy te propongo que armes tus propias cabeceras con lo que tengas a mano o guardado tal vez en el garage o ático, gastando muy poco dinero; además, serán muy originales.

Espejos

Si conservas algún espejo antiguo de pie puedes usarlo como cabecera en tu cama. Sólo debes tener en cuenta que el ancho del mismo coincida con la cama, los espejos antigüos de tres paneles quedan estupendos y si tu espejo no es de pie pero tiene el ancho de la cama puedes colgarlo sobre la cama a la altura de la cabecera. No te preocupes por la regla del Feng-Shui sobre los espejos en los cuartos ya que lo importante en esta técnica es que no puedas verte reflejada en el mismo mientras duermes. Este respaldo no es recomendable para un cuarto de niños ya que si el espejo se rompe puede lastimarlos.

Puertas

¡Esta es otra original idea! Utilizando puertas antigüas o que tengan algún detalle de molduras puedes colgarlas en la cabecera de la cama creando diferentes posibilidades con pintura y colocándolas de forma horizontal o vertical dependiendo el tamaño de la cama. Puedes pintarla del color que desees y dibujarle detalles de flores, animalitos o lo que quieras para el cuarto de los niños.

Pintura en spray

Esta es la idea más simple y económica que puedas encontrar. Si tienes restos de pintura en spray prueba pintar un respaldo sobre la pared de la cabecera, puedes dibujar con lápiz primero la forma para no cometer errores. Los que mejor quedan son los que imitan a las cabeceras de hierro con barrotes y formas redondeadas puedes usar colores que combinen con la decoración del cuarto o colores metálicos o fluorescentes para un toque más atrevido.

Con telas

Puedes lograr cabeceras decorativas colgando un palo o barral de cortina y colgando de allí almohadas forradas, esta idea te da la posibilidad de cambiar la cabecera cada vez que cambies el color de la sobrecama. El palo o barral puedes pintarlo en los colores que desees o, si es de madera, puedes teñirlo para que combine con el mobiliario. Otra buena opción es colgar cortinas o telas desde el techo, este look te hará sentir en un cuento de las mil y una noches si utilizas telas livianas cómo gasas, tul o seda en colores vivos. Para un estilo más formal puedes utilizar terciopelos.

Pintura y madera

Si alguna vez hiciste trabajos de molduras dentro de tu casa seguro tendrás algunas sobras restantes de molduras decorativas, utilízalas para crear el marco de tu respaldar o cabecera formando un ractángulo del ancho de la cama o las camas y pegándolo sobre la pared. El espacio que queda dentro del rectángulo puedes pintarlo con cualquier color de pintura para diferenciarlo de la pared, si lo estás haciendo para el cuarto de tus niños puedes pintarle además las iniciales de cada uno para diferenciar sus camas. Los marcos puedes pintarlos o teñirlos del color que desees, ten en cuenta pintar primero la pared antes de colocar la moldura. Otra opción es utilizar restos de papel tapiz o de empapelar en lugar de la pintura o si si tienes restos de tela los cuáles puedes pegar a la pared utilizándo una mezcla de almidón y agua. Las combinaciones son infinitas.

Si a tu hijo adolescente le gusta el surf aprovecha una de sus tablas para usarla de cabecera utilizándo dos soportes de metal, ¡será una idea cool y divertida! Cómo verás con un poco de imaginación se pueden resolver algunas cosas sin gastar dinero, no dejes de pensar fuera del molde y te asombrarás ti misma de los resultados.

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